Prisión preventiva para los imputados por tráfico de 744 kilos de marihuana
JUDICIAL. Imputados permanecerán en la cárcel de Chillán mientras que el menor de edad irá a un centro provisorio en Coronel. Hoy formalizarán a los sujetos que resultaron detenidos en Iquique.
Pasadas las 11:00 de la mañana de ayer, en el Tribunal de Garantía de Chillán se llevó a cabo el control de detención de 12 imputados involucrados en la incautación de 744 kilos de marihuana proveniente de Bolivia y que tendría como destino varias ciudades del país.
Durante la audiencia que se extendió por varias horas, el fiscal jefe de Chillán, Pablo Fritz, y el abogado Florentino Bobadilla presentaron una serie de evidencias recopiladas durante la investigación iniciada en octubre del año pasado contra la banda criminal. Dichas pruebas fueron suficientes para que la magistrada Claudia Madsen ordenara la prisión preventiva por los delitos de tráfico de drogas, tenencia de arma de fuego y municiones y tenencia de arma prohibida para 11 de los formalizados, mientras que para el menor de edad decretó internación provisoria en Coronel.
Los acusados responden a los nombres de Haibilyn Vera Contreras, Ariel Silva Aros, Carolina Jara Gutiérrez, Luis Vera Silva, Nelly Contreras Villalobos, Brian Vera Contreras, Luis Castillo Vera, Julio Pizarro Asencio, Macarena Lozano Alvarado, Diego Mardones Ferrada y el ciudadano de nacionalidad boliviana, Wilfredo Mamani Juntuta, mientras que el menor de 17 años fue identificado por las siglas M.C.V.
Pese a que la defensa, integrada por cuatro abogados, alegó ilegalidad en ciertos procedimientos efectuados por el Ministerio Público, la jueza Madsen señaló que "no es posible dudar que sí existe una organización donde cada uno de los imputados cumple una función y recibían un pago por dicha función (…) La agrupación estaba destinada a la comercialización de droga abasteciendo de droga a gran parte del país".
De igual manera, señaló que las eventuales condenas partirían desde los 10 años de presidio y otorgó un plazo de cuatro meses para continuar con las investigaciones.
Una vez dictadas las medidas cautelares de prisión preventiva, el fiscal Fritz estuvo de acuerdo con las acciones. "Nos deja conforme, estamos en la etapa procesal del inicio de la investigación formalizada, el tribunal accedió a cada una de las peticiones en esta extensa audiencia en la cual hemos reproducido parte de los audios particularmente y hemos exhibido las imágenes de los procedimientos que se hicieron a los distintos miembros de la banda", señaló el fiscal jefe de Chillán.
Informó que se efectuará una nueva audiencia para la formalización de tres personas que se encuentran detenidas en Iquique, también vinculadas a este mismo caso. "Mañana (hoy) hay otra audiencia para estos tres imputados que se encuentran en traslado y posteriormente tenemos que citar a las personas que se encuentren privadas de libertad a quienes también tenemos que formalizar", reveló Fritz.
Los cabecillas de la banda cumplen condenas en la cárcel Colina I, en Santiago, y responden a los nombres de Luis Castillo Poblete y Fernando Gómez, quienes serán trasladados a Chillán para su imputación.
Funciones delictivas
Durante la audiencia de control de detención, el Ministerio Público mostró una serie de pruebas que incluyeron grabaciones de conversaciones telefónicas, fotografías de reuniones y visitas a la cárcel Colina I, desde donde operaban los líderes de la organización criminal.
En las llamadas se evidenció el rol que cumplía cada uno de los integrantes de la banda, como por ejemplo el menor edad M.C.V., quien usando armas de fuego, algunas de ellas modificadas, cumplía la función de seguridad y custodia, mientras que su madre Haibilyn Vera Contreras se encargaba de la venta de droga. En el allanamiento de su domicilio, en la región Metropolitana, la Policía de Investigaciones encontró 290 dosis de cocaína, pasta base, armamento y más de $1 millón en efectivo producto aparente de la comercialización de la sustancia ilícita.
"El menor representa un inminente peligro para la sociedad por la enorme cantidad de armamento prohibido y modificado encontrado en su domicilio (…) el menor solo se dedicaba a la seguridad y su madre a la venta", expresó la magistrada.
Por otra parte, el chillanejo Diego Mardones Ferrada, quien hasta la tarde del martes se encontraba prófugo de la justicia, proveía de vehículos a ciudadanos radicados en Bolivia como forma de pago a cambio de la marihuana.
Asimismo, las evidencias mostradas en el Tribunal de Garantía señalaron que con varios meses de anticipación la organización criminal se dedicó a elaborar una estrategia para traer la droga desde Bolivia hasta el territorio chileno.
Mientras traían la totalidad de la droga, 744 kilos, esta era ocultada en el desierto de Antofagasta para luego ser traslada a una granja, la cual arrendaron con la finalidad de acopiar, compactar en forma de ladrillos, para luego distribuirla al interior de Chile.
De acuerdo a las informaciones anunciadas por los fiscales, el día de la incautación de la droga, el viernes 11 de mayo, el ciudadano boliviano conducía el camión en el que transportaban la mercancía, mientras que más adelante iban dos vehículos custodiando y alertando un posible control policial. Ese día tres sujetos resultaron aprehendidos con el cargamento, a la altura del peaje El Melón en Valparaíso.
Otras ocho detenciones ocurrieron el lunes 14 de mayo en Santiago tras una serie de allanamientos en las viviendas de los miembros de la banda, y por último el 15 de mayo aprehendieron al chillanejo, en la calle Arturo Prat de Chillán. Cabe recordar que otras tres personas están detenidas en la ciudad de Iquique.
Algunos de los imputados tienen antecedentes previos por los delitos de robo con intimidación, hurto y tráfico ilícito de droga.
Antecedentes
Investigación inició en Chillán en octubre pasado tras intervenir las llamadas telefónicas que contactaban a los proveedores.
Empresa de transporte de una de las imputadas se usó como fachada para la transferencia de fondos del tráfico de drogas.
Ciudadanos bolivianos recibían vehículos como parte de pago de la marihuana internada al país.
Desierto de Antofagasta fue usado para ocultar la droga y luego compactarla.
formalizados hay hasta el momento, aunque se espera que otras cinco personas sean imputadas hoy. 12