Investigadores publican Atlas Agroclimático de Chile en el siglo XXI
PLANTACIONES. El documento muestra la evolución del suelo, la temperatura y el agua en el país, de cara al cambio climático, proponiendo así alternativas para los cultivos de acuerdo a su ubicación. Está disponible gratuitamente.
La Fundación para la Innovación Agraria (FIA), dependiente del Ministerio de Agricultura, lanzó hace unos días la actualización para este siglo del Atlas Agroclimático de Chile, gracias al esfuerzo de investigadores de la Universidad de Chile, quienes condensaron en un sólo texto la información proporcionada por diversos organismos del rubro, como temperatura, calidad del suelo, etc. con el objetivo de servir de guía a quienes se dedican a cultivar la tierra, así como a sus inversores.
El Atlas Agroclimático entrega datos estadísticos para dimensionar los efectos del cambio climático sobre la agricultura nacional, además de lo que podría afectar, positiva o negativamente, en su desarrollo.
"El atlas contiene mapas, fichas y gráficos que aportan información sobre los climas actuales y las modificaciones que podrían experimentar en el futuro dentro del siglo. Además, posee una sección de evaluación de riesgos y eventos climáticos extremos, que permite prever las consecuencias que estos cambios podrían tener sobre los recursos hídricos, los ecosistemas, la productividad agrícola y los potenciales de producción agropecuaria en el país", explicó el director del Centro de Agricultura y Medio Ambiente (Agrimed), de la U. de Chile, Fernando Santibáñez.
El documento está disponible gratuitamente en las noticias de la página web del Observatorio para la Innovación Agraria, Agroalimentaria y Forestal, opia.cl.
"Lo importante de este tipo de herramientas es que permiten que distintos actores del sector tomen buenas decisiones para reducir al máximo los riesgos asociados a los cambios conductuales del clima. Es por ello que debemos entregar a los agricultores y productores, inversionistas, investigadores y asesores, y diseñadores de política pública, herramientas para monitorear dichos cambios, y proyectar su condición y efectos futuros", dijo la directora ejecutiva de la FIA, María José Etchegaray.
Innovación
"Son pocos los países que cuentan con un instrumento de este nivel de profundidad y de trabajo acumulado. (...) La historia de la agronomía y la agricultura es la adaptación al cambio climático. El desafío es ver cómo nos adaptamos con una base de información esencial que nos permita definir políticas públicas y alimente también la toma de decisiones comerciales del sector privado", explicó el ministro de Agricultura, Carlos Furche.
La FIA, en línea con ello, tiene Programas de Innovación en Adaptación al Cambio Climático y Gestión de Riesgos Agroclimáticos, los cuales han generado instrumentos para enfrentar de mejor forma los desafíos a los cuales se expone el sector agropecuario y forestal, con motivo de los cambios en el comportamiento del clima y la presencia creciente de eventos climáticos extremos como heladas, lluvias extemporáneas, sequías y granizos, entre otros.
Estrategia de adaptación
Responder a las necesidades tecnológicas, ambientales, sociales y climáticas frente a los cambios conductuales del clima, fue el objetivo de la investigación de la FIA, teniendo en cuenta las tendencias del régimen térmico y las precipitaciones en el siglo XX. El cambio en la intensidad de los fenómenos climáticos, junto con la intensificación de la agricultura en ciertas zonas del país, ha provocado pérdidas de millones de dólares al sector. por esto, el insumo básico de un plan de adaptación es la identificación del estado actual y futuro de las amenazas que implica el cambio climático para el país, en sus distintas regiones, lo cual permite desarrollar una capacidad nacional para gestionar estos riesgos, así como para proyectar el efecto que podrían tener.
Chile elaboró un Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático, donde se potencia el rubro agrario. 2014
El Banco Mundial señaló que el planeta podría aumentar su temperatura en 4°C durante el siglo XXI. 2012