En la provincia de Ñuble, a septiembre de este año, se han registrado 4 donantes efectivos de órganos, mientras que a nivel nacional la cifra alcanza los 98 donantes según cifradas dadas a conocer por el Ministerio de Salud, siendo el transplante de riñón el de mayor recurrencia, seguido por el de hígado, corazón, pulmón y páncreas.
En cuanto a tejidos procurados de donantes en muerte encefálica, las operaciones de córneas lideran las cifras con 23 operaciones, y con uno están piel y huesos. A la fecha se han sumado 8 procuraciones más que el año pasado a igual fecha (90 en 2015) cifras que las autoridades de salud esperan que sigan en un alza.
La donación de órganos es un acto voluntario, altruista y gratuito, mediante el cual una persona o su familia (como representante) deciden "donar" los órganos, para que sean extraídos del cuerpo e implantados en otra persona.
La donación de órganos puede ser realizada por personas vivas que ceden un órgano a algún familiar siempre y cuando esto no altere el funcionamiento vital de su cuerpo) o por pacientes fallecidos, en los que se solicita la autorización familiar.
En el caso de los donantes fallecidos, la extracción de los órganos y tejidos donados se realiza en pabellón, con cirujanos altamente especializados, que los procuran de manera prolija resguardo el cuerpo de la persona, que luego será entregado a sus familiares.
Donación altruista
La ley chilena establece que desde los 18 años se considera donante a toda persona fallecida, a menos que en vida haya dejado alguna manifestación expresa de no querer serlo. En el caso de menores de 18 años, sólo los padres o el representante legal pueden autorizar la donación.
Según las cifras oficiales del registro Civil e identificación, al mes de agosto de este año en la provincia de Ñuble un total de 79 personas han desistido de ser donadores de órganos, de ellos 77 corresponden a Chillán. En años anteriores, el 2015 hubo 186 no donantes (181 de Chillán), en 2014 se registró la cifra más alta llegando a los 261 (234 de Chillán), mientras que el año 2013, cuando entró en vigencia la nueva ley de donación de órganos, se totalizaron 149 personas no donantes (99 de Chillán).
La semana recién pasada, el Centro de Estudios de la Universidad San Sebastián presentó una encuesta realizada en la región del Bío Bío, que dio cuenta que un 77% de los consultados donaría sus órganos después de fallecidos. El 88% lo haría para ayudar a otros y un 9% porque le gustaría que lo ayudaran en caso de necesitarlo.
La enfermera Dunja Roje Fernández, coordinadora nacional de Procuramiento de Órganos del Ministerio de Salud, explicó que la posibilidad de donar órganos sólo se da en el caso de pacientes con muerte encefálica, que corresponden aproximadamente al 2% de los fallecimientos del país.
Tanto esa situación como la negativa de los pacientes y las familias, hacen que en todo el mundo haya muchas más listas de espera que donantes, "incluso en España donde la tasa de donantes efectivos es de 35 por millón de habitantes", indicó. En Chile, especificó que la tasa es de 6,9 por millón de habitantes. En cuanto a la negativa de la familia, Dunja Roje indicó que llega al 52%.
Encuesta sobre donación de órganos
En otros resultados de la encuesta aplicada en al región por la Universidad San Sebastián, entre quienes se manifestaron en contra de donar (un 18%), las causas esgrimidas son: su salud no se lo permite (un 23%), su religión no se lo permite (18%), no confía en el sistema (un 13%), temor a acelerar la muerte clínica (12%), no le gusta la idea de intervenir el cuerpo (12%), entre otras. Riquelme enfatizó la necesidad de abordar este tema en familia, pues de acuerdo a esta encuesta un 24% no ha conversado sobre la posibilidad de donar y un 60% no ha hablado acerca de la posibilidad de ser receptor en caso de necesitarlo.