La reciente desvinculación de casi un centenar de trabajadores de supermercados y tiendas de cadenas nacionales en Chillán, que aún no se contabilizan dentro de las 16.290 personas desocupadas en Ñuble durante el último trimestre móvil medidas por el INE, muestra una señal de alerta y genera incertidumbre para los próximos meses, incluso para proyectos avanzados como el strip center de Avenida Alonso de Ercilla, que aguarda desde marzo el inicio de sus operaciones.

Esa cifra del periodo marzo-mayo contrasta con el retroceso de 0,1 puntos porcentuales en relación al trimestre anterior. Y más aún cuando el "Comercio al por Mayor y al por Menor" fue uno de los sectores que generó mayor empleo (4,3%) comparado con el periodo anterior.

"En el caso de Santa Isabel fueron 26 trabajadores y serían en total cerca de 50 desvinculados. En Cencosud se habla de 6 mil trabajadores a nivel nacional, lo que hace bastante complejo el panorama para el sector retail y para todos los trabajadores en general en Chile", afirma Claudio Sagardías, presidente de la Confederación Nacional de Trabajadores del Comercio, Producción y Servicios (Conatracops).

El dirigente precisamente se reunió en Chillán para analizar esta situación y lo que será mañana la conciliación basada en la Ley 20.823 que modifica la jornada laboral dominical de los trabajadores del comercio.

"Como supermercados Multimarket teníamos, hace muchos años, un beneficio de horas bonificadas por trabajar los días domingos, que significaba un 50% más de recargo. Pero esto quedó en el tiempo y es un grupo de no más de 500 trabajadores a los que la empresa se niega a pagar. Un sindicato lo tiene, pero no los 63 mil trabajadores", dice.

MÁS QUE INCERTIDUMBRE

Este proceso de desvinculación laboral derivaría de aspectos coyunturales, entre ellos las reformas, nuevas normativas, el bajo crecimiento de la economía y la rotación laboral.

"La incertidumbre respecto del alcance de la Reforma Laboral está afectando el mercado laboral", afirma economista el Renato Segura.

El académico y director de Ingeniería Industrial de la Universidad de San Sebastián de Concepción dice que es de esperar que las empresas ajusten su dotación mientras tanto, a la espera de la definición del Gobierno en esta materia.

Para Claudio Sagardías, otras de las razones de los despidos apuntaría a la readecuación ante el actual panorama económico.

"Los números no estarían dando y dicen que tienen un gasto operacional de un 24% y deberían llegar a un 20%. Como la competencia está fuerte, no se puede solucionar solo con ventas. Y lo más rápido, y que siempre se ha hecho, es cortar por lo más débil, que son los trabajadores", afirma en relación a las causales informadas al sindicato de la empresa.

El dirigente recalca que se trata de trabajadores que llevan más de 15 años en la empresa, muchos más cercanos a los 50 años, quienes por su edad ven más difícil encontrar un nuevo empleo.

En este proceso, a nivel país, se ven afectados personal desde pasilleros de aseo hasta gerentes con contratos bigtime de 20, 30 y 45 horas a la semana.

"Hay que reconocer que los despidos son transversales y hay mucha jefatura que salió. La oficina central sacó a más de 200 personas", agrega Sagardías.

Por el contrario, ante estas desvinculaciones, las mismas empresas se ven en la necesidad de contratar a nuevo personal generando un sistema que el propio dirigente denomina "precarización del empleo".

"Además de la Reforma Laboral está el tema de los siete domingos de la Ley 20.823 promulgada el 7 de abril, que obviamente ha elevado el costo de la mano de obra los días domingo y se ha tenido que dar más días de descanso. Por eso se saca a la gente más antigua y se traen personas nuevas de 20 horas para no dar ninguno de estos beneficios o darlos más precarizados", dice.

Este hecho tiene su explicación, señala el académico de la Universidad de San Sebastián. "En contrapartida, la industria comienza a generar presión sobre la mano de obra sobreviviente para aumentar la productividad -realizar las tareas del personal desvinculado-, implementando una política de incentivo que permita disminuir la ansiedad que dicha presión genera sobre el trabajador", explica Segura.

Crónica Chillán

"Llevo 7 años trabajando y sé que me despedirán porque no estoy de acuerdo con el nuevo contrato que tiene menos horas de trabajo que las 45 horas que cumplía hasta esta fecha. No estoy dispuesta a ganar menos y ahora tendré que comenzar a buscar nuevo empleo y aunque sé que la cosa está mala, hay que armarse de valor y seguir adelante", comentó una de las vendedoras de la tienda La Polar, quien prefirió resguardar su nombre.

Sin embargo, Renato Segura advierte que sin la implementación de inversiones para sostener este aumento de la productividad, se hace insostenible en el mediano plazo dicha estrategia.

"Por lo cual, para igual demanda, las empresas se verán en la necesidad de recontratar a parte de la mano de obra desvinculada, en un ambiente esperado de menor incertidumbre", sostiene.

LO QUE SE VIENE

La dirigenta de Cencosud, Mónica Alarcón, señala que además de estas causales hay otras que buscan debilitar a las organizaciones sindicales, a pesar de las nuevas legislaciones que favorecen a los trabajadores, como la Ley N° 20.828, que prohibe contabilizar el día feriado irrenunciable dentro de la planificación horaria mensual que determina el sistema de turnos.

Respecto al sistema Multirut, la dirigente recordó que hasta el año pasado este holding se fue fusionando.

"De una u otra forma vino a acatar este tema y de que el multirut no siguiera existiendo", comenta.

Alarcón también agrega que a nivel nacional la mayor incidencia de despidos se observaría en mujeres, además de una automatización de los procesos, por ejemplo, en la venta de pan y autopesaje.

"Donde teníamos cajeras, ahora hay cajas inteligentes que reemplazan a tres cajeros", detalló.

Tal como afirmó el presidente de la CUT Ñuble, Luis Sánchez, en su discurso del 1° de mayo, los trabajadores aspiran a una nueva ley laboral.

"Permitiría relacionarse en igualdad de condiciones con su contraparte y poner término de una vez a una ley que confunde los derechos fundamentales de los trabajadores con la disciplina del mercado".

Más allá de estos casos y mirando a futuro, dice Renato Segura, lamentablemente en el país se ha instalado la desconfianza en todos los sentidos y en todos los niveles.

En este ambiente, la discusión previa y el bajo nivel de participación y discusión en el diseño de la reforma laboral por parte de los actores involucrados, ha sido uno de los factores que han contribuido "a echar más leña al fuego".

"En mi opinión, el ritmo de crecimiento de la economía (2% aproximadamente) y el bajo nivel de inversión, son variables que permiten sostener un buen desempeño en el mercado laboral a corto plazo, siempre y cuando el Gobierno despeje las interrogantes que se ciernen sobre las reformas en curso y restablezca la confianza entre los agentes económicos", afirma.

Estas materias, agrega el académico de la USS, debería ser la impronta del "segundo tiempo" de la administración de Michelle Bachelet.

Eso al menos eso se visualiza tras el "Cónclave" oficialista, la semana recién pasada.