Una verdadera tragedia fue la que vivió una familia de Quillón con domicilio en el sector nororiente de esta localidad, en la población San Francisco.
Cerca de las cuatro de la madrugada de ayer, Fabián Ramírez Parra (37) se encontraba en su vivienda de Los Maitenes 1770 cuando comenzó a incendiarse una de las habitaciones del lugar.
El siniestro, cuya causa está bajo investigación, se habría generado por un cortocircuito debido al recalentamiento de un cargador de un teléfono celular.
De inmediato Ramírez comenzó a sacar lo que pudo. El auto que tenía quedó inutilizable. Luego se encargó de proteger a sus tres hijos (una niña de 12 años y dos niños menores), quienes lograron salir corriendo del sitio con ayuda de la víctima. Su pareja, Johana Baeza, no estaba en el inmueble.
Sin embargo, el dueño de casa no pudo con el fuego y quedó atrapado, muriendo calcinado posteriormente.
Cinco horas después del incendio, su padre y sus tres hermanos recibieron una noticia no muy alentadora y no podían creer lo que había ocurrido.
"Empezamos a llamar a los teléfonos y nadie contestaba, hasta que bomberos de Coihueco nos entregó esta trágica noticia de mi hermano muerto. Hace tres semanas que Fabián había estado en nuestra casa y preparaba otro viaje", lamentó su hermano Víctor.
Miguel Ramírez, padre de Fabián, apenas podía contener las lágrimas y se paseaba incrédulo en el frotis de la vivienda siniestrada. Destacaba en su hijo "a una persona trabajadora, muy apegada a los suyos, alegre, humilde, de gran corazón".
"Fue un verdadero héroe por lo que hizo, salvó a sus hijos. A mi hija le administraron varios calmantes y los niños están con mi mamá en Florida", dijo en tanto Nancy Ruíz Aburto, suegra de la víctima.
Los vecinos que despertaron de improviso en la madrugada con los carros de bomberos decían que "Fabián no molestaba a nadie, sus hijos jugaban con los míos regularmente acá en la calle y nunca hubo problemas", aseguró uno de los vecinos que mantuvo su nombre bajo reserva.
Posterior al siniestro personal de Labocar de Concepción trabajó en el sitio del suceso y a eso de las 14:00 horas, por orden de la fiscal, Claudia Zárate, el Servicio Médico Legal levantó los restos del sujeto, que serán velados en Florida.
Ramírez Parra oriundo del sector El Embalse de Coihueco hacía pocos meses que vivía en Quillón con su familia, antes estuvo en Florida, lugar donde residía su mujer.
Trabajaba como operario en una de las plantas de la Celulosa de Nueva Aldea, en trozado de madera. Lo hacía en un turno donde trabajaban nueve personas.
"Un operario de línea que siempre andaba dispuesto a cooperar, llevaba más de seis años en la empresa y me correspondió ser su jefe en un período de tiempo", recordó Boris Acuña, quien se hizo presente en el lugar con sus ex colegas. Acuña dispuso ayuda inmediata de ropa y alimentos para los hijos de Ramírez.
Acuña consideraba un amigo a Ramírez, ya que se acercó cuando "yo tuve cáncer hace algunos años. Fabián me acogió ya que su pareja también había pasado por una enfermedad larga y pudo salir adelante", recordó.
Miguel R., Padre de, Fabián
"Mi hijo era una persona trabajadora, muy apegada a los suyos, alegre, humilde, buen padre. Me duele su partida".
Nancy Ruíz, Suegra de la víctima
"Un verdadero héroe por lo que hizo, salvó a sus hijos. Los niños están bien con mi mamá en Florida. Es una tragedia".
