Crónica Chillán
En el marco de la presentación de la Carta Encíclica del Papa Francisco, LAUDATO SÍ, que realizó monseñor Fernando Chomalí, arzobispo de la Arquidiócesis de Concepción, en Chillán, la autoridad eclesiástica se dio tiempo para reflexionar sobre la disminución de las vocaciones sacerdotales, situación que afecta no tan solo a la provincia de Ñuble ni la región, sino que a nivel país.
En abril de este año, se dio a conocer por parte de la Oficina de Prensa del Vaticano, el Anuario Estadístico Eclesial que indica que en nuestro país las vocaciones disminuyeron un 11,2%.
Si bien Chomalí reconoce que esta baja se debe en parte a las acusaciones que han pesado en los últimos años sobre la iglesia, pero de igual forma inciden otros factores como el que la juventud de hoy no le interesa participar, explicó.
"Son muchos los factores que han influido para que haya disminución de vocaciones sacerdotales. El mayor impacto ha sido que los jóvenes tienen otras aspiraciones, también ha influido evidentemente cómo se ha presentado la iglesia, lo cual no ha motivado a los jóvenes pero los jóvenes tampoco se quieren casar", reflexionó.
Monseñor Chomalí explica que desde la iglesia "lo único que nos queda a nosotros que hemos asumido este estilo de vida, es dar testimonio de vida cristiana, alegría y sobretodo servicio. De hecho el papá habla sobre eso de cambiar de una lógica de ser servido a servir", enfatizó.
Encíclica
El Arzobispo de la Arquidiócesis de Concepción, estuvo presente en el Centro de Extensión de la Universidad de Concepción, donde se presentó la segunda carta elaborada por el Santo Padre. La bienvenida al encuentro que reunió a personal consagrado, representantes de colegios diocesanos, y a ediles de la provincia, la dio el obispo de Chillán, Carlos Pellegrin, quien agradeció la asistencia de quienes llegaron para "profundizar sobre el llamado que nos hace el Santo Padre, 'Sobre el cuidado de la casa común', y el compromiso que debemos asumir como cristianos y ciudadanos de nuestra querida provincia de Ñuble", subrayó.
Al entrar en materia, el arzobispo Fernando Chomalí, enfatizó en que "el Papa Francisco, a través de su encíclica y con un lenguaje nuevo, viene a decir lo que la Iglesia siempre ha planteado en materia de ecología, incluso entrando en temas técnicos, y haciendo una interpelación mucho más fuerte a la vida de cada uno".
Agrega que "se llega a la conclusión que con este sistema que estamos viviendo, la sociedad se hace insostenible, y que hay un vínculo de ese deterioro, entre el ambiente y la pobreza, entre los estilos de vida y la pobreza, como también entre los sistemas económicos y la ecología; y por lo tanto, se requiere de una reflexión más profunda sobre qué sociedad queremos construir", advirtió la autoridad eclesiástica de la región.