Belga adoptado conoció a su familia chillaneja
EMOTIVO. Carabineros gestionó reencuentro entre hermanos.
Cuando tenía apenas un mes de nacido, el oriundo de Chillán y hoy llamado Anton Augustin Clase, se fue en calidad de adoptado junto a su hermano, de un año y medio, hasta Bélgica. Desde entonces, en 1985, nada supo de su familia biológica. Hasta ayer.
Gracias a la gestión de la Oficina de Encargo y Búsqueda de Personas de la Segunda Comisaría de Chillán, el reencuentro se concretó en la misma unidad policial.
En un emotivo abrazo, Anton Augustin Clase se estrechó con Ernesto Palma Calabrán, quien hoy tiene 27 años. Además, la tía de este último, Iliana Calabrano, también se emocionó hasta las lágrimas dado que ella fue quien se hizo cargo del menor cuando fue entregado en adopción.
Anton habla fluidamente neerlandés, alemán, francés, inglés y muy poco de español. Aprovechando esta ventaja, comentó que en Bélgica vive junto a su hermano mayor, con su familia adoptiva.
Lilian Fuentes es la encargada de la oficina especializada de Carabineros y comentó que la gestión se realizó en coordinación con dos ONG relativas a la causa de reencuentros de familias separadas entre países, además del apoyo del Hogar Esperanza, cuya directora entregó los datos de la familia. Según comentó Anton, una de sus pasiones son los deportes extremos. Respecto a sus pretensiones en Chile, dijo que vuelve a Bélgica el 5 de octubre, pero más adelante viene al país con su hermano mayor. Acá en Chillán se enteró que su mamá biológica falleció en 2003, mientras que su padre vive en San Carlos, a quien espera conocer.
Emotivo encuentro
El mayor Claudio Saavedra, jefe de la Segunda Comisaría, destacó que este es un servicio a la comunidad que los llena de satisfacción, destacando a los funcionarios a cargo de la unidad. En este caso ayudaron a dos hombres que se fueron aún lactantes a Bélgica en adopción, ya que su madre atravesaba problemas que le impidieron hacerse cargo.