Valdés y Céspedes
Señor Director:El que cambie el DT (la presidenta Bachelet) a un jugador (ministro) clave en el desempeño de su equipo (Gobierno) en los minutos postreros del partido (de su mandato), podría tener varias explicaciones: que reciba la ovación de su parcialidad o tal vez evitarle mayor desgaste y reservarlo para el próximo partido (gobierno).
Sin embargo, todo indicaría que no existiría tal posibilidad, por presiones extra-futbolísticas (política- partidistas), para aumentar los goles a favor (levantar la aprobación en encuestas). Ala luz de los hechos, el jugador (el ministro) en cuestión tampoco ha pedido el cambio, no está con molestias, quiere seguir jugando, pero sabe que su permanencia en la cancha (Gobierno) depende del DT (de la presidenta Bachelet); cualquiera otra idea o especulación al respecto, todos sabemos que forma parte del "secreto de camarín" ("la realidad sin renuncia"), aunque siempre se sabe que el ayudante técnico (el Segundo Piso) tiene su aporte en las decisiones del DT (la presidenta Bachelet).
Ojo, el encuentro (el Gobierno) es sin tiempo de descuento, es ahora o nunca. Raya para la suma, el cambio va, salen Rodrigo Valdés (Hacienda) y Luis Felipe Céspedes (Economía), definitivamente al parecer ganó el medio ambiente en el partido del "Dominga" y por goleada. Es un cambio en desarrollo.
"La desesperación es la materia prima del cambio drástico" (William Burroughs, crítico social, U.S.A. 1914-1997).
Luis Enrique Soler Milla.
Salida de ministro
Señor Director:La salida del equipo económico como coletazo por el rechazo al proyecto Dominga ha puesto una vez más en el tapete la discusión sobre la protección del medioambiente y la síntesis de sustentabilidad y crecimiento. La presidenta ha enfatizado una posición inclinada a que hay que supeditar el crecimiento a la protección ambiental, como si ello fuera opuesto.
Pero quienes cantaron victoria con la salida de los ministros que se mostraron preocupados por sacrificar puestos de trabajo (otro tipo de zonas de sacrificios) por una sustentabilidad, con más razones ideológicas que técnicas, pueden haber tenido una victoria pírrica.
Los nuevos ministros han mostrado en el pasado la misma línea del equipo saliente. Cuando era ministro en septiembre del 2001 el ministro Rodríguez Grossi señaló que "Nos preocuparemos de los pobres y luego de los árboles", agregando que: Si hubiese habido organizaciones ecologistas cuando salió Colón, no nos hubieran descubierto nunca. Más del 20% de la población vive bajo la línea de pobreza, por lo tanto, tenemos que fomentar que haya actividad económica nueva, a fin de poder darle trabajo digno, después nos preocupamos de los pajaritos y los arbolitos".
Por su parte, el ministro Eyzaguirre señaló ante la misma preocupación que "Hay que sacrificar algo cuando está de por medio el crecimiento económico", ante la consulta de si sus expresiones implicaban seguir talando los bosques nativos.
Si bien las cosas han cambiado, hemos crecido y hoy es mayor la preocupación por el medioambiente, si nos atenemos a lo dicho por los ministros, la senda del crecimiento no debiera ser sacrificada, y será compatible con la sustentabilidad
Carlos Martínez. Asesor Académico Círculo Acton Chile.
Chilenidad en el Teatro
Señor Director:Cuando la chilenidad se ha venido asociando a histrionismos deportivos y a borracheras para el 18, resulta reconfortante asistir a una auténtica fiesta patriótica centrada en un repertorio selecto de canciones con una interpretación magistral de Óscar Quezada. El 30 del mes que termina el Teatro Municipal de Chillán, como siempre con notable concurrencia, ofreció un recital que sólo cabe agradecer a los que lo programaron y a los artistas que lo realizaron.
Como se sabe, Óscar Quezada es un lírico de la ópera con exitosas actuaciones en Alemania donde reside y luce su talento en calificados escenarios. De paso por Chillán ofreció una gala de clásicas chilenas que el público aplaudió con vivo entusiasmo, tanto que en la cueca final la profesora Nieve Retamal sacó a su marido al ruedo y se despachó una cueca como en la mejor fonda.
"Es que estas canciones me tocaron el alma", le escuché decir cuando era felicitada por su audacia. Entre las canciones que nos regalaron estuvo el famoso tríptico de Neruda y Bianchi sobre O'Higgins, Carrera y Rodríguez, Chile de Jorge Infanta, el Copihue Rojo de Verdugo Cavada, la "canción nacional" de Valdivia, Camino de Luna de Aguirre Pinto, pasajes de la Pérgola de las flores, entre otras, y al cierre esa canción que siempre conmueve por su belleza y profundidad: Gracias a la vida de Violeta Parra.
Hermosa jornada que contó con una orquesta improvisada pero de notables músicos y un canto cargado de emoción patriótica por un chileno que conociendo el mundo aprendió a valorar lo que tenemos como historia, cultura, bellas artes, tradiciones. ¡Este es el patriotismo que debe enseñarse en las escuelas y que deberían difundir los medios informativos! En las antípodas del patriotismo futbolero y de los "terremotos" de las Fiestas Patrias.
Dr. Alejandro Witker.