Hospital de Chillán en la nebulosa
Autoridades de Salud del gobierno de la Presidenta Bachelet confirmaron esta semana que el proyecto dejado por la administración anterior está inconcluso.
Una nueva arremetida en relación al proyecto de nuevo Hospital de Chillán realizó esta semana el gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet, a través del seremi de Salud, Mauricio Careaga, quien en entrevista exclusiva con Diario aseveró que tal proyecto no fue terminado en su etapa de diseño, que faltó un porcentaje importante en su etapa de análisis y que por tanto los plazos administrativos para concretarlo serán superiores a los originalmente presupuestados. Tal como lo corroboró asimismo el director del Hospital de Chillán, Dr. Rodrigo Avendaño, actualmente se están corrigiendo observaciones a los antecedentes en poder del Ministerio de Obras Públicas para completar el diseño definitivo.
Tales aseveraciones llenan de dudas a la comunidad, luego que fuera el propio gobierno entrante el que bajara la licitación internacional del proyecto y anunciara que no se construiría con fondos privados, sino públicos.
De esto surgen inmediatamente las preguntas: ¿puede llamarse a una licitación internacional para la construcción de una obra de 80 mil millones de pesos con un proyecto de diseño inconcluso? Tal como se recordará, el 21 de noviembre del año 2013, el Servicio de Salud aprueba anteproyecto arquitectónico del Nuevo Hospital para Ñuble, etapa previa a iniciar el proceso de venta de bases para licitar la concesión del establecimiento de salud.
Durante siete meses, un consorcio chileno-español con experiencia en infraestructura hospitalaria trabajó en el anteproyecto arquitectónico del Nuevo Hospital para Ñuble, tras ganar una licitación para tal efecto. La consultoría del anteproyecto estuvo a cargo del consorcio integrado por la empresa nacional Astudillo Arquitectura Integral y las consultoras españolas Master, Pinearq y Técnicas Reunidas. En este sentido, si a juicio del gobierno estas empresas contratadas bajo un proceso de licitación formal no cumplieron con las bases del contrato cabría una acusación por incumplimiento. De lo contrario, ¿qué debe pensar la comunidad cuando se habla de un proyecto inconcluso y al cual se le deberán hacer observaciones?
En este sentido, la ciudadanía debe permanecer observante frente a este proceso, de tal forma de que el día de mañana pueda exigir al gobierno el mismo ambicioso proyecto ofrecido en concesión, un moderno hospital de 70 mil metros cuadrados y estacionamientos subterráneos -el doble de la superficie que hoy tiene el actual hospital de Chillán-, con equipamiento para apoyo diagnóstico y terapéutico, y un mayor número de camas críticas, destinadas a pacientes complejos que requieren tratamiento intensivo (con 14 pabellones, seis para cirugía mayor ambulatoria).
El actual gobierno ha prometido para el 2015 el inicio de las obras y que por lo mismo no habrá un retraso a los plazos originales. Ñuble y su gente esperan que se cumpla la palabra empeñada.