Seguridad e incertidumbre. Esos son los conceptos que se han reiterado en los últimos encuentros masivos de los regantes de la zona centro sur del país ante el avance de varias iniciativas que apuntan a reformar la institucionalidad del agua -vigente desde 1981-, y en particular el proyecto que pasó a la Comisión de Agricultura del Senado en segundo trámite legislativo.
Por eso ayer, dirigentes de las regiones del Maule y Ñuble anunciaron que esperan "ser escuchados" por los parlamentarios y poder manifestar su preocupación con un acto masivo en la medialuna de la capital de la nueva provincia de Diguillín.
"Llevamos más de 200 reuniones por este tema y unas 10 masivas, varias de ellas con miles de personas en Linares, San Fernando, Melipilla y Chillán, y la idea es terminar en San Carlos con una manifestación más masiva", comentó el presidente de la Junta de Vigilancia del Ríos Ñuble, Martín Arrau.
El dirigente reiteró que la Reforma al Código de Aguas es más bien de corte ideológico, más que técnico, y prueba de ello es la última reunión con el Ministro de Agricultura el lunes de la semana pasada.
"Vimos varios temas de riego y le planteamos nuestra preocupación, porque el proyecto había salido de la Comisión de Recursos Hídricos con suma urgencia. Él nos dijo que nos quedáramos tranquilos y que íbamos a tener tiempo para discutir. Seis horas más tarde, en el Senado el Gobierno ingresó la suma urgencia", comentó en relación al proyecto contenido en el Boletín 7543-12.
Respecto al avance de la iniciativa, que podría ser aprobada antes de las elecciones de noviembre, Arrau sostuvo que el Gobierno tiene todas las prerrogativas para que ello ocurra, aunque cree que los parlamentarios de distintos sectores preferirían ahondar en el análisis.
"Hoy el proyecto está en la Comisión de Agricultura del Senado, donde tenemos la suerte que dos de los cinco integrantes son de esta zona, pero necesitamos que nos escuchen. Hemos tratado de tomar contacto con ellos. El senador (Víctor Pérez) nos ha escuchado y el senador (Felipe) Harboe no ha logrado entrar en materia y esperamos que así sea", dijo Arrau.
Arrau indicó que para ello oficiarán a todas las juntas de vigilancia para pedir que la Comisión de Agricultura del Senado pueda sesionar en Ñuble.
Puntos clave
El juez de Aguas de la Junta de Vigilancia y Río Diguillín, y consejero del Consejo de la Sociedad Civil (Cosoc) del Ministerio de Obras Públicos, Francisco Saldías, dijo que le manifestó al ministro Alberto Undurraga que una de las mayores preocupaciones es el artículo 132 del Código, que al ser reformado, se le exigirá tener sus títulos de agua debidamente inscritos en el registro respectivo.
"El proyecto está en la Comisión de Agricultura, donde tenemos la suerte que dos de los cinco integrantes son de esta zona"
Martín Arrau, Pdte. J. Vigilancia del Río Ñuble"
Perjuicio para pequeños regantes
Para Francisco Saldías, los más perjudicados serán los pequeños regantes por el costo (más de 2 millones de pesos) y por la amenaza de que especuladores podrían inscribir sus derechos logrados a través de "derechos consuetudinarios". El Artículo 1 transitorio de la Reforma al Código de Aguas exigirá 5 años para ese trámite, que según la DGA debían hacerlo unos 330 ml regantes. En el caso del Río Chillán serán 2/3 ellos (mil agricultores), un número menor en el Diguillín y menos del 10% de los 6 mil regantes de Río Ñuble.