Eran pasadas las 17 horas y Ricardo Elías Figueroa Ferrada se alistaba para regresar a su casa a celebrar el cumpleaños 13° de su hija. Sin embargo, todo acabó en tragedia, una vez que cayó de la techumbre del galpón ubicado dentro del recinto donde prestaba labores como técnico de una empresa contratista de telecomunicaciones.

El hecho provocó la indignación de sus familiares y amigos quienes llegaron a la calle Barros Arana, a una cuadra de avenida Collín, donde reclamaron que la dueña de la empresa donde trabajaba Ricardo Figueroa le encargó una misión, que era arreglar la techumbre, situación que estaba fuera de sus funciones como trabajador.

Eran las 17.15 horas y según comentó César Mardones, su compañero de trabajo, el malogrado trabajador se subió por una escalera sin implementos de seguridad, por lo que una vez que lo vieron arriba del galpón, sólo sintieron que una plancha de zinc se quebraba, provocando la caída de Ricardo Figueroa.

"Cayó de cabeza y comenzó a sangrar por la nariz y la boca. Se veía grave", relató Mardones, añadiendo que en ese momento llamaron a la ambulancia, que no tardó más de 10 minutos en llegar. Mientras tanto, practicaban los primeros auxilios.

Al lugar también concurrieron carabineros, quienes luego notificaron a la Fiscalía local de Chillán y estos, a su vez, solicitaron a la Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones que se hiciera cargo de las pericias. Cerca de las 20 horas, los detectives llegaron al sitio del suceso para realizar las indagatorias.

Inés Matamala, esposa de Ricardo Figueroa, en medio de sollozos criticó a la dueña de la empresa Migrik y Villa Limitada, ya que el hombre había trabajado jornada doble y de hecho, recién ayer a las 6 de la mañana volvió a casa. No obstante, igual se despertó antes de las 13 horas y se vistió para ir a trabajar antes de las 14 horas. "Le dije que con este viento iba a ser difícil que trabajara, pero igual fue porque lo amenazaron con que no le iban a pagar su día laboral", comentó.

Por su parte, Rebeca Figueroa, que es la hermana del fallecido, acusó a la empresa de negligente y dijo que "había una plancha que se estaba volando y lo mandó a ponerle un peso. Lo que no podemos creer es que la jefa haya insistido en que arreglaran una plancha en medio de un temporal como éste. Sin seguridad, sin que haya un prevencionista de riesgos".

Desde la empresa Migrik, en tanto, según fuentes de la investigación, declararon que el hombre fallecido no usó implementos de seguridad que sí había en el lugar.