Complejo Volcánico formó nuevo cráter de 100 metros de diámetro
VOLCÁN. Fusión de cráteres fue ratificada tras un sobrevuelo al macizo cordillerano de Ñuble por parte de Sernageomin.
A través de un nuevo sobrevuelo en helicóptero al Complejo Volcánico Nevados de Chillán, el Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin) evidenció la unión de los dos cráteres formados por las explosiones registradas en el trasfondo de la alerta técnica Amarilla, que la institución mantiene vigente desde el 31 de diciembre de 2016 para este macizo.
Mediante un informe, la institución a cargo de monitorear los volcanes activos más peligrosos de Chile señaló que "desde el punto de vista morfológico, debido a la energía involucrada en los más recientes ciclos de explosiones reportados desde enero de 2017, se ha producido la unión de los cráteres activos, generando así un cráter único de aproximadamente 100 metros de diámetro, lo que sucedió entre el 7 y el 15 de marzo de 2017".
El sobrevuelo, según el servicio público, registró cinco explosiones en un lapso aproximado de una hora, la mayor de las cuales alcanzó una altura de 900 metros sobre el cráter activo, dispersando roca particulada y pulverizada hacia el sector sureste del volcán.
Posterior a la ocurrencia de las explosiones se pudo corroborar la permanencia de la actividad fumarólica de baja intensidad y tonalidades preferencialmente blancas, localizadas en los cráteres Nuevo y Arrau.
Las imágenes tomadas en la parte alta del Complejo mostraron bajas temperaturas, similares a las obtenidas en sobrevuelos anteriores, las cuales no sobrepasaron los 75° Celsius.
Cabe señalar el 17 de marzo pasado el Sernageomin registró por primera vez, desde el inicio del ciclo eruptivo, un cambio cualitativo en la situación interna del volcán, al sugerir "que la actividad del cuerpo magmático profundo ha ascendido a niveles más superficiales, generando un proceso de mayor interacción con el sistema hidrotermal superficial", lo que explica el relativo incremento en la frecuencia y magnitud de las explosiones.
Lo anterior, considerando que hasta ahora, según el Sernageomin, lo central de las emisiones se explica porque el magma profundo calienta reservorios de agua más superficiales dentro del volcán, motivando así que el vapor arrastre partículas de roca generadas en erupciones pasadas. Por ello, la institución ha señalado que una de las prioridades es monitorear el origen de las emisiones, para determinar cuando se trate de ceniza volcánica proveniente de magma nuevo, y no sólo de ciclos eruptivos anteriores.