Científicos limitan beneficios de los probióticos a los enfermos
DIGESTIÓN. Un estudio de la Universidad de Copenhague no encontró un efecto importante del consumo de estos productos en individuos sanos.
Científicos daneses encontraron que los probióticos, si bien tienen un efecto positivo en pacientes con enfermedades metabólicas y gastrointestinales, no otorgan beneficios a las personas sanas.
En el estudio, investigadores del Centro de Investigación Metabólica de la Universidad de Copenhague, en Dinamarca, llevaron a cabo una revisión sistemática de siete ensayos aleatorios que investigaron el efecto de los productos probióticos -presentes, por ejemplo, en alimentos lácteos como yogurt y bebidas- en la salud digestiva de adultos sanos.
Citado por el sitio web Medical Daily, el equipo recordó que al interior de nuestro intestino y tracto digestivo existen microbios que ayudan a la digestión a descomponer los alimentos y sintetizar ciertas vitaminas y aminoácidos.
Investigaciones anteriores han mostrado que ciertos padecimientos, como la diabetes o la obesidad, se caracterizan por una composición desigual de bacterias intestinales saludables. Agregar bacterias saludables a la dieta de una persona en forma de probióticos tiene un efecto medible en estos individuos, lo que se refleja en el índice de masa corporal o en la resistencia a la insulina.
Sin embargo, explicaron que es mucho más difícil medir el efecto que tienen los probióticos en quienes no sufren ningún problema de salud preexistente. Fue precisamente ese objetivo el que se propuso este nuevo trabajo.
En los siete estudios previos que revisó el equipo, participaron voluntarios sanos de entre 19 y 88 años, quienes consumieron probióticos a través de galletas, bebidas lácteas, sachets o cápsulas durante un periodo de entre 21 y 42 días.
Además de ellos, hubo un "grupo placebo" que sirvió como control para el trabajo.
En estos experimentos se examinaron las heces de los participantes con el fin de determinar la estructura general de la microbiota fecal.
Ello reveló la cantidad de especies bacteriales presentes, la uniformidad de las poblaciones de bacterias y si las personas que ingirieron probióticos, como resultado de su intervención, tuvieron cambios distintos en las bacterias que viven en su intestino al compararlas con las del grupo placebo.
"Una revisión sistemática de la evidencia nos permite reunir pruebas y examinar la relación entre los productos probióticos y la composición de la microbiota fecal en gente sana, utilizando métodos sistemáticos y explícitos, lo que garantiza un alto nivel de evidencia", sostuvo Nadja Buus Kristensen, uno de los autores.
Los resultados mostraron que de los siete ensayos aleatorios, solo uno mostró un efecto más importante en la composición de la microbiota de los voluntarios que habían consumido probióticos, cuando se comparó con las personas del grupo de control que no había ingerido estos productos.
"En otras palabras, la evidencia científica sobre el efecto de los probióticos en adultos sanos es inexistente", afirmó Oluf Perdersen, otro de los autores, en un correo electrónico enviado a Medical Daily.
El paper fue publicado en línea en la revista especializada Genome Medicine.
El análisis
Revisión
El equipo danés examinó siete estudios anteriores que analizaron el efecto de los probióticos en personas sanas de entre 19 y 88 años.
Hallazgos
Los autores observaron que los probióticos no tuvieron un efecto significativo en la composición de la microbiota de las personas sanas.