Narciso Tondreau Valin, un pilar de la educación y la cultura chillaneja
POLIMATA. Abogado, poeta, músico, columnista de los más importantes diarios de la capital, Intendente del Maule y Cautín, Rector del Liceo de Chillán por veintiocho años, profesor del Seminario, animó la vida cultural chillaneja por treinta y seis años, dejando una profunda huella en sus alumnos y en la ciudad.
Narciso Tondreau Valin (La Serena 1861- Santiago 1949), abogado, era hijo de Luis Fernando Tondreau y Adela Valin, inmigrantes francocanadienses provenientes del Cantón de Quebec, de San Jacinto en Canadá. Sus hermanos fueron Luis Napoleón, Emelina, Armando y Darío Emiliano Tondreau Valin.
Realizó sus estudios en Ovalle y en el Seminario de La Serena. En 1881 se trasladó a Santiago para continuar estudios superiores. Estudió Leyes en la Universidad de Chile, titulándose de abogado en 1886. Posteriormente, fue Intendente de Linares entre 1892 y 1894 y de Cautín entre 1894 y 1897. Luego se hizo cargo del rectorado del Liceo de Chillán en octubre de 1897, cargo que desempeñó hasta 1925. También realizó clases en el Seminario de la ciudad.
Se casó en el año 1894 con Delfina del Solar Pinochet, oriunda de Cauquenes. El matrimonio Tondreau del Solar tuvo seis hijos: Jorge, Guillermo, Luis, Sara (quien falleció de meses), María Eugenia y Carlos. En 1928 falleció su esposa, en Chillán. Viudo residió hasta 1933 en la ciudad, luego se trasladó a Viña del Mar y Santiago para vivir con sus hijos. Falleció en Santiago, el 16 de diciembre de 1949, a los 88 años de edad. Sus restos descansan en el Cementerio General de Santiago.
El poeta y escritor
Tondreau desde muy joven se inclinó por las letras. Publicó la Corona Fúnebre de Vicuña Mackenna junto a Julio Bañados Espinosa, en 1886. Publicó su libro de poesía "Penumbras", en 1887. Trabajó en los diarios santiaguinos: La Época, La Libertad Electoral y El Ferrocarril, entre otros. En Santiago perteneció a un "Ateneo" y se relacionó con lo más selecto de la intelectualidad santiaguina. Entre ellos podemos citar a Pedro Balmaceda Toro (hijo del presidente de la República José M. Balmaceda), Rubén Darío, Diego Barros Arana, Luis Orrego Luco, Jorge y Roberto Huneeus, Eduardo de la Barra, José Francisco Vergara, Miguel Luis Amunátegui, entre otros. Su amistad con el líder del modernismo, el poeta nicaragüense Rubén Darío, se desarrolló entre 1887 y 1889.
También escribió un libro de poesía, titulado "Asonantes", el cual nunca publicó y cuyo prólogo lo escribió y publicó Rubén Darío. Tondreau publicó también una Reseña histórica del Liceo de Chillán, en Los Anales de la Universidad de Chile en 1918. Sus artículos, traducciones de los clásicos y su poesía se encuentran dispersos en los diarios y revistas nacionales.
Actor cultural y social de Chillán
Narciso Tondreau, fue socio fundador de la Sociedad Santa Cecilia en 1918. En esta institución, fue directivo y músico ejecutante de piano. En 1922, al cumplir 25 años de rector, hubo en Chillán grandes celebraciones para festejar a Tondreau y sus llamadas "bodas de plata" en ese cargo. En ese mismo año, creó el "Círculo de Arte" en el Liceo, agrupación cuyo objetivo era dar conferencias, organizar exposiciones literarias y publicar libros. Allí participaron Marta Brunet, Tomás Lago, Armando Lira, Gumercindo Oyarzo, entre otros.
Tondreau logró ubicar al establecimiento del Liceo de Chillán, entre los primeros de segunda enseñanza en Chile. En esta misión, entregó lo mejor de su talento educacional, consagrándose al Liceo que hoy lleva su nombre, formando generaciones que descollaron en el país y en el extranjero en todos los ámbitos del quehacer profesional, tales como: Santiago y Eugenio Labarca Labarca, Luis Alamos, Marcial Mora Miranda, Armando Lira Sepúlveda, Walterio Millar Castillo, Tomás Lago Pinto, Alfonso Lagos Villar, José Chávez Dailhe, Eulogio Fuentes, Fernando Santiván, Otto Schäfer, Tito Davison, entre tantos otros.
En sus treinta y seis años de residencia en la ciudad de Chillán, participó activamente de las actividades culturales, aportando conferencias, exposiciones, discursos en variadas ocasiones, como por ejemplo, en el primer viaje profesional de Claudio Arrau a Chillán. No había actividad cultural a comienzos del siglo XX que no contara con la presencia destacada de la personalidad de Tondreau. Él fue un pilar de la cultura, con su prestigio intelectual.
Cultivó amistad con los intendentes Ismael Martín Mieres y Vicente Méndez Urrejola. De este último, cabe recordar que Tondreau fue el anfitrión en el comentado "Banquete a la Francesa", que se ofreció en 1909 en honor al Intendente, en el gimnasio del Liceo, siendo uno de los principales oradores aquella noche, con frases como: "…Bajo este techo hospitalario del Liceo se oyen en vez de las voces infantiles, siempre gratas a nuestros corazones, los aplausos tributados al mérito ejemplar y a las cívicas virtudes de nuestro Intendente".
"…Si el puesto que desempeño diera a mis palabras alguna autoridad, pediría a los antiguos alumnos de este Liceo, de los cuales muchos peinan respetables canas, y a los que han sido mis discípulos, que, uniendo sus esfuerzos, borrando las huellas de odiosas divisiones, arrancando las espinas que erizan los senderos de la vida, ayudaran en la labor patriótica de nuestro mandatario".
Además, Narciso Tondreau fue benefactor de la Banda del Regimiento de Chillán y del Liceo. En noviembre de 1935 fue invitado a participar de las fiestas del Centenario de Chillán y tal vez éste fue su último acto público en que participó en la ciudad.
Libro de Oro del Liceo
El Liceo Narciso Tondreau cuenta con un Álbum de pergaminos, creado para el Centenario de Chillán, en el año 1935. Fue el pintor Armando Lira quien le solicita un prólogo al ex rector, quien desde Viña del Mar escribe el valioso documento en que concluye diciendo: "Ligado a Chillán por treinta y seis años, y a su liceo por veintiocho años de rectorado y profesorado, había motivo para comprender cuán hondamente han penetrado las raíces de mis afectos. Ni el tiempo, ni la distancia serán capaces de cortar esos afectos ni esas raíces".
Esperamos que el año 2019, (a 70 años de su muerte), la Ilustre Municipalidad de Chillán pueda concretar el traslado de sus restos al Parque de los Artistas. De esta forma, en Chillán se le rendiría homenaje en forma permanente, a través del Liceo que lleva su nombre y de la Ilustre Municipalidad, como parte de la constelación de estrellas de ese universo de hombres, nacidos y adoptados, destacadas personalidades públicas, que tuvo en su seno la ciudad.