Onemi mantiene la Alerta Roja por incendios no controlados
emergencia. Incendio de Larqui aún no es contenido por Conaf. Seremi de Salud, en tanto, visitó empresa MaxAgro, que estimó pérdida de $200 millones por muerte de 3.200 cerdos.
Al menos 200 millones de pesos en pérdidas es la estimación que realizaron desde la empresa MaxAgro, en el día después del incendio que arrasó con un plantel completo de porcinos.
Fueron en total 3.200 cerdos lechones los que fueron consumidos por las llamas del siniestro más grande de la temporada en Ñuble, el cual ha arrasado con más de mil hectáreas, y que hasta ayer en la tarde aún dio trabajo para los bomberos de Chillán y brigadistas de Conaf, quienes tuvieron que movilizar también 5 equipos aéreos para combatir las llamas que afectaron al sector Quillay, en Chillán Viejo.
En relación a la empresa afectada por el incendio forestal, ésta inició las labores de retiro de escombros de los planteles, además de los cerdos que perecieron con el abundante humo que pasadas las 4 de la tarde llegó hasta el sector de Rucapequén.
Retiro de porcinos
Durante la tarde de ayer, la gobernadora de la provincia de Ñuble, Lorena Vera, acompañó al delegado provincial de la Secretaría Regional Ministerial (Seremi) de Salud, Luis Rivera, quien inspeccionó las labores de limpieza del lugar, con el fin de dirigir protocolos, ante una eventual emergencia sanitaria que podrían ocasionar los cerdos en descomposición.
Además, la autoridad provincial aprovechó de conocer en terreno los daños que dejó el siniestro, entrevistándose con el gerente industrial de la empresa ganadera, quien le comunicó que pese a las cuantiosas pérdidas en infraestructura, equipamiento y animales, no habrán despidos de trabajadores.
"Junto con supervisar la inspección, nos tenía preocupada la situación de los trabajadores, pero ahora quedamos más calmados porque no va a haber ningún despido y serán reubicados en sus labores", comentó Vera.
Pablo Espinoza, en tanto, aseguró que "esta planta está ubicada en Rucapequén hace 20 años y nunca había pasado algo como esta emergencia", indicó Pablo Espinoza, quien precisó que desde Santiago, donde se encuentra la casa matriz de la empresa, instruyeron las medidas de contingencia.
"Lo primero que hicimos fue preocuparnos de nuestro personal. El segundo paso fue tener agua y alimento para los cerdos que quedaban, para que no produjeran más problemas. Y por último, como tercer paso, sacar los restos de los cerdos y llevarlos hasta un vertedero autorizado", comentó Espinoza, quien estimó que durante esta mañana completarán el proceso de retiro y limpieza del sitio antes de comenzar con la reconstrucción del plantel.
Pese a la significativa cifra de cerdos fallecidos, desde la empresa señalaron que es un porcentaje inferior, dado que en todo Rucapequén habita un total de 45 mil cerdos que están ubicados en distintos planteles, dependiendo de la fase de crecimiento en que se encuentren.
Asimismo, informaron que el perjuicio económico aumentará notablemente cuando consideren las hectáreas consumidas, ya que de acuerdo a la información proporcionada, de un total de 200 hectáreas que cubre su terreno en Rucapequén, cerca de un 75%, entre bosque de árbol nativo y plantado, quedó hecho cenizas.
Con respecto al trabajo que informaron al SAG y la Seremi de Salud, indicaron que "estamos trabajando coordinados con ellos, acogiendo sus ideas, para complementarlo lo más rápido posible.
Por su parte, el delegado provincial de la Seremi de Salud, Luis Rivera, comentó que "especial encargo de nuestro Seremi de Salud, Mauricio Careaga, nos constituimos en el lugar con la unidad de Gestión Ambiental y Saneamiento Base para conocer la situación en el plantel. Además, prestamos nuestro apoyo, verificando cuál era el plan de contingencia y estamos en contacto con la industria para ver cómo los podemos orientar en esta situación, en que también debemos fiscalizar que todo se desarrolle en orden".
En la misma línea de fiscalización, Rivera adujo que tras un recorrido por la zona y la inspección que realizaron dos veces durante el día, "se pudo constatar que se están cumpliendo las cosas que estamos pidiendo, que en el fondo son aplicar reglas mínimas de sanidad para que la comunidad no se vea afectada por esta situación".
Pablo Espinoza, en tanto, como Gerente de la empresa, precisó que tuvieron que contratar una empresa externa para que hiciera retiro del material que cubría el plantel, dado que la temperatura aún era tóxica en el terreno, que también está rodeado de desechos tóxicos, los cuales fueron clave en la propagación de las llamas, y la nula posibilidad de retirar con vida a los porcinos que fallecieron.
