San Carlos: El primer municipio en regular a los casinos populares
Félix Arancibia M.
Fueron largos meses en disputa, en donde el municipio de San Carlos dictaminó a través de una ordenanza que alrededor de 70 locatarios de la comuna debían cerrar, debido a que no cumplían con exigencias técnicas para funcionar. Estos requerimientos consistían básicamente en que las máquinas no podían ser de azar, sino que de habilidad y destreza, situación que tenía que ser acreditable por un organismo pertinente en la materia de parte de los dueños de "casinos populares", si es que querían seguir funcionando en el rubro.
No obstante, y tras fuertes conversaciones el municipio Sancarlino finalmente aprobó una ordenanza, la que dictaminaba que todas las máquinas que no estuvieran dentro del catalogo de la Superintendencia de Casinos de Juegos (SCJ) y acreditara a través de peritajes técnicos dicha situación podía funcionar.
Es en ese sentido, que la comuna de San Carlos marca un precedente en dicha materia, debido a que sería el primer municipio en el país en resolver y regular el mercado según el último dictamen emitido por Contraloría, lo que abre la puerta a muchas otras ciudades del país (Concepción, Melipilla y Chillán) que tienen el tema judicializado en Tribunales.
Como un gran logró calificó el Jurista Erick Fredes, lo que sucedió en San Carlos. Tras largas y tensas reuniones con autoridades se llegó a una solución. Finalmente el municipio autorizará el funcionamiento de locales de juegos con máquinas tragamonedas, las cuales podrán operar bajo la rotulación de habilidad y destreza y no de azar.
"El día 24 acaba de ser aprobado la ordenanza municipal numero 31, la cual establece e individualiza todos los procedimientos administrativos por los cuales se puede habilitar la explotación comercial de los llamados mini casinos o maquinas de habilidad y destreza en la comuna, lo que en términos profesionales me pone muy feliz, ya que es un gran logro para el rubro", indicó Fredes.
Según el dictamen emitido el 30 de enero de 2014 por Contraloría, podrán funcionar exclusivamente en las comunas las máquinas que no estén dentro del catálogo de la Superintendencia de Casinos de Juegos (SCJ), eso si, bajo una previa certificación de algún organismo de acreditación nacional e internacional.
"Si llega una máquina que no esté en el catálogo de juegos de la SCJ te genera la convicción de que es una máquina del tipo de habilidad y destreza y no de azar, es decir, entregando un peritaje que la máquina no salga en el catálogo perfectamente las autoridades tendrían que aceptarlos, debido a que es un derecho administrativo permitido por la ley, entonces cualquier prerrogativa por parte del municipio significaría poner instancias adicionales para no permitir la actividad y ahí se estaría faltando a la ley de libre competencia", explicó el jurista.
Luego del cierre de todos los "casinos populares" en Chillán se abre una nueva arista en el caso, ya que con lo ocurrido en San Carlos con la ordenanza y el dictamen emitido por Contraloría, los dueños de dichos establecimientos podrían apelar nuevamente a reabrir sus negocios en la comuna.
Para el asesor legal, Erick Fredes, dicho escenario es posible, debido a que el ente contralor ya entregó una regulación clara de cómo puede funcionar el rubro a través de máquinas debidamente acreditadas, por lo que si un alcalde se opone a dicho escenario estaría pasando por sobre la ley.
"Las apreciaciones personales de las autoridades no están por sobre la ley, es decir, si un alcalde, concejal se oponen a lo que está debidamente establecido en la ley es materia de litigio en los Tribunales de Justicia. Yo lamento mucho por los colegas que lamentablemente asesoraron a los empresarios de Chillán, porque yo estoy antecedentes de lo que aconteció acá. El escenario es que al judicializar esta materia perdemos la oportunidad valiosa de llegar un advenimiento entre ambas partes y regular este mercado", afirmó Fredes.
Asimismo, el jurista agregó que acá el tema no pasa por aspectos morales y personales, sino técnicos, ya que lo que está en disputa es saber si una máquina es de azar o habilidad y destreza.
"El tema fundamental acá es si la máquina es o no es de azar es 100% técnico, no puede verse desde un punto de vista ético. Yo he visto que el alcalde y concejales de Chillán lo han visto desde una arista ética, que el juego produce ludopatía, que hay prostitución, que hay delincuencia, pero no hay nadie que haya comprobado eso. Ellos tomaron una decisión en base a prejuicios y no a lo que la ley establece. Acá en Chillán no se tomaron todos los antecedentes y hubo un vicio de derecho", declaró Fredes.
Según la SCJ, juego de azar es "todo sistema o toda máquina electrónica, electromecánica, eléctrica o que funcione con cualquier otro modo de operación, que permita recibir apuestas en dinero o avaluables en dinero, conceda al usuario un tiempo de uso o de juego, que a través de un sistema aleatorio o de generación de resultados otorgue, eventualmente, un premio en dinero o avaluable en dinero", definición que para el asesor legal Erick Fredes está errada.
"La definición de juego y la definición de azar que sale en la página oficial de la SCJ no está conforme a derecho, porque la definición de juegos de azar no necesariamente significan premios en dinero como ellos lo han establecido, por ende, está viciado eso y lo que es peor Contraloría ha puesto de que las actividades públicas tienen que trabajar en conjunto", expresó Fredes.
Dicho punto es uno de los más cuestionados por el rubro, debido a que las municipalidades a través de la definición de juegos de azar que entrega la SCJ ha generado sus ordenanzas, en donde según Fredes, claramente se está vulnerando las leyes.
Uno de los puntos más importantes de la nueva ordenanza en San Carlos es la certificación de las máquinas, requisito imprescindible para los dueños si es que quieren seguir funcionando normalmente.
Para obtener dicha exigencia, los empresarios deberán desembolsar una fuerte suma de dinero que sobrepasa los 5 millones de pesos, debido a que las certificaciones son realizadas por organismos nacionales e internacionales.
"Una empresa que establezca un peritaje tiene que estar debidamente acreditada. Primeramente, una empresa tiene que estar acreditada bajo la norma ISO 9001-2008, que es un sistema de control de calidad de la gestión y eso está acreditado por el INN, sistema nacional de acreditación, en donde todas la universidades, laboratorios que son debidamente acreditados en su proceso de producción", explicó Fredes.
Es en ese sentido, que si un alcalde niega un permiso a algún empresario del rubro, que está debidamente certificado por alguna empresa competente, el edil estaría incurriendo en una falta, ya que según Fredes un edil no tiene las competencias para discutir esto, debido a que no es un experto perito en el tema.
"Nosotros vamos a derivar todos los requerimientos a la SCJ y ellos nos devolverán la información. Nosotros en base a eso veremos si la máquina es de destreza o de azar".
Hugo Gebrie
alcalde San Carlos
Uno de los conflictos que ve el alcalde de San Carlos, Hugo Gebrie, son las certificaciones de las máquinas tragamonedas. Según el edil, él teme que al municipio lleguen informes no creíbles sobre las máquinas de analistas que quieren hacer parecer a las máquinas de azar en habilidad y destreza. Es por esa razón, que el alcalde va a derivar todas las presentaciones de este tipo a la SCJ, la cual procederá a verificar si las máquinas son de destreza. Hasta el momento, según Gebrie no hay ningún local que haya podido acreditar eso, por lo que todos seguirán cerrados hasta que demuestren lo contrario con peritajes técnicos.