Madres envuelven regalos en Navidad para cubrir necesidad
ECONOMÍA. La mayoría de las personas que trabajan preparando regalos son mujeres, que laboran en compañía de hijos o nietos.
La Navidad es una fecha que está en el calendario gregoriano que se utiliza en Chile y en muchos países del mundo, ante esta máxima no escapa Chillán, ya que es el cumpleaños del Niño Jesús, éste es celebrado por muchos, apartados por otros y algunas veces pasa hasta el cajón de los malos días que no se quiere volver a repetir.
En este grupo multi participativo, están las familias que año tras año pasan la víspera de la Navidad, como pascueros o ayudantes del viejito de la Navidad, que dedican este día a intercambiar su fuerza laboral por unos pesos, que luego le servirán para cubrir algunos gastos de la cotidianidad, pero que más allá de la retribución económica es un espacio donde se pasa el tiempo, ante un día marcado por las compras y los regalos materiales.
Este es el escenario que distinguen el callejón del Paseo Arauco, donde Yohana Castillo, por recomendación de su madre, decidió junto a su hermana, dos hijos y un sobrino, vender este año insumos para envolver regalos o practicar este oficio, desde el pasado 17 de diciembre hasta el próximo 31 de diciembre.
"Nosotras (ella y su hermana) trabajamos como recolectoras de arándanos, de temporera, pero pedimos estos días de permiso para hacer la pega aquí, mi mamá nos recomendó que sacáramos el permiso en la municipalidad para trabajar, legal este año y es la primera vez que lo hacemos", esto es lo primero que relató Castillo, sentada detrás de un mesón lleno de bolsas para regalo, tarjetas, scotch, cintas para regalos, tarjetas y papel navideño que está dispuesto para envolver regalos, y que el costo de este material más la mano de obra será determinado a consideración del usuario.
Ella trabajará junto a cuatro familiares, más su hermana, su hija de 5 años, su hijo de 9 y su sobrino de 8, "nosotras los traemos aquí porque no tenemos con quien dejarlos, además esto le sirve para que le agarren amor al estudio, se preparen, para que no terminen de adultos como una de colectora o envolviendo regalo, sino que sea ellos quienes compren los regalos para que alguien se lo envuelva".
En cuanto a la tarifa de cobro por el servicio de envoltura de regalo, comentó "cada sobre vale $300, si las personas quieren dar otra monedita, bienvenido es todo. De resto es lo que la gente nos quiera cooperar, de repente hay gente que te da $200, pero hay otras que aparecen y te dan hasta $500, así que hay que estar a la espera".
Esta jornada que inician a las nueve de la mañana va acompañada de los niños que asisten a la escuela hasta el mediodía "ya que somos mamás solteras y no nos queda de otra sino que arriar con los chiquillos".
Si bien en las principales calles comerciales de Chillán, existen en cada cuadra un promedio de 6 personas envolviendo regalos, muchas prestan sus servicios acompañados de familiares de sangre o políticos, como es el caso de Jackeline Guzmán, quien labora en compañía de su nuera y su hijo de 21 años con discapacidad, esta mujer siempre ha trabajado como comerciante, "pero este es el primer año que vendo cosas para envolver regalos, no cobramos por envolver lo dejamos a la consciencia de las personas".
Con mucha nostalgia, manifestó no celebrar la Navidad "porque para mí es sólo un día más de trabajo, yo no tengo mucho que celebrar, así que lo paso mejor aquí".
Al ser consultada sobre los motivos de su desapego a las festividades decembrinas, alegó que trabajará hasta el 31 de diciembre "es que pasé una Navidad muy triste, pero con esto me alegro".
Pide salud y vida como regalo de Navidad, "lo demás yo lo resuelvo".
A este grupo de mujeres se unió Maya Gutiérrez, quien desde el 2015 aprovecha "la mejor época del año, para tener unos pesos adicionales, por ejemplo el año pasado logré reunir $200 mil pesos".
Gutiérrez, quien es costurera y maestra cocinera, es acompañada por su nieta de 8 años "porque qué más hago, no a puedo dejarla con mi mamá que tiene 85, eso es mucha carga para ella, así que le toca venirse conmigo para acá".
Espera para la Noche Buena compartir unas galletas de navidad o un pan de pascua con mi hijo, mi nieta y mi mamá, "los años pasados me he organizado y me ha dado tiempo de ir a buscar unas cositas, y celebrar así sean con poco la Navidad".
Pide como regalo "que en Chile haya paz, que todos podamos vivir sin tantas diferencias. Sé que sólo e un deseo, es muy difícil que la gente cambie, pero ese es mi deseo".
Una Navidad familiar es la que espera celebrar Fernanda Jaramillo, quien hace un año llegó a Chillán, y por primera vez vende artículos para regalos navideños, ella lo hace junto su hija de 7 años.
"Sé que estaré aquí todo el 24 , con mi hija, pero aunque trabajo siempre para que no le falte nada, ella viniendo aquí va a saber que el dinero no cae del cielo, que hay que valorar cada cosa que se le puede dar".
