Muere Charles Aznavour: la canción francesa se queda sin su gran embajador
MÚSICA. Sedujo con su versátil voz y su presencia en el escenario. Era "profundamente francés", dijo el Mandatario galo.
La voz de quien llevó la canción francesa a todos los rincones del mundo, Charles Aznavour, se apagó ayer. Pero sólo después de haber aprovechado cada minuto sobre el escenario. Tenía 94 años y cantó hasta el final en conciertos con entradas agotadas.
Pese a que el éxito le llegó tardíamente, recién a los 36 años, lo acompañó hasta el final de sus días. De hecho, Aznavour recién había regresado a Francia después de una gira por Japón y se encontraba recuperando fuerzas para lanzarse a otra serie de conciertos, que eran el oxígeno que lo mantenía con vida, según confesó en sus últimas entrevistas.
De hecho, en 2013, el artista sugirió que iba a cantar hasta los 100 años. Y casi lo logra.
A pesar de que se fracturó un brazo el pasado mayo, Bruselas iba a ser su próxima cita con el público, el 26 de octubre, antes de volver a París a comenzar una breve gira por Francia.
La estrella mundial de la "chanson" francesa se despidió de su público recién después de haber escrito más de mil canciones, según sus propios cálculos, incluyendo el clásico "La Boheme". A lo largo de más de 70 años de carrera, quien nació bajo el nombre de Shahnourh Varinag Aznavourián Baghdassarian, vendió más de 180 millones de discos y participó en más de 60 películas.
Comparado frecuentemente con Frank Sinatra, Aznavour comenzó su carrera como compositor para la cantante francesa Edith Piaf, quien lo apadrinó. Al igual que ella, su fama se extendió fuera de Francia: Aznavour fue nombrado artista del siglo en una encuesta en línea por CNN y la revista Time en 1999.
Y aunque con su voz ronca interpretó sus canciones en varios idiomas, se resistió a autodenominarse un cantante. "Soy un compositor que a veces interpreta sus propias canciones", acostumbraba decir.
Una vida en la música
Aznavour nació en París el 22 de mayo de 1924. Sus padres eran armenios que huyeron a Francia en la década de 1920 y abrieron un restorán. Su padre era cantante e hijo del cocinero del zar Nicolás II de Rusia y su madre, actriz. Ambos lo expusieron a las artes desde temprana edad y a los nueve años actuó en su primera obra de teatro.
Aznavour cortó el sufijo armenio de su apellido para su nombre artístico. Decidió dedicarse a la música, pero continuó actuando en películas a lo largo de su carrera. Sus créditos cinematográficos incluyen "Disparen sobre el pianista" (1960), de Francois Truffaut; "El tambor de hojalata" (1979), de Volker Schloendorff, y "Ararat" (2002) de Atom Egoyan.
Se convirtió en pianista y estuvo en Nueva York de gira tras la Segunda Guerra Mundial con Piaf, quien lo animó a interpretar sus propias canciones. Ahí cantó en el escenario con Liza Minnelli, quien entonces era una adolescente.
Cantó en seis lenguas diferentes y su balada en inglés, "She," encabezó las listas británicas durante cuatro semanas en 1974, canción que Elvis Costello grabó en 1999 para la película "Notting Hill".
Además de "She", sus éxitos incluyeron "La Boheme", "For me, Formidable", "Com'è Triste Venezia" y "La Mamma". Aunque otras canciones fueron famosas por su notoriedad, como "Apres l'Amour"(Después del amor), prohibida en la radio francesa en 1965 por ser vista como un agravio a la moral pública.
Aznavour supo combinar la canción romántica con un toque de responsabilidad. Estuvo comprometido con el pueblo armenio, al que defendió a lo largo de su vida.
El galán improbable
Aunque no era guapo ni alto y su voz no era un prodigio, su presencia sobre el escenario lo convirtió en un señor de la música. "¿Cuáles eran mis defectos? Mi voz, mi estatura, mis gestos, mi falta de cultura y educación, mi honestidad o mi falta de personalidad", escribió el artista en su autobiografía.
Y aunque varios le dijeron que no tenía lo necesario para triunfar, afortunadamente hizo oídos sordos. "¿Mi voz? No la puedo cambiar. Los profesores a los que consulté coincidieron todos en que no debía cantar, pero aun así seguía cantando hasta que me dolía la garganta", dijo en ese libro.
Despedida de un grande
La muerte de Aznavour, como su música, tocó a personalidades de todo el mundo, que manifestaron su pesar por la partida de un grande.
Acompañó "en las alegrías y las penas a tres generaciones", escribió en Twitter el Presidente francés, Emannuel Macron. "Sus obras maestras, su voz y su carisma lo sobrevivirán durante mucho tiempo", añadió el Mandatario, quien describió a Aznavour como "profundamente francés, unido visceralmente a sus raíces armenias y celebrado en todo el mundo".
"Se nos acaba de ir un grande entre los grandes, Charles Aznavour. Tuve el gran honor de grabar con él en París su histórica 'Boheme' para mi disco '50 Años después'. Jamás te olvidaré maestro", escribió el cantante español, Raphael, en sus redes sociales. "Descansa en paz mi queridísimo amigo", publicó, en tanto, el también artista español Julio Iglesias.
Casado en tres ocasiones, Aznavour tuvo seis hijos.
años tenía 94
el cantante y compositor francés, que había regresado a su país tras dar un show en Japón. 1.300