Ex mirista condenado por secuestro en Brasil queda en libertad
CÁRCEL. Alfredo Canales cumplía pena en Chile por el plagio de Washington Olivetto.
En libertad condicional quedó ayer el ex integrante del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR) Alfredo Canales Moreno (48), quien cumplía en Chile una pena de cárcel por el secuestro de empresario Washington Olivetto, ocurrido en Sao Paulo, Brasil, en diciembre de 2001.
El ex mirista llegó a Chile en noviembre de 2014 para cumplir los 18 años que le restaban de la condena de 30 años que recibió por el plagio, que perpetró junto otras cuatro personas, entre ellos, el ex integrante del Frente Patriótico Manuel Rodríguez (FPMR) Mauricio Hernández Norambuena, conocido como "Ramiro", quien sigue preso en Brasil.
Canales cumplió 12 años de su condena en un penal brasileño y fue trasladado a Chile hace tres años tras un acuerdo entre el país y Brasil que permitió su extradición.
Desde entonces, Canales Moreno permanecía privado de libertad en la Cárcel de Alta Seguridad, desde donde fue liberado luego de que ingresara un recurso de amparo para protestar en contra de la decisión anterior de la Comisión de Libertad Condicional, que había rechazado otorgarle ese beneficio, por un informe psicosocial que concluyó que no se encontraba "corregido ni rehabilitado para la vida social", pese a que contaba con un certificado de conducta positivo emanado de Gendarmería.
Recurso de amparo
Según consignó ayer "La Segunda", el tribunal acogió en forma unánime el recurso de amparo y ordenó su libertad condicional inmediata, argumentando que la "falta de fundamentación precedentemente apuntada conlleva considerar arbitraria la decisión adoptada en su mérito" y la facultad del artículo 21 de la Constitución "para adoptar las medidas o providencias que juzgue necesarias con el objeto de restablecer el imperio del derecho y asegurar la debida protección del afectado", dice el fallo.
El secuestro del publicista fue perpetrado en diciembre de 2001 y duró 53 días, hasta que la Policía descubrió a los captores, que demandaban un rescate de 10 millones de dólares.
Canales Moreno y Hernández Norambuena fueron condenados por el secuestro del empresario a 16 años de cárcel en 2002, pero la Fiscalía brasileña apeló y logró una condena de 30 años.