Fernanda, de tan sólo 21 años, espera llegar a tiempo a su casa, para preparar una cena de navidad tradicional. "Todos los años hacemos pavo o ganso asado, mucha ensalada, papas duquesas, cola de mono, bebida y sirvo la cena como a las 10:00 de la noche, pero siempre mantenemos la tradición".
Su mesa de atención tiene cintas, tarjetas, cintillos con motivos navideños y una caja donde espera recibir a cambio de su trabajo, los montos con los cuales la gente valore su trabajo.
Las historias de vida son tan variopinta como los motivos de envoltura que tiene Maya Gutiérrez, quien por tercer año consecutivo trabaja junto a su mamá y a su hijo de 17 años, vendiendo papeles, cintas, tarjetas y cualquier artilugio que personalice cada obsequio.
"Yo si cobro, porque el primer año lo dejé a la consciencia de la gente y no gané, mucho, el año pasado cobré y me fue bien y este año también espero lograr que me vaya bien", contó Maya, quien fuera de la temporada navideña, trabaja como recolectora de arándanos , cocinera o haciendo aseo domiciliario.
Ella ve el trabajo como una valor heredado de su madre "gracias a Dios yo tuve una madre muy guerrera, que echo pa´ lante. A mí nunca me faltó nada y a mis hijos tampoco".
Resaltó que ella le da regalos a sus hijos de acuerdo a su realidad económica, "no puedo salir a comprarle el último Nintendo, porque después cuando yo no les pueda dar algo de los que ellos quieran, ¿van a salir a robar para tener lo que quieren?
Comprende su responsabilidad en la educación de los su hijos " por esto prefiero que estén aquí conmigo, trabajando, que aprendan a ganarse la vida honradamente y esto lo seguiremos haciendo, porque siempre nos da ganancia".
Gutiérrez, forma parte del porcentaje de habitantes de Chillán que no tienen un trabajo formal, pero ha trabajado y ahorrado "para que el año 2020 me aprueben el crédito de mi vivienda social, este es mi deseo para Navidad".
Blanca Pinto Valdés, desde hace seis años ofrece sus servicios de envolver regalos en Navidad, en el Paseo Arauco, cada vez que se acercan los días de celebración le dice a sus hijo "para Navidad no hagan nada, porque me pongo a pesar en el resto de la gente que no tiene para hacerse nada".
Manifestó que le gusta el trabajo que esa en diciembre, porque el resto del año se dedicada a su labor de maestra cocinera "me apoya mi familia, mis hijos, que me ayudan a preparar lo sobres, los lazos en casas, y yo me los traigo listos".
Comentó que trabajará sólo hasta el 24, hasta las nueve de la noche, a pesar de las circunstancias sociales que se han vivido en el país, espera trabajar en paz, " con lo que se logré hacer, todo sirve, monedita tras monedita, para ayudar a niños que no tiene, yo eso lo voy a hacer".
Reconoció, que si tiene que ayudar a una familia para que logré tener su cena de navidad lo hará "porque hoy en día no todos estamos bien. Deseo que a todos nos vayan bien, y que nos aumente los salarios", sentenció quien hoy vivirá la Navidad.
"Nosotras los traemos aquí porque no tenemos con quien dejarlos, esto le sirve para que le agarren amor al estudio".
Yohana Castillo, Trabajadora Informal
"Gracias a Dios yo tuve una madre muy guerrera, que echo pa´ lante. A mí nunca me faltó nada y a mis hijos tampoco"
Maya Gutiérrez, Trabajadora Informal
"No puedo dejarla con mi mamá que tiene 85, eso es mucha carga para ella, así que le toca venirse conmigo para acá".
Romina Contreras, Trabajadora Informal
Municipalidad entregó 98 permisos
Cada año la Municipalidad de Chillán otorga un cierto número de permisos, para que de manera legal y ordenada laboren las personas, que ven en la temporada de Navidad, una oportunidad para ingresos económicos adicionales. Este año se otorgaron 98 de estos documentos, uno de ellos fue el que recibió el esposo de Fernanda Jaramilo, "con esto nosotros podemos trabajar tranquilos, durante estos días, contamos con el permiso para hacer nuestro trabajo en paz y no tenemos que andar preocupados por que nos quiten nuestras especies de trabajo. Además que es un proceso sencillo que se debe hacer antes de empezar y por lo que debemos pagar un monto, que no es tan alto".
"Ella viniendo aquí va a saber que el dinero no cae del cielo, que hay que valorar cada cosa que se le puede dar".
Fernanda Jaramillo, Trabajadora Informal
$200 mil logra reunir en una semana una familia que trabaja envolviendo regalos para la Navidad, el capital a invertir no es cuantioso y lo adquieren en la propia comuna de Chillán.
$300 sobre es el costo promedio de un sobre de regalo, mientras muchos apelan a la donación en tiempos de pascua, otros cobran hasta $500 por cada regalo listo para entregar.