Mabel González / Agencias
América Latina y el Caribe ya es la segunda región del mundo libre de uranio altamente enriquecido, junto al Sudeste Asiático, mientras que EE.UU. hará públicas por primera vez en una década sus reservas de este material que puede usarse para armas nucleares.
El Presidente de EE.UU., Barack Obama, anunció ayer que dará a conocer ese arsenal nuclear, que ya "ha sido reducido considerablemente", en su discurso de apertura de la sesión plenaria de la IV Cumbre de Seguridad Nuclear celebrada en Washington.
Ante representantes de más de 50 países, Obama quiso dejar claro que "EE.UU. continuará haciendo su parte" y, como prueba de ello, ayer tenía previsto publicar una "descripción detallada" de las medidas de seguridad que toman sus Fuerzas Armadas para proteger el material nuclear, de manera que otras naciones "también puedan mejorar su seguridad y transparencia".
Para Obama, la defensa más efectiva contra la amenaza del terrorismo nuclear, "que persiste y evoluciona", es asegurar completamente el material nuclear "para que no caiga en las manos equivocadas".
Desde la primera Cumbre de Seguridad Nuclear que impulsó en 2010, el riesgo del terrorismo nuclear se ha reducido "de manera medible" y se ha logrado un "progreso significativo" gracias a la cooperación internacional, dijo.
Entre los avances de estos seis años, Obama destacó que Argentina ha eliminado los 4 kilogramos de uranio altamente enriquecido que le quedaban, con lo que América Latina y el Caribe pasan a ser la segunda región libre de ese material en el mundo.
"Habiendo completado el proyecto de eliminación, Argentina y la región entera de América Latina y El Caribe se consideran ahora libres de uranio altamente enriquecido, es decir, que ningún país tiene más de un kilogramo", anunció la Casa Blanca en un comunicado.
La otra región del mundo que ha alcanzado este hito es el Sudeste Asiático, explicó a EFE una fuente del Departamento de Estado que pidió el anonimato.
Otro de los avances que Obama remarcó es que 102 naciones han ratificado la Convención para la Protección Física del Material nuclear, adoptada en 1979 en Viena (Austria),
"Esto nos dará más herramientas para trabajar juntos en el caso de robo de material nuclear o de un ataque en una instalación nuclear", defendió.
En este sentido, el primer ministro de Holanda, Mark Rutte, consideró que los "sanguinarios" atentados terroristas de la semana pasada en Bruselas, con 32 víctimas mortales, "subrayan la importancia" de las cumbres de seguridad nuclear.
"Esta iniciativa ha reforzado nuestras defensas contra la pesadilla de un ataque nuclear", afirmó Rutte.
Entre los logros de estos seis años, el primer ministro neerlandés destacó que la cantidad de material nuclear en circulación "continúa disminuyendo" y el material que existe "está más seguro" porque más países convirtieron en legislación nacional las recomendaciones del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA).
Esta cuarta cumbre y última con Obama en la Casa Blanca giró en torno a la urgencia de evitar que los grupos terroristas puedan acceder al material nuclear, con la vista puesta en la amenaza creciente del Estado Islámico (EI).
"Éxito sustancial" del acuerdo con Irán
Antes de comenzar el plenario, Obama se reunió con otros mandatarios del Grupo 5+1 (EE.UU., Francia, Rusia, China, Reino Unido y Alemania) para analizar el impacto del acuerdo nuclear con Irán. En una breve declaración abierta, el Mandatario destacó el "éxito sustancial" que ha supuesto para la no proliferación nuclear y aseguró que Irán ya está notando "los beneficios" de ese pacto, aunque le llevará tiempo reintegrarse en la economía global.