Nadie podría negar que Aretha Franklin es una diva, y no por nada la llaman la 'reina del soul'. Pero la artista se sacó su corona para homenajear a las otras reinas de la música a través de su disco 'Aretha Franklin Sings the Great Diva Classics', que saldrá a la venta el 21 de octubre.
A sus 72 años, Franklin vuelve a la música porque, según cuenta, le obliga 'a estar en buena forma, a tener el mejor aspecto posible'. La cantante presentó ayer en Nueva York su nuevo disco, en el que hace suyos temas de divas de la música, desde Adele y Alicia Keys a clásicas como Etta James o Barbra Streisand.
Y a pesar de que muchos no han dudado en destacar a Aretha Franklin como una de las figuras más influyentes de la música, desde el Olimpo del soul, la mujer que logró convertir en himnos canciones como 'Think', 'Respect' o 'Say a Little Prayer for You', ahora mira con una humildad a sus sucesoras, para quienes abrió el camino.
De Adele, de quien ha reversionado 'Rolling in the Deep', dice que le gusta la profundidad de sus composiciones. De Beyonce que, como ella y su antigua banda, Destiny's Child, también es una 'survivor' (superviviente) deja entrever ese tema al final de su versión de 'I Will Survive', de Gloria Gaynor.
En el nuevo disco la diva también canta la canción 'No One', de Alicia Keys y convierte en una pieza de sofisticado jazz el clásico de los 90 'Nothing Compares 2 U', de la irlandesa Sinead O'Connor.
Más de 50 años después de haber logrado conquistar al mundo con su potente voz, la cantante parece estar decidida a mirar el presente cara a cara y a reconocer que la única manera de mantenerse actual es 'amar la música', especialmente 'la de aquellas cantantes que realmente saben cantar', dijo en clara referencia a una industria del pop cada vez más prefabricada.
Una realidad muy distinta a la que vivió en los inicios de su carrera, que comenzó en el coro de una iglesia, lejos de las luces y el ambiente bohemio de la escena musical afroamericana. 'Para mí la iglesia no fue solo un lugar de fuerza espiritual, sino también un campo de entrenamiento, donde aprendí a cantar delante de docenas de personas', rememoró.
Franklin pasó de cobrar a su propio padre 50 dólares por cantar en las misas que él oficiaba como pastor 'para comprar patines y hamburguesas', recordó, a vender millones de discos, llenar estadios, ser coronada como la 'reina del soul' y lograr el reconocimiento de la industria sumando en total 18 premios Grammy.
Por ese mismo origen. la artista no se olvida de su padre, que es la persona que más la ha marcado y 'quien realmente marcó mi vida y se dio cuenta de que tenía una voz y debía cantar', ni tampoco de la legendaria firma de discos Motown. 'He hecho ganar mucho dinero a esa gente', bromeó.
En un repaso a su vida, habla de Jerry Lewis ('era mucho más que una broma', dice) y de James Brown. Y cuando le preguntan quién le gustaría que se encargara de protagonizar una película sobre su vida, responde: 'Probablemente Jennifer Hudson'.
En su nuevo disco no sólo mira a nuevos astros. El álbum abre por 'At last', de Etta James, y transita por clásicos de Gladys Knight como 'Midnight Train to Georgia', de Barbra Streisand, con 'People', y de Whitney Houston en 'I'm Every Woman'.
Aunque si le piden que escoja una y sólo una de las interpretaciones que ha hecho en 50 años de carrera, recuerda su participación en la investidura del Presidente de Estados Unidos Barack Obama.
'Por lo que implicó ese momento, por ser la primera vez que un afroamericano llega a la presidencia del país y por el hecho de que las primeras veces solo ocurren una sola vez, doy gracias a Dios por haber formado parte de ese momento', concluyó.
La influencia de Aretha Frankiln es tal que la revista Rolling Stone la nombró una de las 100 cantantes más grandes de todos los tiempos. Pero la importancia de la cantante no ha sido sólo a nivel musical. Franklin comenzó su carrera justo en una época en que el movimiento racial en Estados Unidos estaba en su punto más álgido, por lo que fue clave en su éxito su postura a favor de la igualdad de derechos para su etnia.
La artista además tuvo gran influencia en los movimientos de liberación femenina, a los que aportó a través del discurso feminista que se puede encontrar en varias de sus canciones.