Si bien el desempeño del equipo había sido menos que regular, lo único valorable hasta el minuto 90, instante en que anotó la paridad David Escalante, eran los tres puntos que se estaban consiguiendo.

No obstante, la conquista enmudeció al Nelson Oyarzún, y de paso también provocó la decepción en el técnico Pablo Abraham. A la hora del análisis, el estratego, reconoció que el juego desplegado ante los dirigidos de Hernán Godoy no fue el esperado.

"Fue un pleito muy disputado, donde hubo muchas segundas pelotas, en el complemento trabado, donde dispusimos de algunas ocasiones para convertir, y lamentablemente se terminó definiendo por errores nuestros", puntualizó con un dejo de frustración el adiestrador ñublensino.

Junto con precisar que el equipo quería por abrochar los tres puntos ante Santiago Morning, Abraham reconoció que el empate en el último minuto fue un duro golpe para el plantel. "Estábamos ansiosos de poder ganar, estuvimos en ventaja durante todo el juego, sin embargo en la última jugada nos empatan. Nos faltó más concentración", reflexionó el DT chillanejo.

Cambios

Dentro de lo discreto de la brega, Ñublense manejaba en cierta forma el trámite del encuentro. Lo anterior, hasta que Abraham comenzó a realizar modificaciones, que en vez de entregar consistencia y fluidez, terminaron por desdibujar el esquema inicial, y de paso lograron darle un segundo aire al Morning.

"Con los cambios se buscó gente en los mismos puestos con vocación más ofensiva, en el otro, se sacó un volante para apoyar pues ellos estaban atacando con cinco jugadores. Si el partido se hubiese ganado, todo hubiese quedado ahí, pero como se empató todo recae en el tema de las modificaciones ", sentenció Abraham.

Por lejos, el duelo jugado ayer en el gramado del estadio Nelson Oyarzún Arenas de Chillán, ha sido el de más bajo nivel futbolístico en lo que va del año, tanto el local Ñublense como la visita, Santiago Morning, no hicieron mucho por aportar al espectáculo, pese a ello, de igual forma había alegría en la hinchada local, pues hasta el minuto 90 Ñublense ganaba por la cuenta mínima, pero un error defensivo en el epílogo, cambio las sonrisas por tristeza y selló un empate con sabor a derrota.

Ñublense igualó a uno con el cuadro Autobusero, resultado que se puede explicar ya sea por la carencia que posee este equipo para cerrar partidos con marcadores a su favor, o por un error desde la banca, ya que cuando faltaban cinco minutos para el final, el técnico Abraham renunció al ataque sacando a un volante (Eduardo Vilches) para ingresar a un defensa (Elvis Acuña), en un duelo que tenía a un rival con poca claridad para llegar al gol.

El primer tiempo, como todo el partido, fue abúlico en buen f´tbol con un Ñublense que carecía de ataque versus un Morning que, con el pasar de los minutos, comenzó a tener más el dominio del partido generándose a lo menos cuatro opciones claras de marcar.

Primero a los 2 minutos avisaba con un remate de distancia de Jaime Gaete que pasaba cerca del arco custodiado por Sebastián Contreras. Luego a los 13' Nicolás Palma probaba con un remate que pasó a centímetros del ángulo superior izquierdo del arco rojo.

Posteriormente a los 26' caería la opción más clara de anotar para los dirigidos de Hernán "Clavito" Godoy cuando Roberto Reyes queda solo frente al arco en posición de remate, y desvía de forma increíble sobre un costado. Pero como reza la máxima "gol perdido en un arco, se hace en el otro", llegó la alegría para el local.

Cuando el reloj cronometraba los 30 minutos de juego, un tiro de esquina servido por Sebastián Páez (el primero del partido) es conectado de cabeza por Minor López quien desvía la trayectoria del balón hacia el palo más lejano del arco defendido por Hernán Muñoz, estructurando el uno a cero parcial, e instalando la sorpresa en el Bicentenario.

¿Y el fútbol?

El segundo tiempo quizás estuvo de más. Y es que por cerca de 20 minutos el balón estuvo más fuera de la cancha que dentro. Con dos elencos carentes de un émbolo creativo, solo se apostaba al pelotazo largo, que en resumidas cuentas, no trajo llegadas de gol a ninguno de los pórticos.

Ninguno de los dos equipos era claro dominador, pero Ñublense tenía el partido controlado jugándolo en el mediocampo, hasta que el técnico Pablo Abraham, restando cinco minutos para el final, decide amarrar la victoria ingresando a un quinto central, según él, para cuidar al nuevo delantero que Morning había hecho ingresar, que no había gravitado mayormente.

Este cambio lo aprovechó la visita en su favor, y comenzó a instalar a Ñublense en su arco, hasta que el esperado gol les llegó. A los 90 minutos, y tras un centro de Gonzalo Reyes, la defensa no puede despejar el balón, le queda a David Escalante que define casi cayendo para meter el esférico entre poste y arquero con un tiro bajo, estructurando la igualdad.

Tras el gol, Escalante celebró haciendo un gesto obsceno hacia la tribuna tomándose sus genitales, indicando a alguien en la zona alta, donde precisamente estaba el DT Hernán Godoy, quien cumple fechas de castigo. Esto lo observó el árbitro quien no dudó en mostrarle la roja directa y dejar al equipo con 10, ya en el epílogo del juego.

"Estamos tristes por cómo se dio el partido, lo teníamos prácticamente abrochado y nos llevamos un empate que nos deja con sabor amargo", lamentó sobre el final el capitán del equipo, José Antonio Rojas.

De esta forma Ñublense suma 23 puntos para quedar undécimos en la tabla, y la próxima semana visitarán a l cuadro de Magallanes el domingo a las 17.30 horas.

llegó el empate 90'

para Santiago Morning gracias al gol de David Escalante, quien se iría expulsado por hacer un gesto obsceno. 11