El cierre del escrutinio provisional confirmó ayer la victoria del oficialista Daniel Scioli en las elecciones primarias a la Presidencia argentina, con ocho puntos de ventaja sobre la coalición liderada por el conservador Mauricio Macri, aunque la cautela domina la lectura de resultados.
Con el 97,84% de las mesas de votación escrutadas, el recuento otorgó a Scioli un 38,41% de apoyo frente al 30,07% obtenido por la coalición opositora Cambiemos, que englobaba la candidatura de Macri (24,24%), del radical Ernesto Sanz (3,45%) y de la diputada de Coalición Cívica ARI Elisa Carrió (2,34%).
En tercer lugar se posicionó la coalición peronista disidente Una Nueva Alternativa (UNA), con un 20,63% de votos que consolidan a Sergio Massa como tercera vía, con un caudal electoral codiciado por kirchnerismo y conservadores.
"Tomamos este triunfo con humildad y gratitud hacia los ocho millones de argentinos que nos dieron su respaldo (...) Vamos a trabajar muy arduo a convocar, convencer y persuadir a la mayor cantidad de argentinos posibles", dijo Scioli.
El gobernador saliente de la provincia de Buenos Aires destacó los 14 puntos porcentuales que lo separan de la candidatura individual de Macri y abogó por buscar "los mayores puntos de la cultura del encuentro".
"Si hay un espacio que interpreta las necesidades de la gente y que busca darles respuesta es este y después seguramente eso va a tener, adhesión, respaldo, de la política", añadió.
Macri también encontró motivos para celebrar sus resultados al afirmar que este es "el escenario que no querían" en el kirchnerismo, ya que "quedó claramente establecido que aquí va a haber segunda vuelta" tras los comicios generales del 25 de octubre.
Para acceder en primera vuelta a la Jefatura de Estado argentina es necesario obtener el 45% de los votos en las generales o más del 40% con una diferencia de diez puntos sobre el más inmediato rival.
"Si se repite este resultado en octubre sería fantástico", agregó el líder de Propuesta Republicana (Pro), en declaraciones a los medios locales. Macri también manifestó su confianza en otros espacios para plantear una alternativa al oficialismo y señaló que tiene "coincidencias de fondo" con Sergio Massa.
Por su parte, el candidato presidencial de UNA insistió en que "hay lugar para una tercera vía que no sea ni la vuelta a los 90 (época de desmantelamiento del Estado bajo el Gobierno de Carlos Menem) ni continuar como estamos".
Sin embargo, Massa confirmó que habló el domingo por la noche con Macri y dejó la puerta abierta a una negociación si los resultados de los comicios presidenciales del próximo 25 de octubre fuerzan una segunda vuelta entre los dos candidatos más votados. "El mejor camino para construir gobernabilidad es que definamos una agenda de temas en común", sostuvo.
De los 15 aspirantes a presidente que participaron en estas primarias, sólo seis competirán en los comicios de octubre, bien porque perdieron las internas o porque no lograron obtener al menos el 1,5% de los votos.
Junto a Scioli, Massa y Macri se mantienen en la carrera presidencial Margarita Stolbizer, de centro-izquierda, el ex Presidente Adolfo Rodríguez Saá (2001) y Nicolás del Caño, del Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT).
Además de las candidaturas presidenciales, en estos comicios se definían listas para diputados, senadores y cientos de cargos municipales y provinciales. El kirchnerismo se alzó como la fuerza más votada en las primaras de la provincia de Buenos Aires, el distrito más poblado de Argentina, de Catamarca (noroeste), Entre Ríos (este), San Juan (oeste) y Chubut (sur). Por el contrario, en la provincia de San Luis (oeste) triunfó la Alianza Compromiso Federal de Adolfo Rodríguez Saá.