Obispado de Chillán reveló sentencias canónicas de cinco clérigos de Ñuble
IGLESIA. Red Laical de Chillán realizó ayer una asamblea con el denunciante del "Caso Maristas".
De forma exclusiva el Obispado de Chillán, a través del promotor de justicia de la Diócesis, sacerdote Luis Flores, dio a conocer información a Crónica Chillán respecto a las sentencias canónica contra clérigos de Chillán que han estado bajo investigación previa por presunto abuso de menores desde el año 2011 hasta la fecha.
Como reveló nuestro medio hace unas semanas, son 8 los procesos investigativos que ha realizado la iglesia a curas de Ñuble, en siete de los cuales se determinó que los hechos denunciados resultaron "verosímiles".
Sobre esos siete casos, la iglesia de Chillán indicó que "cinco están resueltos con sanciones, involucra a 3 presbíteros (uno fallecido) y 2 diáconos casados; de los vivos ninguno está en el ministerio, están fuera de por vida. (Los otros) dos son competencia de la Congregación para la Doctrina de la Fe (en Roma) y quedamos a la espera de su resolución".
Estos últimos casos corresponden a los de Renato Toro y Osvaldo Salgado.
sentencias
Jaime Villegas: "A finales de diciembre del año 2013, a raíz de una interrogación en investigación civil, en un caso no resuelto de un sacerdote asesinado, se hacen públicas sus prácticas homosexuales y se hace sospechar de 8 sacerdotes homosexuales que aparecerían mencionados en la investigación. En enero de 2014 el promotor de justicia expone por escrito la gravedad de la situación. Se instruye investigación, se realiza un proceso y se concluye que es culpable de escándalo y conductas impropias. Actualmente, está impedido del ejercicio público del ministerio, reside en su casa particular y es apoyado por la diócesis en sus necesidades".
Juan Alberto Arroyo: "Fue denunciado por alumnas del colegio donde ejercía como capellán, en marzo de 2012, por ver pornografía homosexual en dependencias del colegio. Se realizó una investigación y Proceso Canónico. Dentro del proceso se verificó la existencia de delitos contra el sexto mandamiento y abuso sexual de menores. Fue sancionado con la pena expiatoria perpetua de dimisión del estado clerical, por decreto 30/2014, del 20 de mayo del 2014. Actualmente reside en su domicilio particular en Chillán".
Jorge Baeza: "Involucrado en escándalos públicos, por relaciones afectivas con jovencitas menores de edad y mujeres adultas. Por decreto 05/96, del 27 de marzo de 1996, del obispo de Chillán (Mons. Alberto Jara Franzoy), fue suspendido del ejercicio del ministerio sacerdotal. El Obispado de Chillán hizo pública la situación con una declaración en un diario de la ciudad, comunicando la resolución y la no continuidad del ejercicio del ministerio del presbítero. Abandonó el ejercicio del ministerio sacerdotal, pero no pidió dispensa o dimisión. No hubo proceso canónico.
En el año 2008 fue denunciado a la justicia civil por estupro. Reconoció los hechos, ya prescritos. Las denunciantes hicieron llegar la información al Obispado y el contenido de las declaraciones. Actualmente, el aludido mantiene vínculo civil, tiene hijos. Se desconoce su domicilio".
Jorge Navarrete: "Fue denunciado en mayo del 2011 por abusos a menores de edad. Se inició un proceso canónico, decreto 15/2011, del 15 de mayo 2011. Fue encontrado culpable y la decisión de la Santa Sede fue emitida el 24 Julio 2012, con sanciones que fueron comunicadas y cumplidas. Falleció el 12 de octubre de 2012".
Renato Toro: "Denunciado antes del año 2000 por abusos sexuales a menores, se realizó juicio en la Diócesis de Chillán, juicio que fue anulado por la Congregación de la Doctrina de la Fe, la cual instruyó un nuevo proceso llevado a cabo por la misma Congregación. Fue declarado culpable del delitum contra sextum cum minore, por el Tribunal de la Congregación para la Doctrina de la Fe, por sentencia del 19 de enero 2012, con sanciones penales por tres años, las cuales ya están cumplidas".
Asamblea laical
Ante un salón lleno en el Liceo Politécnico Arturo Pacheco Altamirano de Chillán Viejo, y justo en el día de la Asunción de la Virgen, Jaime Concha, denunciante de los Hermanos Maristas, relató su cruda experiencia de abuso sistemático como alumno del Colegio Alonso de Ercilla a manos de 7 clérigos, entre ellos acusa a Cristian Pretch, ex jefe de la Vicaría de la Solidaridad.
Concha fue enfático en señalar que el proceso que inició hace un año y medio, cuando decidió destapar lo que sufrió hace cuarenta años, no ha sido fácil e incluso ha sido amedrentado por miembros de la iglesia que le han exigido que guarde silencio.
Pero no lo hizo y hoy, a través de su experiencia como sobreviviente y médico, da cuenta de que denunciar sí le sirvió para iniciar un proceso de recuperación y sanación. Es por eso que en la actividad de ayer organizada por la Red Laical de Chillán invitó a la comunidad chillaneja a denunciar, a alzar la voz.
De pasó informó que "le he entregado información a los asesores del fiscal Arias de lo que está ocurriendo en la Diócesis de Chillán. Por ejemplo, lo de Salgado y Pellegrin".
Todo esto, al día siguiente de que el Obispado chillanejo informara que el vicario general asistió a la fiscalía para obtener antecedentes de la denuncia contra Pellegrin, información que le fue negada "dado que se había decretado el secreto de la investigación por un plazo de 40 días".