Incendio destruyó una vivienda en villa Doña Rosa
CHILLÁN. Un matrimonio y sus dos hijos quedaron damnificados.
Pánico. Esa fue la palabra que Fanny Araya, vecina de la calle Estero del Salto, en la villa Doña Rosa, utilizó para referirse al incendio que ayer redujo a cenizas una vivienda.
Justamente la mujer, candidata a diputada, vive a un costado de la casa siniestrada, que comenzó a arder alrededor de las 16.05 horas. "Sentí una explosión y salí de la casa a mirar si había ocurrido un choque, pero vi mucho humo. Poco después, comenzaron las llamas. Parecía un infierno", relató Araya.
Al lugar llegaron cuatro compañías de bomberos. "La emergencia se debió a un incendio estructural, y rápidamente se comenzó a trabajar en evitar la propagación", señaló Esteban Abarca, tercer comandante del Cuerpo de Bomberos Chillán.
Los vecinos le informaron a los voluntarios bomberiles que en la vivienda, "en su interior habría un menor. Se están estableciendo las búsquedas correspondientes para descartar cualquier tipo de desgracia", indicó el comandante.
Fue por ello que causó principal preocupación el estado de salud del joven de 14 años, quien hasta el cierre de esta edición estaba inubicable; no obstante, tras un acucioso recorrido por la vivienda, los bomberos sólo encontraron un perro, que era la mascota de la familia, y que resultó calcinado.
Al momento del incendio, señalaron vecinos, no habían moradores en la vivienda; no obstante, vive un matrimonio y sus dos hijos, de 14 y 4 años. Todos ellos habrían resultado ilesos, ya que se encontraban en otra casa, cercana a la población.
Personal de la Dideco se acercó al domicilio para atender la situación de la familia, que quedó damnificada tras el incendio. Hasta ahora las causas del origen del fuego son desconocidas, y el Departamento de Estudios Técnicos de Bomberos de Chillán está realizando las pesquisas.
Ayuda de vecinos
Las viviendas colindantes con la casa siniestrada corrieron un serio riesgo, por ello, según relataron los vecinos, fue importante el trabajo en equipo para retirar los muebles, previniendo un desastre de mayores proporciones. Pese a los intentos por controlar el fuego con mangueras domésticas, nada pudieron hacer para salvar la casa donde empezó el fuego.