Incendio sin control
Al finalizar el día y el cierre de esta edición, el director provincial de Conaf, Francisco Castillo, estimó en 300 las hectáreas que durante el día de ayer siguieron consumiéndose, a raíz del incendio que se propagó desde Larqui, en la comuna de Bulnes.
Junto a los cuerpos de bomberos, provenientes de distintas comunas de la provincia, trabajaron los brigadistas de Conaf, quienes también fueron apoyados hasta que anocheció por 1 helicóptero y 5 aviones; de los cuales, dos pertenecen a Conaf y tres al gobierno Argentino, que en los últimos días envió los modelos Air Tracktor para que ayudaran a controlar las llamas.
"Este incendio no lo hemos entregado controlado y con suerte lo hemos contenido en algunos momentos, pero en la tarde hubo propagación no contenida en el sector de Quillay y se está trabajando en su contención nuevamente", comentó Francisco Castillo, quien afirmó que durante el día de hoy deberán continuar con las labores que permitan extinguir el siniestro.
Según comentó el mismo Castillo, las principales dificultades de este incendio forestal han estado dadas por las condiciones meteorológicas, en que hay altas temperaturas junto a una brisa que ayuda a la propagación. Asimismo, hay que sumarle el esfuerzo de los brigadistas, quienes vienen trabajando intensamente desde el sábado, cuando la Oficina Nacional de Emergencias (Onemi) decretó la Alerta Roja para toda la región.
"Las condiciones no han sido nada favorables para los brigadistas, porque además ha habido una simultaneidad de incendios y la distribución del personal en todos estos focos los ha llevado al sobreesfuerzo, porque trabajaron hasta las 3 de la madrugada (de ayer); así ha ocurrido desde el sábado, con un trabajo extenuante", aseveró Castillo.
Respecto al área afectada, el director provincial de Conaf comentó que el pasado lunes pudieron recorrer la zona en helicóptero, pudiendo realizar una medición; sin embargo, las labores de ayer impidieron tener el catastro actualizado, por lo que estimó, en terreno, que alrededor de 300 hectáreas más fueron consumidas.
Alerta roja
Durante la tarde de ayer, las autoridades regionales especularon una posible baja en la alerta roja, que obligaba a tener a los brigadistas acuartelados y una especial atención ante la inyección de recursos necesarios para enviar la ayuda.
Sin embargo, pasadas las 20 horas, desde la Gobernación confirmaron que, dadas las condiciones meteorológicas pronosticadas, junto al alto número de focos de incendios, la alerta roja se mantiene.
Asimismo, confirmaron que los esfuerzos estarán concentrados en el incendio que ahora se ubica en Quillay, de Chillán Viejo, como también en Pemuco, donde el incendio está en fase "contenido".
"Las condiciones no han sido nada favorables para los brigadistas, porque además ha habido una simultaneidad de incendios y la distribución del personal en todos estos focos".
Director provincial de Conaf
Durante el día de ayer, la atención de Conaf estuvo centrada en el incendio de Pemuco, que aún se encuentra en fase de contención, mientras que la otra gran parte de los recursos materiales y humanos trabajan en Quillay (Chillán Viejo). No obstante, durante el día, bomberos y brigadistas asistieron a emergencias en Quillón (ver página 3), al igual que en el sector de Nueva Aldea, en Ránquil, donde Bomberos tuvieron que resguardar una bencinera que se vio amenazada. El superintendente de Bomberos de Chillán, Héctor Muñoz, comentó que la situación, afortunadamente, no fue de gravedad y tampoco requirió refuerzo para extinguir las llamas.
5 mil hectáreas
de bosque, matorral y pastizal han sido consumidos por incendios forestales en la provincia de Ñuble durante esta temporada.
3 aviones argentinos
Concurrieron durante el día de ayer a la zona para combatir el incendio que se inició en Larqui (Bulnes) y que ayer se había extendido hacia el sector de Quillay, en Chillán Viejo.
Retiro de porcinos
Se espera que durante esta jornada, la empresa MaxAgro termine de retirar los restos que resultaron calcinados, el pasado lunes, en el incendio de Larqui.
Fiscalización preventiva
La Seremi de Salud, junto al SAG inspeccionaron las labores de retiro de cerdos afectados por incendio, con el fin de prevenir una eventual alerta sanitaria por la situación de emergencia.
5 días de alerta roja
Ha permanecido en la región del Bío Bío, luego que la ONEMI la declarara el pasado sábado. Brigadistas están sobreexigidos.
75% quemado
Resultó el predio de MaxAgro, en un terreno que abarca 200 hectáreas. Según afirmaron desde la gerencia de la empresa, esta emergencia es la peor de los últimos 20 años.
1.350 hectáreas
Es el área de matorrales, pastizales y bosque que hasta ayer había consumido el incendio iniciado en Bulnes, y que se extendió hasta el sector de Quillay, en Chillán Viejo.