El escenario del imponente Teatro Municipal de Chillán será testigo de un hecho histórico para los amantes de la danza clásica: la presentación el próximo 11 de mayo, a las 20:30 horas, por primera vez en la futura capital de la región de Ñuble, del reconocido mundialmente ballet ruso Beriozka.

Los europeos, que desde el 3 de mayo se encuentran en nuestro país, vienen precedidos de actuaciones tanto en naciones vecinas como en Chile, donde se presentarán por última vez en Talca el 12 de mayo, tras lo cual regresan a Rusia.

Sobre su visita a Chillán, su director Sergey Azovsky se mostró expectante, sobre todo pensando en el lugar de privilegio que ocupa Chillán en términos culturales a nivel país.

"Hemos leído bastante respecto a las diferentes manifestaciones artísticas que han nacido en esta ciudad, que es cuna de personajes muy importantes en la historia. Sabemos que es un público especial que sin duda, disfrutará y valorará nuestro trabajo sobre el escenario", explicó Azovsky.

Rica tradición

Formado en 1948, "Beriozka" significa abedul, que es el árbol tradicional de Rusia, tiene el tronco muy fino, elegante, simbolizando en parte también la belleza de la mujer rusa. "Precisamente con el Beriozka parte su espectáculo, ya que fue el primer baile que interpretó el ballet, y que le trajo fama internacional", recordó Azovsky.

Pese a que a lo largo de su historia ha pasado algunos momentos complejos, motivados por los cambios políticos que ha experimentado Rusia, el ballet sigue en pie, dejando en lo más alto el nombre de Rusia en distintos escenarios a nivel mundial. A la hora de analizar cuáles han sido las causas para perdurar en el tiempo, "la clave para mantenerse es el trabajo en conjunto, el gran profesionalismo, además del gusto por lo que hacen, pues en cada una de sus actuaciones están contando la rica historia de nuestro país", subrayó el director del ballet Beriozka.

Respecto a la relación del ballet con nuestro país, esta también ha estado marcada por aspectos político sociales. El vínculo del ballet ruso "Beriozka" con Chile es histórico. En 1962, se presentan por primera vez en Santiago con éxito arrollador en el Teatro Municipal y en el Teatro Caupolicán. Su regreso estaba pensado durante 1973, pero la visita se tuvo que cancelar debido a la situación política que había en nuestro país en ese instante de la historia.

Sin duda, uno de los aspectos a destacar respecto a esta agrupación es la calidad técnica de las 90 personas que conforman su cuerpo de baile, 50 de los cuales se encuentran participando en esta gira. En poco más de una hora y media, los artistas egresados del Teatro Bolshoi se prodigan al máximo para lograr en cada escena, en un juego de simetrías y asimetrías, un trabajo coreográfico de exquisita composición. En ese sentido, uno de los actos más conocidos es "La suite de Siberia", donde un oso baila junto a las bailarinas y compite con los jóvenes en fuerza, gracia y elegancia.

Otro de los momentos culmines sobre el escenario corresponde al denominado "Vals Beriozka", donde un grupo de esbeltas bailarinas con trenza hasta la cintura, una ramita de abedul en la mano y en la otra con un pañuelo azul, se mueven de tal forma que pareciera que el escenario se mueve y no las bailarinas.

Cercanía

Pese a la lejanía, diferencias culturales e idiomáticas, el público latinoamericano evalúa en muy buenos términos el desempeño del ballet Beriozka. Lo anterior, a juicio de su director Sergey Azovsky, se traduce en la gran asistencia y valoración de la gente de esta parte del mundo, incluido Chile, a lo efectuado por su cuerpo de baile. "La gente sale encantada, les fascina el espectáculo, muchos aplausos y al final se ponen de pie, realmente es muy reconfortante. Y en el caso de ustedes, en Chile esa conexión es aún mayor", analizó gratamente el director del afamado cuerpo de baile ruso.

"Sabemos que el público de Chillán es especial, que sin duda disfrutará y valorará nuestro trabajo sobre el escenario".

Sergey Azovsky, Director del ballet Beriozka."