El volante Octavio Pozo es uno de los que más conoce al técnico Emiliano Astorga, fue dirigido por el entrenador en Unión La Calera, Arica y ahora en Ñublense.

Es por ello que es uno de los autorizados para hablar del sentir del entrenador y cómo el plantel asume el mal momento, no sólo por su cercanía con el director técnico, sino que también por ser uno de los más regulares de la campaña. "Al profe lo conozco hace mucho tiempo, como ser humano y profesional, y me siento responsable por no poder defenderlo dentro de la cancha. También hay otros compañeros que él conoce y tienen la misma visión que la mía, me da pena que al profe se le cuestione", dijo con voz apesadumbrada quien lleva la 8 en la espalda.

"Estamos en deuda con la institución y la gente que nos viene siempre a apoyar, se siente una pena grande hacia ellos que juntan los pesos para venir a vernos, nos está faltando algo y vamos a tener que revertirlo como hombres que somos", expresó a modo de 'mea culpa'.

"Sabemos que podemos dar más, pero eso hay que demostrarlo en la cancha, no queda nada si esto sólo lo hablas, las palabras se las lleva el viento, hay que demostrarlo dentro de la cancha y estamos al debe", agregó.

"Hay varios de los que estamos acá que hemos tenido batallas bastante duras y eso es lo que hay que sacar ahora a flote y cada uno aportar con un granito para apoyar al profe que ha sido una persona muy derecha con nosotros. Es lamentable que el público pida su salida, una persona como él no se merece esto, entendemos y es respetable que a algunas personas les guste o no, pero esto tenemos que levantarlo nosotros", sentenció el volante mixto.

Pozo reconoció que el domingo ante Magallanes están obligados a ganar.

Durante la tarde de ayer el plantel de jugadores se reunió con el entrenador Emiliano Astorga para tratar de arreglar algo que por el momento parece estar condenado al fracaso, considerando que el objetivo de Ñublense era pelear por el ascenso.

Se dijeron las cosas a la cara y se juramentaron sacar la situación adelante, sin embargo, la molestia y preocupación a nivel dirigencial superan las buenas intenciones y trascendió que el partido ante Magallanes será el ultimátum para Astorga y su cuerpo técnico.

De esta manera, si los chillanejos no ganan el duelo pactado para este sábado a las 15.00 horas, en el estadio de San Bernardo, el ciclo de Astorga en Ñublense llegaría a su fin.

Sin embargo, el mismo entrenador afirmó que no renunciará y ante lo cual se conversaría su salida de la tienda roja.

Si bien el problema de los malos resultados van de la mano de la baja actuación futbolística, cabe consignar que en caso que Ñublense caiga ante Magallanes y apelando a otros resultados, los chillanejos que actualmente se encuentran a seis unidades del colista -Arica con 16- podrían quedar a tres y ante lo cual la amenaza de un descenso que se veía como algo imposible, se comenzaría a hacer real.

Antes que la sangre llegue al río, Astorga opta por planificar el duelo, en una semana convulsionada. "Es difícil y complicado, pero el trabajo de nosotros -o mío- tiene que ser tratar de convencerlos, hacer cambiar a los jugadores y ver la forma de sacarle mayor rendimiento a ellos".

"Esto pasa muchos veces por lo anímico y lo sicológico, y también por el bajo rendimiento de algunos jugadores", agregó.

De hecho, Astorga no descarta potenciar el trabajo sicológico del plantel de cara no sólo al duelo de este fin de semana, sino que en el resto del torneo, en caso que siga al mando. "Es algo que en esta instancia es súper importante, hemos recibido dos fuertes golpes en las primeras dos fechas, algunos lo resisten y otros no y por eso tengo que ver qué piensan".

Posibles nombres

El rumor de la salida de Astorga es tan fuerte que incluso ya hay nombres que comienzan a rondar en el ambiente para suplirlo, unos con mayores opciones que otros.

Entre los menos probables trascendieron los de Jorge Pellicer y José Sulantay, incluso algunos postularon a Hernán "Clavito" Godoy, principalmente por su carácter motivador, aunque cabe señalar que estos dos últimos no son de la cuerda y el perfil de entrenadores de los que contrata la Sociedad Anónima.

En una segunda lista, pero más real, aparecen nombres como los de Ariel Pereyra, quien en el Torneo 2016-2017 fue una de las cartas reales para arribar a Chillán, mientras que tampoco se descarta el nombre de Luis Musrri, quien si bien fue despedido esta semana de Arica, en honor a la verdad las condiciones de trabajo en el norte no son las ideales. Así también, nuevamente se puso como candidato al gerente deportivo Rubén Espinoza, quien no querría asumir dicha función.

En buen chileno, será Patrick Kiblisky quien deberá "cortar el queque".

Horas 15.00

De este sábado Ñublense visitará a Magallanes, duelo clave para la continuidad de Astorga. 5