Haitianos fallecidos en Coelemu fueron despedidos por familiares
CEREMONIA. Gracias a la colaboración de la embajada chilena en Haití, los familiares pudieron obtener sus visas y viajar hasta Chillán, ciudad que enterró a sus primeros migrantes haitianos.
"Estamos cerrando un ciclo de un lamentable accidente en el que fallecieron tres ciudadanos haitianos".
Carlos Ruiz, Jefe de Extranjería Gobernación de Ñuble."
"No hay que despreciar al extranjero, porque al final somos todos hermanos, aunque seamos de distintas razas".
Sergio Quezada, Asistente a la ceremonia."
"Fueron los primeros (haitianos que se sepultan en Chillán) porque no hemos registrado casos similares".
Adrien Joubert, Delegado Embajada de Haití."
Los tres haitianos que fallecieron intoxicados por emanación de gases en Coelemu fueron despedidos ayer por sus familiares que viajaron desde Haití gracias a la colaboración de la embajada de Chile en ese país. De esa manera, y con el pesar de sus compatriotas, se dio entierro a los primeros haitianos en Ñuble.
Chillán amaneció con temperaturas bajas y nubes que se negaban a permitir el paso del sol. En el Servicio Médico Legal, a metros de la Iglesia Las Carmelitas, representantes de la comunidad haitiana en la ciudad iban y venían, entraban y salían. El frío parecía no intimidarlos. Junto a ellos, y más bien siguiendo instrucciones, se encontraban tres recién llegados de su país de origen que viajaron hasta la ciudad capital con un único objetivo: sepultar a los suyos. Con el solo dominio de unas cuantas palabras en español, no fue necesario que profirieran alguna para comprender lo que sentían.
Además de ellos, hasta el lugar se trasladó Carlos Ruiz, encargado del Departamento de Extranjería y Migración de la Gobernación de Ñuble, quien, a un mes y un día de la tragedia ocurrida en Coelemu, donde perecieron intoxicados, reconoció el fin de un proceso.
"Estamos cerrando un ciclo de un lamentable accidente en el que fallecieron tres ciudadanos haitianos producto de la emanación de monóxido de carbono. Un accidente que se podría haber evitado y que nos abre puertas hacia nuevos puntos de trabajo con la comunidad haitiana y con los migrantes en general en Chile", señaló el jefe de Extranjería, el cual, además, se refirió al motivo tras la larga espera para el entierro.
"Desde el primer día (...) se decidió tomar contacto con la familia, y por las dificultades comunicacionales que existen con Haití ha tomado un poco más de tiempo. Lo otro es traer a los familiares para que les den una sepultura digna a sus seres queridos", indicó Ruiz en relación a las dificultades que tuvieron para obtener la visa.
Adrien Joubert, en representación de la embajada de Haití, también llegó hasta Chillán para acompañar a los familiares de los tres haitianos fallecidos el pasado 15 de junio, e informó sobre la colaboración que ha prestado el Departamento de Extranjería y Migración de la Gobernación Ñuble desde ese día.
"Hemos recibido ayuda moral, acompañamiento total de parte de Extranjería desde el primer día. La Gobernación no ha colaborado en todos los trámites necesarios para que esto resulte con éxito", agradeció Joubert, quien no descartó la realización de charlas preventivas en cuanto a calefacción para que la comunidad haitiana tenga mayor conocimiento sobre esta materia.
"Como estos son los primeros casos, ahora tenemos que entrar en estudio para después implementar un protocolo de prevención con la Gobernación (y comunicarlo) mediante charlas y distintos tipos de información", aclaró.
Tras el retiro de los cuerpos del Servicio Médico Legal, se procedió a la ceremonia religiosa en la Iglesia San Vicente, en la cual participaron más de sesenta personas, con presencia de algunos chilenos que quisieron entregarles apoyo a los familiares que viajaron desde Haití.
"¿Cuál es la diferencia entre lo que se hace en Chile a lo que se hace en su país? Vengo para darles un apoyo (…) No hay que despreciar al extranjero, porque al final somos todos hermanos, aunque seamos de distinta razas, somos todos uno sólo (…) La gente chilena, chillaneja, ojalá pueda más seguido darles una voz de aliento", expresó Sergio Quezada, uno de los asistentes a la misa de despedida.
Jacqueline Osses, quien se enteró de que se realizarían los funerales de los tres haitianos a través de la radio, tuvo similares palabras a las de Sergio.
"Son gente de otro país y hay que extender la mano a todos. Hay que ser consciente. Yo los voy a acompañar en la misa y en la sepultación (…) Además, yo creo que a los chillanejos les falta acoger a los haitianos", concluyó Osses.
De esta manera, Olguine Isema, Inecharles Mathurin y Kerby Badeay fueron sepultados en el Cementerio General de Chillán, con el profundo dolor que acompañó su partida.
Primeros haitianos sepultados en Chillán
Según información proporcionada desde la Gobernación de Ñuble y la embajada de Haití, Olguine Isema, Inecharles Mathurin y Kerby Badeay son los primeros ciudadanos haitianos sepultados en Chillán. "Esas tres personas fueron las primeras porque no hemos registrado casos similares. Eso nos va a servir de ejemplo para implementar un plan de prevención junto con la Gobernación y las autoridades locales", señaló Adrien Joubert de la embajada. Carlos Ruiz, jefe del Departamento de Extranjería, informó que "son los primeros tres ciudadanos haitianos que vamos a sepultar en la ciudad".