Cocochi se expone a multas tras expulsar a dos alumnos
JUDICIAL. Corte evalúa informe de la SIE antes de entregar su fallo por caso de supuesto microtráfico de marihuana.
"En acuerdo", y pronto a resolver, se encuentra el recurso de protección que interpusieron ante la Corte de Apelaciones de Chillán las familias de los dos escolares de enseñanza media que fueron expulsados del Colegio Concepción, tras ser vinculados a un supuesto microtráfico de marihuana.
La causa entre familia y colegio, ya judicializada, suma a otro actor gravitante, que es la Superintendencia de Educación del Bío Bío. De hecho, los jueces de la Corte solicitaron a esta última entidad que entregara un informe sobre sus resoluciones, siendo esta una "medida para mejor resolver".
En respuesta al oficio de los ministros, el director regional de la Superintendencia de Educación, Dalton Campos, comentó que la denuncia la ingresaron durante la segunda mitad de noviembre de 2016, y el 7 de diciembre, se envió el oficio 697, "sugiriendo al establecimiento reconsiderar la medida aplicada, dado que luego del análisis de los antecedentes, se han encontrado hallazgos suficientes para una presunta infracción a la normativa educacional, al no otorgar garantías suficientes y vulnerando su derecho a un justo y debido proceso", según da cuenta el informe de la entidad fiscalizadora.
A partir de entonces, según el mismo documento, el 19 de diciembre se recepcionó la respuesta del Colegio Concepción, "donde informa que la medida de expulsión se mantiene para el alumno en referencia", en alusión a ambos casos, de un menor de primero medio y otra adolescente de tercero medio.
Con estos antecedentes, el director regional de la Superintendencia de Educación declaró "no ajustado a la normativa educacional el procedimiento de cancelación de matrícula aplicado por el establecimiento Educacional Colegio Concepción de Chillán y ordena remitir a fiscalización". Esto último, podría decantar en una sanción monetaria al recinto.
Oposición
El abogado del Colegio Concepción, Eduardo Peñafiel, planteó ante los jueces su disconformidad porque la superintendencia envió su resolución, sin los descargos que hizo el establecimiento educacional para defender la sanción disciplinaria.
Es por ello que el abogado envió el recurso de reposición donde exponían que el Comité de Convivencia Escolar, después de varios interrogatorios a los alumnos involucrados, y la recepción de pantallazos de las conversaciones a través de Facebook que habrían sostenido, estimaron "que se trataba de una infracción gravísima al reglamento interno".
Además, aclaran que "la aplicación del procedimiento de investigación realizado por el establecimiento educacional fue mediante la activación del protocolo de agresión entre pares, generando una serie de acciones tendientes a indagar y resolver los hechos denunciados". Además, defendieron su reglamentación, ya que "no es necesario un procedimiento especial pues ya existe uno que es perfectamente aplicable y que contiene un justo y racional procedimiento".