"Va a ser muy difícil adaptar mi nueva novela a la pantalla"
La autora británica Paula Hawkins, que vendió 20 millones de copias con "La chica del tren" (2015), su obra debut, acaba de volver a las librerías con su segunda novela, "Escrito en el agua", que antes de ser lanzada ya tenía un acuerdo para convertirse en película, igual que su primer libro.
Aunque asegura que no siente que su firma sea garantía de nada, todavía, la segunda novela de Paula Hawkins ya tenía confirmada una adaptación al cine incluso antes de llegar a las librerías.
-"La chica del tren" fue un gran éxito. ¿Le puso presión al proceso de tu segunda novela?
-El libro lleva un tiempo publicado en inglés y acaba de salir en español. ¿Cómo ha sentido la recepción?
-¿Siente que su nombre ya es una especie de garantía?
-Pero "La chica del tren" y "Escrito en el agua" tienen en común un tono oscuro, ambos son thrillers. ¿Es un género que la hace sentir cómoda? ¿Le gustaría que este fuera tu camino en adelante o le gustaría explorar otros géneros?
-Dice que estas son historias sobre familias y relaciones, pero también son historias sobre mujeres. ¿Es esta una historia feminista?
Caza de brujas
-¿Por qué cree que la caza de brujas todavía es tan interesante hoy? ¿Cómo ve que ese interés va cambiando con los años?
-La memoria es otro de los temas en común de esta novela con la anterior. ¿Es un tópico que le interesa en particular?
-Para construir la historia usó una estructura coral, fragmentada, como en "La chica del tren". ¿Es una estrategia que le funciona o tuvo reparos al momento de plantearte cómo escribirla?
Para la pantalla
-Esta es una historia muy cinematográfica. ¿Tuvo eso en mente cuando la estaba escribiendo?
-Dice que esta es una historia difícil de trasladar a la pantalla grande, porque es muy fragmentada…
-¿Quedó conforme con la adaptación al cine de "La chica del tren"?
hawkins dice que su segundo libro lo tuvo escrito antes que el primero, pero no había tenido tiempo para publicarlo.
Por Carolina Collins
En 2015 la escritora se convirtió en uno de los fenómenos del año con "La chica del tren", su novela debut que vendió más de 20 millones de copias y que llegó a la pantalla grande con Emily Blunt como protagonista. Stephen King, el maestro del horror, le dedicó palabras para celebrar su debut.
Pese a esto, con su segunda obra recién llegada a las librerías, "Escrito en el agua" (Planeta), la autora nacida en Zimbabue y nacionalizada británica, siente que recién se está haciendo un nombre en el género que comenzó a explorar cuando dejó su carrera como periodista para dedicarse a escribir ficción.
Desde España, donde estuvo promocionando la traducción al español de su nuevo libro, la autora cuenta que aunque llega dos años después que su primer libro, la historia de "Escrito en el agua" estuvo dando vueltas en su imaginación incluso antes que la de "La chica del tren". Pero el éxito de esta última hizo que finalmente tardara tres años en completar las 560 páginas que tiene su nueva novela, que tal como su antecesora, gira en torno a personajes femeninos.
"Escrito en el agua" es un relato coral en el que el lector de a poco va conociendo las perspectivas de varios habitantes de Beckford sobre la muerte de Nel Abbott, quien se obsesiona con el río que cruza el pueblo. Esas aguas están relacionadas con el suicidio de varias mujeres que se han lanzado a ellas desde el siglo XVI, por la cacería de brujas en Europa, hasta la actualidad.
-Sí, en realidad ya había empezado a escribir "Escrito en el agua", antes de que "La chica del tren" fuera publicada. Así que ya sabía qué historia quería contar y qué personajes iba a desarrollar. Pero sí, después "La chica del tren" se convirtió en un gran éxito y mi proceso de escritura estuvo muy interrumpido, porque tuve un montón de giras, tuve que viajar a Estados Unidos y por todo el mundo. Así que eso hizo mucho más difícil escribir. Y sí, hay diferentes presiones cuando has escrito algo con mucho éxito, tienes mucha gente esperando ver qué haría después. Pero honestamente traté de no pensar demasiado en eso. Traté de enfocarme en la historia que quería contar, en los personajes que quería explorar y escribir el mejor libro que pudiera escribir y no pensar mucho en cómo sería recibido.
-Muy bien, hasta ahora. Es número uno en Inglaterra y dos en Estados Unidos. La recepción crítica ha estado dividida, algunas buenas, otras no tanto, algo que creo que era esperable. Dado el éxito de la primera, esta iba a ser escrutada muy de cerca.
-No lo creo, no realmente. Porque no creo haber escrito lo suficiente para ser percibida como una marca y creo que porque los dos libros son diferentes. Obviamente hay similitudes, pero no soy alguien que haya escrito una serie o un montón de libros que vayan a ser lo mismo. Quiero hacer cosas diferentes, ser ambiciosa, tratar de hacer algo nuevo con estos libros. Así que no me siento así por el momento, no sé cómo lo ven los lectores, pero yo no lo veo así.
