Casi 2 millones dólares invertirán en plantel porcino de Coihueco
ciudad. Proyecto de Agrícola Veneto, que ingresó al Sistema de Impacto Ambiental en agosto, se encuentra en pleno proceso de admisión. Municipio y vecinos se oponen a la iniciativa.
El 22 de julio el plantel de cerdos Santa Josefina, ubicado en Coihueco, presentó ante el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) el proyecto que considera ampliar sus instalaciones, que albergan a 600 porcinas, pero la presentación fue rechazada por la entidad ambiental con 6 observaciones.
La negativa fue analizada por la agrícola Veneto, y el 3 de agosto ingresó nuevamente su propuesta, subsanando las indicaciones, por lo que fue admitida a tramitación.
"El proyecto considera la construcción de instalaciones para la ampliación de la operación donde actualmente se albergan a 600 hembras a una capacidad para alojar un máximo de 2.000 hembras, lo que se traduce en un total de 28.000 animales (considerando las crías), distribuidos en 36 pabellones", explica parte del proyecto.
Para desarrollar los procesos de gestación, lactancia, destete y crianza, la firma contempla la construcción de 3 pabellones de reproducción, 3 para gestación, 8 de maternidad y 6 pabellones de recría, lo que ocupará un total de 11.359 metros cuadrados de superficie del terreno.
A esto se les anexa 16 pabellones de engorda de 858 metros cuadrados cada uno, lo que ocupará un total de 1,37 hectáreas.
"En promedio las hembras tienen 2,5 partos al año, y en cada parto tienen camadas de 11-13 crías aproximadamente. Una vez que las hembras han tenido 8 partos (a los tres años aproximadamente), se estima que su ciclo de reproducción óptimo finaliza, siendo éstas destinadas a matadero", contempló el proyecto.
A raíz de la gran cantidad de pabellones que se requieren construir para echar andar el proyecto, sumado a la mano de obra que implicará, se tiene contemplada una inversión de 1 millón 800 mil dólares.
El emplazamiento y faenas de ejecución de las obras está contemplado iniciarse en agosto del 2016 y tendrá una vida útil de 35 años.
Es en el predio del fundo Santa Josefina, que tiene una superficie total de 114,9 hectáreas, donde se comenzarán a edificar los pabellones y su localización fue escogida en base en la ruralidad del predio, "característica ideal para el desarrollo de este tipo de actividad, sin impactar notablemente al medio ambiente humano", justifica el proyecto que hoy está en manos del SEIA.
No lo quieren
Si bien se acusa que no debería existir impacto ambiental, igualmente fue socializado con la junta de vecinos La Viñita, en abril de este año, a quienes se expusieron las principales características de la iniciativa, lo mismo que pasó con la presentación ante el concejo municipal de Coihueco, el 4 de mayo, donde se informó sobre los alcances y el levantamiento de información en terreno para la Declaración de Impacto Ambiental.
"Vemos este proyecto con muchas complicaciones, nos interesa la gente y las comunidades del sector de la Viñita fundamentalmente. El sector de Calabozos está muy preocupado por este aumento, incluso de las instalaciones e inversiones del plantel Santa Josefina y nos tiene muy complicado por temas ambientales", indicó el alcalde de Coihueco, Carlos Chandía.
En tanto, para la mano de obra se contabilizan 34 personas, 11 de las cuales estarán a cargo de la reproducción y maternidad; 8 funcionarios a cargo de la recría y engorda. En tanto para la mantención y planta de tratamiento son 5 personas; 2 para la función de administrativo y 8 para la fábrica de alimento.
"La gente de Santa Josefina han esgrimido que tiene muchas separaciones y correcciones en materia de mejorar la calidad del aire y de las aguas, ya que hay inconvenientes con el tema de dónde se destinan los riles; entonces ahí tenemos un problema y obviamente esto se ha socializado con la comunidad, pero no les interesa, no les gusta y opinan desfavorablemente, y obviamente me debo a la representación de la comunidad. Vamos a ver qué ocurre, ya que no hemos tenido mucha información y la Seremi de Medioambiente no nos ha convocado a este tipo de reuniones, donde tenemos algo que decir y estamos inquietos y vemos que no nos ha dado la posibilidad de dar nuestra opinión en la toma de decisión de este proyecto", recalcó Chandía.
Tratamientos de riles
Uno de los puntos que genera más conflicto entre la comunidad y autoridades es el sistema de tratamiento de residuos líquidos, sólidos y el cierre de la laguna de acumulación.
Para la fosa de recepción de purines, el sistema de evacuación que contempla el proyecto es la mantención de los riles en cavidades que están ubicadas bajo los pabellones, por un tiempo de residencia que dependerá del tamaño de los cerdos, luego del cual el efluente es evacuado y conducido mediante tuberías hacia el estanque de homogenización.
La idea que se tiene proyectada es que las fosas de recepción de riles estén hechas de hormigón, las que tendrán 60 centímetros de profundidad, esto a raíz de que los cerdos son sensibles a los gases amoniacales, su exposición a ellos provoca una baja de peso.
El modo en que la empresa asegura que no habrán malos olores es que, "en la eventualidad de generación de olores molestos producto de la acumulación de purines en las fosas, el efluente será evacuado de inmediato hacia el estanque homogeneizador. Esta misma razón determina que la distancia entre pabellones sea entre 5 a 14,8 metros, de modo de permitir el intercambio de aire".
Lo que se sumará a evitar la emanación de hedores es que al interior de los pabellones existirá una adecuada ventilación, para evitar altas temperaturas que favorezcan la generación de gases, que son los causantes de olores molestos.
Crónica Chillán