Mabel González / Agencias
El líder de Podemos, Pablo Iglesias, puso ayer más condiciones para negociar con el Partido Socialista (PSOE) un pacto que lleve a un Gobierno de izquierda en España.
Una ley de emergencia social y el abandono de los consejos de administración empresariales por parte de quienes tienen militancia en el PSOE son las dos nuevas condiciones del partido heredero del movimiento de los indignados.
Con 69 diputados, Podemos se convirtió en las elecciones del domingo en el tercer partido de España, por detrás del Partido Popular (PP) de Mariano Rajoy y del PSOE.
"Lo primero que hay que hacer es sacar a sus miembros de los Consejos de Administración o pedirles el carné", dijo Iglesias en la ciudad de Zamora (norte).
El líder de Podemos propuso la celebración de un referéndum de autodeterminación en Cataluña y ya instaló el tema sobre la mesa de cara a posibles pactos.
Ante la situación de bloqueo en la que se encuentra el país, con un Parlamento tan fragmentado que podría llevar a unas nuevas elecciones en un par de meses si no se logra investir a un Presidente, Iglesias propuso que una figura independiente presida el Ejecutivo.
División en el PSOE
La difícil formación de un nuevo Gobierno ha tensado la situación en el PSOE, el segundo más votado en los comicios.
Una de las dirigentes socialistas con más poder, la jefa del Ejecutivo de Andalucía, Susana Díaz, llamó ayer la atención al líder del partido, Pedro Sánchez, ante su inclinación a negociar un pacto de izquierda que lo lleve a gobernar a él en lugar de Rajoy.
"La política de pactos se decide en el Comité Federal", dijo Díaz en una entrevista con la Cadena Ser. El Comité Federal es el máximo órgano del partido entre congresos y se reúne el lunes en Madrid.
Las declaraciones de la presidenta andaluza llegaron un día después de que Sánchez manifestara que la línea política del partido la fija su dirección y su secretario general, que es él.
El problema para Díaz y otros dirigentes socialistas es que el pacto de izquierda que Sánchez quiere abordar pasa por negociar con Podemos, que defiende la celebración de un referéndum de autodeterminación en Cataluña.
El PSOE no se puede sentar "a negociar con fuerzas políticas que están planteando la ruptura de España", dijo la presidenta andaluza, la rival interna más fuerte de Sánchez.
Si el PSOE vota en contra de la investidura de Rajoy, como Sánchez asegura que hará, el líder conservador no podrá repetir mandato.
El pacto de izquierda del que habla el socialista es también difícil, ya que, más allá del referéndum catalán que Podemos plantea como indispensable para llegar a un acuerdo, este tendría que incluir a varios partidos pequeños, con la complicación que eso implica en una negociación.