Luis Valenzuela Castro
En el 2012 irrumpió en Chillán una naciente atleta que con voz tímida y con el ánimo de mantener el anonimato se dedicaba a lanzar la jabalina, prueba en la cual comenzó a mostrar un potencial talento que la llevó a quedarse con la medalla de oro en los Juegos Escolares del IND.
Dicho logro le permitió clasificar al Sudamericano de Atletismo Escolar de Brasil, cita en la cual dijo adiós en la fase clasificatoria producto de su natural nerviosismo.
Desde ese año a la fecha la chillaneja que cursa cuarto medio en el Colegio Padre Hurtado solo conoce de éxitos y claramente está llamada a seguir los pasos de Valentina Salazar, su antecesora en el lanzamiento de la jabalina.
Solo por citar parte de sus últimos logros, cabe destacar la medalla de bronce en los Juegos de La Araucanía en el 2015, cita que reúne a los mejores exponentes del sur de Chile y Argentina. Durante abril de este año se quedó con el tercer lugar en el Grand Prix Sudamericano. Hay que agregar el título en el Nacional Juvenil de este fin de semana y la medalla de oro en la Copa Soprole. Solo ejemplo de una exitosa deportista que en silencio cosecha preseas.
"Partí de muy chica, siempre me ha gustado el atletismo y nunca me he salido porque es algo que realmente me gusta. Pero no siempre he lanzado la jabalina, al comienzo también realizaba el salto con garrocha, me iba relativamente bien, normal, pero después me fui metiendo más al lado del lanzamiento", dijo la joven cuyas primeras declaraciones en el 2012 eran breves, pero certeras.
Sobre sus triunfos asegura que no lleva un registro muy acucioso, por ello, dijo simplemente que "he salido campeona nacional, campeona nacional otra vez, escolares y Federados".
"Mi mejor marca durante este año es de un poco más de 41 metros, pero espero seguir mejorando, sobre todo porque tengo una lesión en el hombro que me molesta para lanzar, la verdad no sé qué es lo que tengo, pero me he tratado con el kinesiólogo y me sigo molestando. Además, he tenido algunos asuntos personales importantes, por eso ahora quiere recuperar todo lo que he perdido", dijo la "Caro" sobre su actual momento deportivo.
Este año Carolina deja el colegio y se proyecta en el futuro, aunque por el momento los estudios quedan en segundo plano, ya que su exitoso recorrido en el lanzamiento de la jabalina le permite soñar con cosas grandes. "Creo que me voy a tomar un año, solo para entrenar, sería mi último año en la categoría juvenil y quiero aprovecharlo. Esta año quería clasificar al Mundial, pero ya no creo que pueda, ya que por motivos personales no pude entrenar mucho, me pedían una marca mínima de 48 metros y recién llevo cerca de 40, me falta mucho".
La deportista dejó la etapa de promesa y se transforma en realidad, es por ello que en sus próximos desafíos como el Interescolar Soprole en Santiago y los Juegos de La Araucanía en Chillán, más los Juegos Escolares, espera seguir lanzando por los cielos.