Chillán conmemoró el terremoto de 1939 con una masiva actividad cultural
SOCIAL. Cicletada patrimonial, intervención urbana y toque de campanas.
Esta vez las conmemoración del terremoto de Chillan de 1939 estuvo lejos de los lamentos. Más de 150 vecinos de Chillán tomaron sus bicicletas y salieron a recorrer la ciudad para conocer y recordar aquellos puntos que dan cuenta de la tragedia, pero también de cómo la ciudad supo volver a levantarse del evento más destructivo de su historia.
Fue así como grandes y chicos pudieron pedalear, conocer y reconocer el Convento San Francisco, lugar que guarda el último inmueble de adobe que data del siglo XIX; aquella Planta Eléctrica donde el héroe olvidado, Guillermo Díaz, evitó que la terremoteada ciudad, además, de incendiara; la fosa común del Cementerio Municipal donde descansan miles de chillanejos y las actuales viviendas y edificios que dan cuenta de la arquitectura moderna con la que Chillán fue reconstruido.
La cicletada patrimonial continuó con una intervención urbana llamada "Hipocentro de Memoria", donde círculos concéntricos iluminados con velas invitaron a los asistentes a reflexionar sobre lo vulnerable que es nuestro patrimonio. El momento más emotivo se vivió a las 23:32 de la noche con la "Alerta de Memoria", cuando las campanas de las iglesias de la ciudad y la sirena de bomberos tocaron para recordar el minuto exacto del terremoto y hacer un homenaje a sus víctimas. La actividad que fue organizada por la Unidad de Patrimonio de la Munipalidad de Chillán, Consejo Nacional de la Cultura y las Artes y Bicipaseos Patrimoniales y las Universidades de Concepción y del Biobío, se volverá a realizar el próximo año.