Cecilia Morel y 70 años del voto femenino: "Basta de límites y discriminaciones"
DERECHO. Ayer se cumplieron siete décadas de ley que lo estableció de forma universal.
Setenta años se cumplieron ayer desde que el Presidente Gabriel González Videla firmara la ley que entregó a las chilenas la posibilidad de hacer uso universal de su ciudadanía a través del voto.
La Primera Dama, Cecilia Morel, destacó el hecho en su cuenta de la red social Twitter, pero además exigió que se eliminen las discriminaciones para las mujeres.
"El 8 de enero de 1949, la historia de las chilenas cambió. Hace 70 años pasamos a ser ciudadanas, obteniendo el derecho a voto en nuestro país. Basta de límites y discriminaciones. Queremos tomar decisiones propias y desarrollar nuestros sueños y proyectos. Es nuestro derecho", escribió Morel.
Ministra pla
También se refirió al tema en redes sociales la ministra de la Mujer y la Equidad de Género, Isabel Pla: "Es una fecha para que todas las generaciones de chilenas conmemoremos por siempre, porque marca un antes y un después en el reconocimiento de iguales derechos y dignidad".
Al mismo tiempo, la ministra de Medio Ambiente, Carolina Schmidt, calificó el derecho cívico como "un paso clave para nuestros derechos políticos, para la democracia del país y por la lucha de tantas en la historia", según consignó Emol.
Hitos de las mujeres
Para llegar al 8 de enero de 1949, cuando González Videla firmó la ley que confirió la posibilidad de sufragar a las mujeres y les dio paso a que ocuparan relevantes cargos en política, hubo un duro trabajo.
Una de sus más férreas impulsoras fue la abogada Elena Caffarena, quien en la década de 1930 comenzó a luchar para que las mujeres pudieran sufragar. Luego, en 1934, se dio el primer evento significativo, cuando se aprobó el voto femenino para las elecciones municipales.
Al año siguiente, Inés Enríquez Frödden se convirtió en la primera intendenta del país y, en 1951, fue electa como la primera diputada de Chile (ejerció el cargo en cuatro períodos hasta 1969). La abogada se centró en proyectos de ley relacionados al área social, legisló sobre materias laborales e incluso presentó un entonces polémico proyecto de ley de divorcio, que jamás se votó.
Otra pionera fue Adriana Olguín, quien en 1952 fue nombrada ministra de Justicia en el último gabinete de González Videla. Si bien solo estuvo de julio a noviembre de ese año, bastó para ser reconocida como la primera en ejercer este puesto en el país y en Latinoamérica.