Tatiana Aular Aguirre

Un desenlace positivo tuvo para vecinos de las comunas de Bulnes, Quillón y Ránquil, el proceso de votación que realizaron los seremis integrantes de la Comisión Evaluadora Ambiental, que durante la jornada de ayer decidieron rechazar el proyecto "Extracción de Áridos en Río Itata", presentado el 13 de febrero por Maquinaria y Transporte Aninat Limitada, por cuatro votos en contra y tres a favor, cerrando así el proceso de calificación ambiental para esta empresa de extracción de material pétreo en Ñuble.

La jornada de votación de la Comisión Evaluadora Ambiental, designada desde la Intendencia regional, fue presidida por Enrique Rivas, actual gobernador de la provincia de Diguillín, pero que fungió como Intendente (s) de la región de Ñuble, debido a la ausencia de Martín Arrau.

"Al analizar el informe en su integridad, cada uno de quienes evaluamos este proyecto tenemos obligación de tomar en cuenta los principios inspiradores de la legislación ambiental, como por ejemplo el desarrollo sustentable preventivo y precautorio, puntos que se argumentaron en esta votación", indicó Rivas.

Además, precisó que "las decisiones pasan por un análisis realizado a raíz de las observaciones y recomendaciones que se recogieron por cada uno de los organismos atingentes y competentes del proyecto".

A las manifestaciones en contra de la extracción de áridos en el río Itata, sustentadas en conclusiones y recomendaciones técnicas, se sumó Cristóbal Jardúa, seremi de Obras Públicas, quien de manera directa manifestó que "como representante del MOP en Ñuble mi voto fue en contra de la aprobación de este permiso, ya que nuestra Dirección de Obras Hidráulicas (DOH) y Dirección de Vialidad (DDV) realizaron observaciones que no lograron ser subsanadas, por lo tanto no correspondía dar el visto bueno a un proyecto que no cumplía con los estándares exigidos".

Hizo hincapié en la premisa que "trabajamos a diario por hacer crecer nuestra región de Ñuble. No estamos en contra del desarrollo, todo lo contrario, creemos que el progreso va de la mano con la construcción y ejecución de diferentes proyectos, pero éstos no pueden ser a costa de la calidad de vida de los vecinos ni menos en contra de la normativa que regula estas instancias", apuntó.

Mientras que Manuel Cofré, seremi de Energía en Ñuble, se manifestó desde la experiencia de quien conoce el mundo de los áridos y votó en contra del proyecto, "por dos razones, no satisface el tema de reposición de áridos, además de tener una cuenca sin protección", enfatizó.

Esta postura fue seguida por Karla Rivera, seremi (S) Desarrollo Social y Familia, quien tomó los argumentos considerados desde las direcciones del Ministerio de Obras Públicas, para votar en contra de este proyecto. Con la voluntad manifestada por Rivera, se sumaron las cuatro decisiones de los seremis que sellaron el destino de la iniciativa de la firma Maquinaria y Transporte Aninat Limitada.

Desde la postura contraria, Roger Cisterna, seremi de Economía, Fomento y Turismo en Ñuble, votó de manera favorable en pro de la chancadora en el río Itata, pues manifestó que "si bien los áridos son necesarios para el desarrollo del país, de la región, también es importante oír a los vecinos, porque finalmente esto es una muestra de la Participación Ciudadana y ojalá que todos los proyectos se trabajarán así, de manera conjunta entre gobierno y comunidad, avanzaríamos mucho más rápido".

Otro voto que se sumó a los tres que fueron favorables a la extracción de áridos en el predio ubicado a 12 kilómetros del centro urbano de la comuna de Quillón, fue el de Any Rivero, directora del Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) del Biobío, quien justificó su decisión en el debido cumplimiento por parte del titular de todos los permisos reglamentarios para realizar faenas de extracción de material pétreo en la zona indicada.

