microempresaria que aprendió a expresar sus ideas en la artesanía
manualidades. Chillaneja cuenta sus inicios como emprendedora y el crecimiento que ha experimentado gracias al apoyo familiar y del Fondo Esperanza.
La chillaneja Marcia Salgado lleva el comercio en su sangre y en un momento de su vida decidió trasformar ese legado en una forma de generar sus propios ingresos.
Cuando era una niña veía como su abuelo salía a ofrecer frutas y verduras por las calles.
"Recuerdo que cuando era adolescente empecé a vender harina tostada, porque de verdad me gusta el rubro", recuerda.
Pero también Marcia disfrutaba también con la artesanía y la decoración.
"Así fue que decidí emprender haciendo manualidades", comenta Marcia.
DECORACIÓN
Marcia Salgado cuenta que han pasado años desde que entró de lleno en el tema de la decoración, comercializando sus creaciones.
Hoy, con el paso del tiempo, ha empezado a generar ingresos gracias a lo que realiza. "Porque tengo mis clientes y la gente se va pasado el dato, muchos vienen directamente a mi casa", destaca Marcia.
TÉCNICAS
El término decoupage, del francés "recortar", es una técnica manual decorativa en la que se emplean papeles impresos o telas para pegar sobre distintos soportes varios como madera, o cerámicos.
Con ella se busca que al finalizar lo obtenido imite la pintura a mano, utilizando técnicas de pátinas y pintura, distribuyendo correctamente los recortes y dando un acabado con barniz.
Esa es precisamente una de las técnicas aplicadas por Marcia, gracias a la labor que también le ayuda su marido.
"Él trabaja haciendo estructuras en madera como marcos, mesas y cajas pequeñas sobre las que aplico la técnica de decoupage, así que nos apoyamos mutuamente", relata.
Una técnica bien aplicada y que ha traspasado fronteras gracias al Facebook Marciartesanias.
"Impactante. Bello. Sublime. Es una obra espectacular", así describe la argentina Any Lebron, tras observar sus trabajos publicados en su página.
APOYO
Las habilidades personales, la vocación, el deseo y la técnica de un emprendedor logran concertarse muchas gracias al apoyo que le puedan brindar amigos, personas o instituciones.
En el caso de Marcia Salgado, ella contó además con el respaldo de Fondo Esperanza, que se convirtió en sinónimo de crecimiento.
Su arribo a esta entidad fue gracias a otras personas, quien la invitó a participar.
"Llegué el 2010 a la institución y desde entonces he logrado muchas cosas: compré maquinaria, insumos, servilletas decorativas, etc.
Agrega que estos años han sido muy positivos para ella, sobre todo por las capacitaciones.
"Esta institución nos ayuda a crecer como personas, ahora siento que aprendí a expresar mis ideas sin temor", afirma Marcia Salgado.