Considerando por participación ciudadana la integración de la población en general en los procesos de toma de decisiones, la inclusión colectiva o individual en lo político y el involucramiento activo de la comunidad en el quehacer estatal, es preciso que el sector público en general, y la promoción en salud pública en particular, considere este factor en el diseño, elaboración, ejecución y evaluación de sus políticas, programas y acciones, ya que sólo a través del fortalecimiento de la real participación es posible robustecer la transparencia, eficiencia y eficacia del Estado.
Responder a la participación ciudadana es un deber del sector salud, cuya política sectorial tiene por antecedente la Agenda Pro Participación Ciudadana, que integra dentro de sus ejes programáticos el derecho ciudadano a la información, la gestión pública participativa, el fortalecimiento de la sociedad civil y el respeto a la diversidad.
Dicha participación implica avanzar en instalar una cultura de corresponsabilidad, en la cual cada persona natural y jurídica se sienta convocada a participar en la construcción de políticas públicas sostenibles y sustentables.
Supone, además, realizar un análisis de las necesidades de la población, escuchar sus demandas, considerar sus puntos de vista, abrir canales de participación, generar instancias de diálogo respecto a tópicos de interés público, establecer procedimientos y aplicar instrumentos, orientados a incorporar la participación en cada etapa y proceso del quehacer institucional.
La consecución de ese nivel de participación cobra relevancia para el sector salud, ya que otorga legitimidad a las acciones emprendidas, incrementa la adhesión a campañas de bien público, y fideliza a los usuarios, con la consecuente repercusión en mejoras de coberturas y fortalecimiento corporativo.
La participación establece un contrapeso que transmite de manera más eficiente las preferencias de los ciudadanos; media ante conflicto, favorece acuerdos, y aporta una mirada social al establecimiento de soluciones.
La participación contribuye a la mejora de la gestión, y en dicho contexto, es un desafío de la Seremi de Salud del Bio Bío, fortalecer este campo de acción, agrupando las acciones sociales realizadas por sus departamentos, estableciendo mecanismos de retroalimentación con la comunidad y sus actores territoriales y funcionales, que oriente o acompañe técnicamente el accionar de la comunidad en esta materia, o que monitoree o evalúe las acciones emprendidas por la propia sociedad, para contribuir a una salud pública de calidad.