La Plaza de Armas fue un lugar para disfrutar los regalos de Navidad
FERIADO. Las tradiciones se mantienen en Chillán, y una de ellas es salir el 25 de diciembre a disfrutar de los nuevos juguetes que solicitaron los niños en sus cartas.
El Día de Navidad es tiempo para compartir en familia, con los amigos, descansar de la jornada laboral o estrenar los juguetes que dejó el Viejito Pascuero o el Niño Jesús, al pie del árbol o nacimiento, según sea la procedencia y la Plaza de Armas es un escenario de referencia regional para que los niños disfruten de los regalos.
Martina Venegas fue una de las niñas chillanejas que llegó acompañada por sus padres a la Plaza de Armas este 25 de diciembre, combinada de pie a cabeza bajo tonalidades rosas, lució su mochila tornasoleada que destellaba bajo el sol de la tarde de Navidad.
"La pasé con mi familia, aquí en Chillán, el Viejito Pascuero me trajo una mochila y pinturas, aunque no me pinto tanto, realmente".
Mientras que en las áreas verdes del punto central de la cuadrícula de la ciudad, estaba Jorge Fonseca, de 8 años, quien en pocas horas había realizado junto a su familia un periplo entre las regiones del Biobío y Ñuble.
Explicó Jorge "soy de Yumbel pero pasamos la Navidad en San Pedro de la Paz y llegamos hoy a Chillán y anoche me regalaron una pelota para jugar", esto lo contó en tanto que sus padres y hermana paseaba por los laterales de la plaza.
Otra niña que se hizo presente fue Fernanda Boza, de 8 años y quien cursará el 3er grado en el 2020, ella descendió de la camioneta de su padre, lista con su regalo que venía acompañado de los accesorios de seguridad.
"A mí, me trajeron unos patines de luna, porque yo sé patinar, ayer me acosté tarde y hoy me levanté tarde, a las 12 del día".
Una de las niñas más chicas que acudieron al lugar de jugo y distracción fue Trinidad Cubillos, quien saltaba de la grama a los adoquines y viceversa, mientras que su madre y hermana disfrutaban de la brisa de la tarde.
Martina con una gran sonrisa compartió que "mis regalos están bonitos, me regalaron una cuna y un mueble, anoche comimos, salimos a dar una vuelta y hoy de nuevo salimos a pasear".
Los ayudantes
Mientras que algunos niños jugaban en la Plaza de Armas, Jorge Sepúlveda, caminaba por la calle Maipón en busca de algún lugar abierto para adquirir unas baterías y poner encender el carro a control remoto que en la mañana de este miércoles había recibido su hijo de 4 años.
Con cara de preocupación y compromiso, Sepúlveda manifestó "con tantas cosas que uno tiene que hacer estos días se le olvidan las pequeñas cosas y entre ellas, las baterías que llevan los juguetes. Lo que me da dolor es que sin baterías el juguete de mi hijo no anda y él espera eso con ilusión".
Al igual que Sepúlveda, amaneció María Fernanda Jiménez, pero intentando buscar un destornillador para ajustar la casa de Barbies de tres piso que le llegó a su hija de 8 años
"Yo siempre pensé que esos juguetes venían listos para armar, y más ahora que todo es ensamblando, que una pieza se encaja con la otra y ya, pero esta casa no, necesita que se le ajusten unos tornillos para que la casa no se desarme. No queda sino esperar hasta que mañana abra todo", mientras tanto irá de nuevo a su casa, pero sin respuesta para su hija.
Los casos post regalos se repiten año tras año y en este 2019 no quedó fuera Joel Paiva, quien deberá comprar un nuevo televisor porque el que tiene actualmente, el puerto de conexión de audio y video no es compatible con la consola de X-Box One 1. "A uno le pasa cada cosa en Navidad con estos muchachos, pero eso se solucionará en los próximos días, mientras esperaremos para estrenar el nuevo equipo de juego, no sólo mi hijo, sino yo", expresó con nostalgia Paiva.
Al caer la tarde en Chillán las calles, los parques y las plazas se fueron llenando de niños cargados de energías concentrada, quienes no paraban de jugar en bicicletas, patines, mono patín, mientras que las más conservadoras jugaban con muñecas o con su padres a la peluquería, por lo que Willian Gómez, respondió, "esto lo disfruto, porque forma parte de ser padre de una niña como Sofía, yo soy siempre su primer modelo, a mí me peina, me maquilla y qué hago".