Con un lienzo de 50 metros de largo, los trabajadores de la empresa de lácteos Boyén protestaron ayer por más de una hora en la plaza de Armas de Chillán, frente al BancoEstado, recibiendo el espaldarazo de políticos de la zona que esperan que la entidad bancaria otorgue un crédito para evitar que 60 empleados queden cesantes.

La polémica se originó a raíz del rechazo de un primer rechazo del BancoEstado por otorgar un préstamo de 300 millones de pesos, los cuales serían destinados como capital de trabajo para hacer funcionar la última planta adquirida por la empresa, que permitirá producir 5 mil litros por hora de yoghurt, mejorando la producción a un nivel de 78 mil litros diarios en todos los productos.

"Acá no se está pidiendo ningún subsidio. Es simplemente una necesidad de seguir creciendo. Tenemos la ambición de ingresar al mercado del retail, exportar productos hacia México y también estamos en el desarrollo de nuevos productos", comentó el gerente de operaciones de Boyén, Javier Contreras.

Además, señaló que aún no entienden la negativa de la entidad bancaria, dado que "recientemente compramos una planta de yoghurt y estamos en proceso de montaje de la misma, la cual la adquirimos gracias a los fondos que ellos otorgaron".

Apoyo político

El senador Alejandro Navarro, el diputado Jorge Sabag y también el consejero regional Cristian Quiroz, llegaron pasado el mediodía hasta el centro de Chillán para unirse a la protesta que realizaron los cerca de 50 trabajadores de la empresa.

Navarro, por su parte, criticó a BancoEstado argumentando que no están cumpliendo con su razón social. " El Banco debe cumplir una labor social, económica por cierto, y en este caso, una empresa solvente, que tiene mucho capital y no entendemos por qué se demoran en dar una respuesta que permite ampliar los mercados, dando más trabajo, en un área de la futura región del Ñuble", dijo el congresista, quien además ostenta el cargo de presidente del MAS.

El no conceder este crédito a Boyén, según Navarro, iría en detrimento de la provincia. "Queso, leche y yoghurt son parte de las condiciones naturales de Ñuble, y en este caso, el BancoEstado ha demorado excesivamente en otorgar una respuesta que, esperamos, sea un empujón para la economía local", dijo el senador, quien agregó que en estas instancias, desde el poder legislativo "hay que crear una alianza público privada, ya que en este caso, si no hay este crédito, vamos a tener 60 despidos y eso significa que el Estado recurra a subsidios, generando un gasto extra".

Jorge Sabag, en tanto, comentó que en su calidad de parlamentario, abordó la polémica con el gerente general de BancoEstado, Guillermo Larraín.

"Lo importante de la conversación con Larraín es que él manifestó su intención de seguir dialogando con la empresa y también pida que se puedan acercar a dialogar y revisar la situación pendiente, de manera que nosotros esperamos que mediante el diálogo se pueda llegar a una solución, ya que estamos viviendo un contexto muy complicado en el país", dijo el diputado demócrata cristiano, comparando la situación vivida por los trabajadores de la mina Santa Ana, ubicada en Curanilahue, quienes tuvieron que pasar en huelga al interior del pique.

"Hay mineros que van a ser subsidiados porque no se le ayudó a la empresa a continuar produciendo. Y acá nosotros no queremos un drama social con 200 personas en la calle", dijo el diputado Sabag.

Asimismo, planteó que esta situación genera preocupación por los empleados. "Nosotros no queremos que esta sea una región asistencialista, porque en realidad existen varios potenciales, pero también hay que entender que la banca debe ser un motor de las inversiones y el desarrollo de las empresas que dan empleo, y en este momento están en una situación de riesgo", dijo.

El consejero regional Cristian Quiroz también respaldó a los trabajadores de Boyén y sus empleadores. "Nosotros en el Core aspiramos a una alianza público privada que permita un punto de encuentro entre la institucionalidad pública, el gobierno regional y sus instituciones, con las universidades y las empresas privadas, de manera de tener más incentivos, más eficiencia tecnológica. En ese sentido, necesitamos que el BancoEstado sea un aliado, y no una traba para el desarrollo del país", dijo.

preocupación laboral

El dueño de la firma Boyén, Carlos Olave, lamentó el centralismo de las decisiones de la entidad bancaria con la que han sostenido negociaciones. "Falta presencia en terreno de las jefaturas del BancoEstado. Todas las decisiones se toman en Santiago, por lo que los equipos de regiones no tienen facultades. Hemos pedido que venga el gerente de créditos a conocer la planta y aún lo estamos esperando", dijo el empresario.

Por su parte, el vocero de los trabajadores, Luis Jara, dijo sentirse en una situación de riesgo. "Al no tener el apoyo de BancoEstado, nuestra fuente laboral corre peligro, porque si no están los recursos, podemos ser como las demás empresas en Chile que sin el apoyo de las entidades bancarias, ven mermadas sus aspiraciones", planteó.

Gladys Vásquez, quien trabaja hace 5 años en la empresa, dijo que existe incertidumbre. "Tengo un hijo y soy el sustento del hogar. Quedar sin trabajo me dejaría en un escenario horrible", planteó.

Por otra parte, Ramón Benavides, quien trabaja hace más de dos años en Boyén, también manifestó su preocupación. "Esta es una planta en que la mayor parte es mujer, pero uno también es el aporte esencial en su casa para poder subsistir", dijo.

A la espera de un comunicado público, Banco Estado optó por no referirse a la situación en particular de la negociación que realiza como entidad bancaria con la empresa de lácteos Boyén. El senador Alejandro Navarro dijo que hasta antes de esta situación sostuvo dos conversaciones respecto a los créditos que otorgan, no obstante, el diputado Jorge Sabag afirmó que durante el día de ayer se comunicó con el gerente general del banco, Guillermo Larraín, con el fin de solicitar un diálogo que pondere las garantías que ofrece la empresa que, según defendió, "está en un proceso de expansión y desarrollo para generar empleo y desarrollo en la provincia".

$300 millones

Es el préstamo que solicitó Boyén al Banco Estado, con el fin de generar capital humano y poner en marcha una nueva planta para mejorar la producción de la empresa.

78 mil litros diarios

De diversos lácteos son la proyección de la empresa Boyén, ya que la nueva planta es capaz de generar 5 mil litros diarios de yoghurt. Además, esperan exportar productos a México.