Danny Fuentes Espinoza
Un plazo de investigación de cuatro meses fue el que fijó el tribunal de Garantía de Chillán para que la fiscalía aclare el homicidio del comerciante ambulante Pedro Venegas, por el cual ya está detenido uno de los dos supuestos autores, quien ayer quedó en internación provisoria.
Se trata de un adolescente de 16 años, estudiante de segundo medio de un liceo emblemático de la ciudad, capturado por la Brigada de Homicidios (BH) de la Policía de Investigaciones (PDI) durante la tarde del miércoles, tras ser sindicado por una persona en situación de calle.
Desde la PDI, el comisario Luis Garrido, subjefe de la BH de Chillán, explicó que la agresión ocurrió pasada la una de la madrugada del día martes en calle Constitución, entre avenida Brasil y pasaje Mac Iver, frente al ex terminal de buses Línea Azul.
En el lugar, taxistas, vecinos y personas en situación de calle (quienes luego fueron empadronados) dieron cuenta de lo ocurrido a Carabineros y a personal del Samu que trasladó al hombre agredido, conocido como "Pedrito", hasta el hospital Herminda Martín, donde dejó de existir cerca de las 4 horas del día miércoles.
En la audiencia de formalización del menor K.J.A.G., el fiscal Eduardo Planck relató que los interrogatorios de los detectives surgieron efecto, ya que "una de las personas indigentes que estaba en la pasarela El Caracol, durmiendo, ve llegar a estas personas (los dos agresores) y dice que venían gritándole a los taxistas".
De hecho, uno de los taxistas declaró ante la PDI que vieron como dos personas, irreconocibles, en medio de la oscuridad, golpearon con los puños y luego patearon en el piso a Pedro Venegas, para posteriormente retirarse del lugar, ufanándose de la golpiza.
Según manifestó el abogado persecutor, además de los insultos, los menores habrían dicho "dejen de sapear y vayan a ver al viejo, que parece que está muerto".
Tras la agresión, el adolescente y su acompañante, dijo Eduardo Planck, "se suben a la pasarela de El Caracol, donde esta persona en situación de calle tiene su colchón y los reconoce, asegurando que los ubica porque ha compartido alcohol con ellos, y aunque no sabe sus nombres, los podría reconocer".
Fue con estos antecedentes que la Policía de Investigaciones expuso un set fotográfico en que el testigo afirmó quiénes eran las personas que con anterioridad habían agredido a Pedro Venegas, un hombre de 49 años que desde hace 35 comercializaba charqui y maní en las inmediaciones del terminal de buses Línea Azul, siendo respetado por los demás comerciantes ambulantes y locatarios, quienes aseguran que el hombre tenía problemas de alcoholismo; no obstante, mantenía relaciones de respeto con los que se le acercaban.
Con los antecedentes investigativos entregados por la PDI, el fiscal Planck pidió ayer la internación provisoria del menor imputado, atendida la gravedad del delito y la probabilidad de fuga. El juez acogió la cautelar más gravosa, por lo que el adolescente fue trasladado hasta el recinto carcelario de Coronel. Ahora, queda pendiente la detención del segundo involucrado.
Defensa cuestiona que menor sea autor
La abogada de la Defensoría Penal Pública, Rocío Burgess, fue quien ayer defendió al adolescente de 16 años, quien hasta ahora no tiene antecedentes penales. En su exposición, cuestionó que su representado -ahora en internación provisoria- fuera quien agredió a Pedro Venegas, manifestando por ejemplo que uno de los taxistas declaró ante la PDI que los hombres que habían protagonizado la golpiza eran de tez blanca y el pelo castaño, lo que se diferencia del adolescente porque es moreno. Esto fue desestimado por el juez Luis Aedo al considerar contundentes las pruebas de fiscalía.
de diciembre 12