EE.UU. apoya ofensiva kurda para retomar presa
campaña. La aviación de EE.UU. realizó varios ataques selectivos a posiciones yihadistas para recuperar la estratégica zona.
Las fuerzas kurdas, apoyadas por la aviación estadounidense, activaron ayer una ofensiva para arrebatar a los yihadistas la represa más importante de Irak en Mosul, en el norte del país, donde los extremistas han sido acusados de matar a decenas de aldeanos de la minoría yazidí.
Irak, sumido en el caos desde comienzos de junio, cuando los yihadistas del Estado Islámico lanzaron una importante ofensiva, recibió ayer al menos nueve misiones aéreas de EE.UU. en el norte del país, según información del Pentágono citada por la agencia EFE.
'Más de 23 insurgentes murieron en los ataques cerca de la presa', indicó el general kurdo Abdelrahman Kurini a EFE.
El Centro de Control de Estados Unidos (CENTCOM) dijo que aviones de combate y drones destruyeron o dañaron cuatro vehículos blindados de transporte de tropas, siete vehículos armados, dos vehículos militares Humvee y un carro blindado.
La primera fase de la iniciativa se centró en cuatro aéreas cerca del embalse, cuyo control cayó en manos del EI el 8 de agosto, así como en el paso de Rabia y las localidades de Mahmudia, Telskuf, Zumar y Tilke.
La presa de Mosul es de las principales reservas estratégicas de agua de Irak, con una capacidad de varios millones de metros cúbicos y está localizada a 23 kilómetros al suroeste de la ciudad de Dohuk, en la región del Kurdistán. Se trata de una de las instalaciones estratégicas más importantes de ese país. Además, constituye una amenaza importante para las ciudades iraquíes en caso de producirse un colapso de la misma, ya que está situada en suelo arenoso, por lo que necesita de una continua inyección de cemento.
Kurini aseguró que los servicios de inteligencia confirmaron que un número indeterminado de yihadistas huyeron hacia la localidad de Telafar, 70 kilómetros al oeste de Mosul, debido a los bombardeos.
Los cazas de Estados Unidos destrozaron también una estación de bencina utilizada por los yihadistas para abastecer sus vehículos, según la televisión kurda Rudaw.
Holanda dijo ayer que enviará ayuda humanitaria directamente al Kurdistán de Irak para los desplazados.