Villa Santa Elvira busca recuperar las tradiciones y la unidad vecinalChillán, ciudad patrimonial
Daniela Méndez Aedo
Ferias, monumentos y celebraciones patrimoniales son algunas de las iniciativas que los vecinos de la Villa Santa Elvira de Chillán están realizando para recuperar las tradiciones y la unidad vecinal del barrio, que acaba de celebrar su aniversario, a pesar de que no tienen una fecha exacta del momento en el que se fundó la población.
Desde hace muchos años, el barrio se ha caracterizado por mantener su patrimonio; su nombre, en tanto, se debería a una viuda conocida por sus obras benéficas sociales.
Sus vecinos tienen muy claras las proyecciones que desean, que están basadas en mantener los lazos de amistad y de compañerismo, además de seguir incentivando la participación ciudadana, que les ha dado esta identidad.
Los vecinos más antiguos del sector, y los más jóvenes que han decidido interesarse por la historia y la recuperación patrimonial, han notado cómo ha ido evolucionando la Villa Santa Elvira, destacando que a lo largo de los años la infraestructura de casas y calles, además del acceso a las tecnologías, han sido uno de los cambios más radicales que han experimentado.
Graciela Cruces, por ejemplo, lleva 40 años viviendo en la Villa, y cuenta que "cuando llegamos era un campo, no habían vehículos, las calles eran de tierra y andaban animales".
Cruces recordó también la calle Diego de Almagro, "que tenía puros hoyos, no estaba pavimentada, ni nada. Ni siquiera teníamos luz, las casas sí, pero el alumbrado público estaba todo oscuro", y agregó que "el Canal de la Luz antes estaba abierto, solíamos bañarnos ahí, ahora taparon porque había un colegio y un niñito cayó y se ahogó, era peligroso".
Sara Mercado es santiaguina, pero durante toda su vida visitó la Villa Santa Elvira y sus alrededores, para años más tarde mudarse con sus tres hijos a la ciudad, en el año 1974.
"Antes aquí era pura tierra, la línea del tren estaba cerca. Ha evolucionado súper bien en cuanto a la infraestructura, me gusta ver cómo ha evolucionado la escuela", manifestó la emprendedora, que a su avanzada edad aún hace artesanías en su taller.
Gabriela Humaña, presidenta recién asumida de la Junta de Vecinos de la Villa Santa Elvira, expresó que la celebración del aniversario, donde tuvo lugar una feria costumbrista con comidas típicas y artesanía elaborada por los mismos vecinos del sector, es una excelente iniciativa para rescatar la unidad entre los habitantes del barrio patrimonial.
No obstante, uno de los objetivos que tiene Humaña durante su presidencia es poder instaurar celebraciones e iniciativas que logren rescatar la unidad, algo que para ella se ha ido perdiendo con los años.
"En evolución material está muy bien, pero en cuanto a lo organizacional estamos muy débiles, necesitamos reforzar eso y recuperar el compartir de barrio, hay vecinos que ni se conocen, yo cuento algunos vecinos de mi alrededor, pero hay que seguir adelante", dijo la dirigenta.
Uno de los hitos que marca el barrio, es la vertiente ubicada en calle República. Este viernes se derrumbaron los muros que la ocultaban para rescatar su historia y patrimonio.
Al respecto, Gabriela Humaña dijo que "si no tenemos la ayuda de los vecinos no vamos a avanzar mucho, ya empezamos, así que como el muro ya se derrumbó, se van a derrumbar mitos y leyendas y si podemos unirnos o no. El desafío es la unión, tanto de nuevas generaciones como de las anteriores".
Entre los planes de la nueva directiva están recuperar costumbres como la Cruz de Mayo, celebrar el Día del Patrimonio, el 25 de mayo, y hacer un gran estofado el día de San Juan, donde ya han podido obtener el compromiso de empresas privadas, para su realización. "Hay voluntad para hacer proyectos nuevos y potenciar las comidas típicas", comentó Humaña.
En este sentido, la "caída del muro", en conmemoración del terremoto del 24 de enero de 1939, es un símbolo para los habitantes, donde incluso muchos de ellos aún sobreviven para contar lo que ocurrió en el mismo lugar.
Más tarde, el arroyo de República pasaría a ser un lugar de encuentro para los vecinos, quienes se dirigían hasta la vertiente para obtener el recurso hídrico, no sólo para consumo humano, sino que también para lavar ropa, bañarse y refrescarse. Todo esto seguía siendo así, hasta hace unos cuatro años atrás, recordaron los vecinos.
Héctor Maureira, vecino comprometido con la historia y el patrimonio de la Villa Santa Elvira, explicó que "otra habría sido la suerte del Chillán sin este ojo de agua, y también para sectores aledaños. Durante bastante tiempo, producto de la comodidad y las facilidades que nos da la vida moderna, este espacio y otros que componen el sistema hídrico del barrio, las venas abiertas del barrio Santa Elvira, donde surtió el agua y se hizo un sistema de arroyo, lavadero y Canal de la Luz, se convirtió en una parte identitaria de nosotros, no puede haber lo uno sin lo otro, el arroyo permitió el funcionamiento del lavadero, el lavadero permitió el desagüe de esa agua hacia el Canal de la Luz, donde los vecinos recuerdan que donde funciona la Escuela 44, originalmente en calle Freire con Sotomayor, salían a lavarse los pies a ese arroyo que corría libremente por las calles. La comodidad y el modernismo hizo olvidar este espacio".
El alcalde de Chillán, Sergio Zarzar, también participó del hito del derrumbe del muro que separaba a los vecinos del arroyo. Al respecto, Zarzar afirmó que "En Chillán, se pierden muchas cosas, y cuando creamos la Unidad de Patrimonio fue justamente para interpretar la necesidad de recuperar a Chillán, y hoy día, independiente del trabajo que hacemos, hay que agradecer a la comunidad, a la Fundación Proyecta Memoria, a la Universidad, al Consejo Nacional de Monumentos, a los vecinos y vecinas, que estamos abocados a recuperar esto que es tan importante y significativo".
Se espera que las obras de recuperación culminen en mayo de 2014, y que el trabajo quede reflejado en un monolito construido por los mismos vecinos de la Villa Santa Elvira.
A raíz del terremoto de 1939, la infraestructura de toda la ciudad se vio alterada, dando lugar a una ciudad con edificios modernos, que desplazaron las edificaciones de adobe que la habían caracterizado anteriormente. María Soledad Díaz, directora de Educación del Consejo Nacional de Monumentos, explicó que Chillán es considerada "dentro del ámbito académico, como un espacio singular de arquitectura moderna, y creo que eso poca gente lo conoce. Edificios como la Copelec, que son monumento nacional, son singulares a nivel internacional incluso". En este sentido, anunció que desarrollarán dos talleres durante el 2014, dirigidos a estudiantes de Enseñanza Básica y Media, para fomentar el patrimonio local.
Gabriela
Humaña
Dirigenta
vecinal
"En cuanto a lo organizacional estamos muy débiles, necesitamos reforzar eso y recuperar el compartir de barrio".
Héctor
Maureira
Historiador
Villa Santa Elvira
"Durante bastante tiempo, producto de la comodidad y las facilidades que nos da la vida moderna (...) se perdió este espacio".
Sara Mercado
Vecina Villa Santa Elvira
"Ha evolucionado
súper bien en cuanto a la infraestructura, me gusta ver cómo ha evolucionado la escuela".
Graciela
Cruces
Vecina Villa Santa Elvira
"Cuando llegamos (a la Villa) era un campo, no habían vehículos, las calles eran de tierra y andaban animales".