Chilenos consumen solo un kilo de legumbres por persona al año
CHILLÁN. Uno de los temas analizados en el seminario internacional de las legumbres.
Solamente un kilo de legumbres al año se consume por persona al año en nuestro país, pero con la nueva ley de etiquetado de los alimentos, el cambio en los estilos de consumo y el cambio climático podrían ayudar a revertir este comportamiento que afecta la salud de los chilenos.
Ese fue uno de los temas analizados en el seminario organizado por INIA y FIA y realizado en el auditorio de Inacap Chillán, que se enmarcó en el Año Internacional de las Legumbres.
El encargado del programa de mejoramiento genético de legumbres de INIA Quilamapu, Kianyon Tay, explicó que entre los factores que han determinado esta disminución en el consumo de porotos, lentejas, garbanzos, arvejas y habas, están los costos de producción, el ingreso de la mujer al mundo laboral y los estilos de vida que promueven los productos elaborados.
"El consumo nacionales bajo si se compara con Ecuador que es tres veces mayor, Estados Unidos con 8,8 kilos per cápita y Brasil con 30 kilos al año por persona. Chile está más bajo del promedio de la OCDE", comentó el investigador egresado del Colegio Padre Hurtado.
Consultado por si esta cifra es representativa de la provincia caracterizada por la producción agrícola, Kianyon Tay dijo que en este caso afecta los bajos ingresos que obtienen los agricultores, muchos de los cuales se dedican a cultivos más rentables como la remolacha, trigo, maíz, arroz y achicoria.
"Los cultivos de legumbres se han desplazado hacia productores más pequeños del secano (de Ñuble), pero que tienen poca capacidad tecnológica para tener altos rendimientos y por eso han ido disminuyendo fuertemente", acotó.
De todas formas, el director nacional de INIA, Julio Kalazich, destacó que desde su creación, en 196, a través de su programa de mejoramiento genético de legumbres radicado en Chillán, ha generado 20 variedades de porotos, 3 variedades de lentejas, 4 de arvejas, y 2 de garbanzo.
De vuelta a la cocina
Este seminario, único en su tipo en Chile durante 2016, contó con la presencia de la Representante de la FAO en Chile y Representante Regional Adjunta, Eve Crowley, del Director Nacional de INIA, Julio Kalazich y de la subdirectora de FIA, María José Etchegaray.
En el tema del consumo, la brasileña y representante de la FAO para Latinoamérica y el caribe, Adriana Gregolin, recordó que las legumbres son un aporte nutricional importante además de ayudar a la salud de las personas.
"Entregan proteínas y son una fuente sana de energía", sostuvo.
Gregolin indicó que el consumo de legumbres bajó en el contexto latinoamericano por el cambio de la matriz productiva y la falta de políticas públicas de incentivos.
"Es un deber del Estado, de las organizaciones afines como el Ministerio de Salud y de todos nosotros", afirmó la brasileña que prefiere los porotos y las lentejas a la chilena.
En este punto el investigador de INIA Quilamapu agregó que se debe reforzar la motivación de preferir alimentos más sanos.
"También falta una campaña de promoción como la que se impulsó en el gobierno anterior, Elijo vivir sano", comentó Kianyon Tay.