Ingrid Acuña Caballero
La vida de la pinteña Katherine Torres y la de su familia, quedó marcada a las cuatro meses de vida cuando le diagnosticaron una miocardiopatía dilata, minuto desde el cual todo cambió y hoy, a sus 11 años, está a la espera de un corazón artificial que le permita extender la espera para un trasplante de un corazón de verdad.
"Ella es nuestra única hija, nuestro tesoro, la regalona y estamos atentos a lo que ella necesita, pero trata de no preocuparnos porque es una buena niña que debió hacerse fuerte por su enfermedad. Ella está en la lista de espera nacional para un trasplante de corazón (tercera prioridad nacional), pero mientras eso pasa, su condición se agravó (18 de mayo) y necesita que le instalen un corazón artificial para lo cual debe venir un médico de Estados Unidos a operarla", relató Jamadiel Torres, padre de Katherine.
Fue la semana pasada que la condición de Katherine empeoró, y debió ser trasladada al hospital de la Universidad Católica, donde quedó hospitalizada y le informaron que requiere con urgencia el corazón artificial.
Sus padres, que viven en el sector rural del Chacay, se trasladaron como pudieron a Santiago, donde el hospital les facilitó una habitación por 9 días para que pudieran permanecer cerca de su hija, plazo que ya está por expirar y aún faltan cerca de dos semanas para que ingrese a pabellón para colocarle el corazón artificial.
"Mi señora es dueña de casa y yo trabajo como obrero. Hubo un tiempo en que trabajé apatronado en una constructora, pero como la enfermedad de mi hija demandaba estar al lado de ella para sus controles, y los permisos para ausentarse eran cada vez más constantes, decidí renunciar porque ya no me ponían buena cara cada vez que los pedía. Ahora trabajo independiente y con lo que gano no me da para costear una estadía en Santiago, y aún falta para que la operen y no queremos dejarla sola allá", explicó Jamadiel.
Bingo bailable
Los pinteños que conocen del caso de Katherine, se movilizaron y organizaron un bingo bailable para el 16 de junio, el cual tendrá un valor de $3 mil pesos y se realizará en el salón de eventos el Chacay, recinto que está ubicado cerca del kilómetro 42 camino a Pinto.
"Sabemos que la familia no tienen para costear una estadía en Santiago y están solos allá con su hija enferma y que no la quieren dejar sola. Sé que nadie quiere dejar solo a su hijo, sobre todo cuando es pequeño y está enfermo, así que estamos recibiendo las donaciones y premios para el bingo, porque queremos reunir la mayor cantidad de dinero para que la mamá y el papá de Katherine puedan estar tranquilos en Santiago", comentó Raúl Sandoval, vecino de Pinto y quien está a cargo del evento.
Para quienes quieran colaborar con donaciones o comprar entradas para el bingo pueden hacerlo al número telefónico 9 5056 9990 de Raúl Sandoval y al 956188653 de Silvia Costa o en el supermercado El Cochoto en Pinto. En tanto, los chillanejos que quieran hacer llegar su aporte pueden reservar sus entradas en el local Más Jugos ubicado en la calle El Roble N°736.
Lo que viene en adelante
Katherine trata de llevar una vida normal dentro de la compleja enfermedad que tiene, pero desde hace un mes en cada caminata hacia su colegio, cuyo trayecto es de tres cuadras, ha manifestado un cansancio que se vio reflejado con mayor fuerza en mayo cuando quedó hospitalizada en Santiago. El contar con este corazón artificial le permitirá durante 5 años esperar un trasplante, y en caso que no resulte, deberá nuevamente someterse a una operación para colocar un nuevo corazón artificial.
