El origen del hip hop según Baz Luhrmann
El director de "Moulin Rouge" salta al mundo de las series con una costosa producción sobre Nueva York en 1977. "The get down" ventila romance, música, violencia callejera y la nostalgia propia de Netflix.
El verano de 1977 en Nueva York fue una suerte de infierno terrenal. El calor sofocante, la pobreza, el narcotráfico, la violencia callejera, una larga huelga de recolectores de la basura y las amenazas de un asesino serial conocido como Son of Sam, complicaron las vidas de sus habitantes. Pero de ese período de crisis surgieron también grandes inspiraciones.
En "The get down" actúan Giancarlo Esposito y Herizen guardiola.
Baz Luhrmann, director.
en resumen
Baz Luhrmann es australiano y tiene éxitos como "Moulin Rouge", "Romeo y Julieta" y "El gran Gatsby". Ahora es el turno de "The get down", serie centrada en el Nueva York de 1977.
Por Andrés Nazarala R
En el downtown irrumpió el punk. Más arriba -en lugares como el Club 54- la gente combatió el miedo bailando al ritmo hedonista de la música disco, mientras que en barrios marginales como el Bronx, la calle y los clubes nocturnos se transformaron en epicentros de exploraciones sonoras -y retóricas- que culminarían en el hip hop. Exceptuando el escapismo disco, la música estaba adoptando el discurso social y crítico en medio de un país marcado por la desigualdad.
No es raro que un cineasta como el australiano Baz Luhrmann ("Romeo y Julieta", "Moulin Rouge") se interese por este fructífero período de la historia contemporánea. No sólo porque implica hablar de nuevas corrientes sonoras (y en su cine la música es fundamental), sino debido a su particular gusto por los grandes romances amenazados por el contexto. "The get down" muestra cómo Ezekiel, un adolescente demasiado sensible para su entorno, trata de ganarse el amor de Mylene, una chica latina que debe lidiar con las exigencias de un padre evangélico mientras trata de abrirse paso en el mundo de la música. Eso implica entrar en contacto con narcos, gángsters y una fauna nocturna salvaje.
Luhrmann va desarrollando ese amor complicado -y los sueños musicales de ambos- junto con retratar los órigenes de la cultura hip hop.
Como es de esperar, la puesta en escena es impecable y el guiño a una época (como "Stranger things", este es también un ejercicio de nostalgia) incluye breves insertos documentales y una paleta de colores que el director usa para conseguir una imagen vintage. El australiano parece disfrutar especialmente cuando y filma números musicales que, aunque resultan gratuitos, son su especialidad.
"The get down" tiene encanto de sobra, un elenco repleto de revelaciones y buena música (el gran pionero del hip hop Grandmaster Flash aparece representado), pero también los excesos propios de Luhrmann, quien puso en problemas a la compañía al excederse en el presupuesto. Terminó gastando $120 millones de dólares.
Lo importante es que ya se pueden ver los seis capítulos que componen la primera temporada de una serie que, de alguna manera, viene a pagar la deuda que dejó "Vinyl", la decepcionante mirada de Martin Scorsese a la industria musical del mismo período. Ese tiempo en el que Nueva York era una fiesta.
Myles Aronowitz/Netflix