-Creo que por el momento me quiero quedar en este género. Estoy interesada en contar este tipo de historias, historias oscuras sobre familias y relaciones y cómo salen mal. Así que por el momento creo que es donde me quedaré, pero no sé en cinco años más, quizás quiera hacer algo diferente.
-Sí, creo que es una historia feminista. Obviamente mucho de lo que ocurre en este libro es sobre la forma en que las mujeres… son mujeres un poco difíciles o que dicen lo que piensan o no hacen lo que les dicen que hagan. Que en todo el camino han sido silenciadas por la sociedad y que han sido silenciadas por cientos de años, porque obviamente hay una historia del lugar sobre el que he escrito. Así que sí, para mí es sobre la forma en que estas personas intentan controlar el comportamiento de las mujeres.
Pese a que "Escrito en el agua" transcurre en un pueblo ficticio, está inspirado en la realidad. Para escribir la novela, Hawkins arrendó por un mes una casa en el condado de Northumberland, ubicado en el norte de Inglaterra, en la frontera con Escocia. Es un lugar donde no vive mucha gente y por el que la autora caminó hasta que dio con la historia que quería contar.
Los hechos transcurren en la actualidad, pero tienen una conexión con el pasado, por el caso de una adolescente que fue ahogada en el río del pueblo ficticio como parte de la cacería de brujas que ocurrió entre el siglo XVI y XVII en distintos países de Europa.
-Creo que lo que es interesante para mí, es que es algo que ocurrió de manera bastante generalizada en Europa en un cierto tiempo, entre el siglo XVI o XVII, y al mismo tiempo es algo que no es tan hablado: que miles de personas fueron asesinadas. Fue una forma gigantesca de eliminar elementos que eran vistos como antisociales o fuera de la norma social. Y estoy fascinada con esta idea, particularmente porque fue en su mayoría sobre las mujeres, había hombres también, pero en general fue sobre mujeres. Encuentro eso fascinante, obviamente nuestra sociedad hoy es diferente, pero algunas cosas y motivaciones vuelven a ocurrir hoy.
-Sí, mucho. En "La chica del tren" yo estaba hablando de algo en específico, que era la pérdida de memoria causada por un problema con la bebida. En este libro estoy más interesada en una falla de memoria más general que todos tenemos. Todos olvidamos cosas, o recordamos mal, o reinterpretamos cosas que nos han pasado. Y no creo que pensemos en que lo hacemos, pero lo hacemos todo el tiempo. Tenemos historias de la infancia que contamos todo el tiempo y creemos completamente, pero en realidad quizás están basadas en una verdad y no son toda la verdad, o sólo son una versión de la verdad. Y estoy interesada en eso, en cómo confiamos en nuestra memoria cuando en realidad olvidamos cosas todo el tiempo, incluso cosas importantes.
-Se siente muy diferente de "La chica del tren", porque es un coro de voces mucho más grande, y para ser honesta, no es algo que planeara desde el principio, pero en la medida que comencé a escribir la historia, se sintió como la mejor manera de contarla, tener todos estos puntos de vista y permitirle al lector de escuchar todas estas voces y tener un número de distintas interpretaciones de lo que está pasando. Fue algo difícil de hacer, un desafío escribirlo y no es necesariamente fácil de leer, creo que toma un tiempo entrar al ritmo y conocer la arquitectura de la historia.
En febrero, dos meses antes de su llegada a las librerías en la versión en inglés, se confirmó que los derechos de la segunda novela de Hawkins, tal como ocurrió con la primera, habían sido adquiridos por DreamWorks para convertir el libro en película, que será producida por los mismos productores que estuvieron detrás de la premiada "La La Land", Marc Platt y Jared LeBoff.
La autora cuenta que a diferencia de lo que ocurrió con "La chica del tren", en esta nueva adaptación tendrá mucho más que decir y que operará como consultora para la escritura del guión.
-Honestamente, no lo estaba pensando. Entiendo lo que dices, hay aspectos muy cinematográficos visualmente: el río, el pueblo, todos esos aspectos. Creo que en realidad va a ser muy difícil de adaptar a la pantalla, por la cantidad de personajes y porque pasan muchas cosas como para condensarlas en 90 minutos. Pero no pienso en eso particularmente cuando escribo, me concentro en la novela, no en lo que va a pasar después de publicarla.
-Creo que va a ser una adaptación más difícil porque hay tantas voces y porque hay un número de distintos misterios. Creo que para hacer la adaptación exitosa quizás necesitemos desnudarlo un poco, quizás enfocarlo un poco más, no sé exactamente. Sí creo que te puedes acostumbrar a la fragmentación a lo largo de una novela, puedes conocer a los personajes lentamente, pero no tienes tiempo de conocer a la gente tanto en 90 minutos, así que va a tener que ser probablemente un poco diferente.
-Sí, creo que hicieron un buen trabajo, una adaptación muy fiel al libro. Creo que se veía hermoso visualmente, muy oscuro, y pienso que Emily Blunt fue fantástica como Rachel (Watson, personaje central), así que estaba muy feliz.
AP/Matt Dunham