Aunque Rivero destacó, de acuerdo a la presentación detallada, a cargo de la analista del SEA, Karen Rojas, que el proyecto contaba con la conformidad de las Seremías de Salud, SAG, Conaf y Subsecretaría de Pesca, aunque esta última los había condicionado a un plan de seguimiento semestral de la fauna del lugar.

El último voto a favor lo asumió Patricio Caamaño, seremi de Medio Ambiente, quien delimitó ante los asistentes las funciones que cumple su cartera, "porque muchas veces se confunden las competencias que tiene cada organismo o unidad, pero quiero considerar que apruebo el proyecto con el pam (permiso) 119, que se refiere a la renovación anual de áridos".

Cabe destacar que los representantes de las Seremis de Agricultura, Minería y Salud no estaban presentes, pero esta última consignó un informe con las recomendaciones con respecto a las emisiones acústicas en la zona que se tenía prevista para la instalación de la planta de extracción de áridos.

Un logro no esperado

Esta decisión del Gobierno Regional fue interpretada por Ricardo Torres, presidente del Comité Medio Ambiental del Valle del Itata, "como una señal importantísima que el Gobierno y sus representantes están tomando en serio el tema medio ambiental, están escuchando la opinión de la comunidad y de la gente", afirmó

Reconoció que este es un trabajo de meses, de casi un año, "pero la alegría de nosotros es enorme, se nos vino mucha veces la lucha cuesta arriba, pero hemos logrado que se rechace este proyecto que va a ser emblemático".

Gracias a este precedente escrito en Ñuble, agregó, "muchos ríos de Chile van a poder ser preservados, porque este tipo de proyectos no están siendo aprobados, si no están bien fundamentados".

Torres no da por segura la victoria plena, "porque -dijo- los mismos empresarios podrían registrar el proyecto con un nuevo run y seguir insistiendo en el permiso".

Para Asmerí Landero, coordinadora del Comité Medio Ambiental del Valle del Itata, esta decisión gubernamental era lejana. "Estamos súper satisfechos por la comunidad, este es un logro por el que estamos muy preocupados, porque pensábamos que no lo íbamos a obtener, ya que tenemos seremis que están con las empresas y no con la comunidad, como el de Medio Ambiente y los argumentos que expuso para votar a favor de la empresa. No consideró los argumentos de la comunidad a través de las ideas complementarias de la Participación Ciudadana".

Enfatizó que "seguiremos dando la pelea, no solamente en este caso, sino en todos los que aspiren a intervenir en el río", dijo.

Desde la comuna de Ránquil acudió Felipe Rebolledo, concejal, quien recordó que este proyecto, en su momento, fue rechazado por las autoridades de la región del Biobío y criticó que justo ahora "se le estuviera dando luz verde, cuando el río Itata ya ha sido fuertemente intervenido".

Al mismo tiempo expresó: "desde el principio de este proyecto manifestamos nuestra clara oposición, el río Itata es un recurso natural que no sólo provee del entorno paisajístico, sino que también es una columna de desarrollo de la comuna de Ránquil". acuñó.

"Es muy importante como las autoridades están siendo responsables con el tema medioambiental. Ha sido un trabajo largo"

Ricardo Torres, Comité Medioambiental del Itata

"Finalmente esto es una muestra de la Participación Ciudadana y ojalá que todos los proyectos se trabajaran así".

Roger Cisterna, Seremi de Economía

"Este es un logro que pensábamos que no íbamos a obtener, porque hay seremis que están con las empresas".

Asmeri Landero, Junta de Vigilancia del Río Itata

"No correspondía dar el visto bueno a un proyecto que no cumplía con los estándares exigidos".

Cristóbal Jardua, Seremi de MOP

7 Seremis participaron de un total de diez carteras que integraron la Comisión Evaluadora Ambiental de Ñuble. Entre los ausentes estuvieron los titulares de Salud, Minería y Agricultura.

4 votos fueron la cantidad de decisiones suficientes para que los representantes del Gobierno Regional no aprobaran el permiso de operaciones de Maquinaria y Transporte Aninat Limitada.