Comodoro Arturo Merino Benítez, el precursor de la aviación chilena
NATALICIO. Hijo ilustre de la ciudad de Chillán y prócer de la aeronáutica, cimentó las bases de las actuales políticas del sector. Además de crear la actual Fuerza Aérea de Chile, unió al país a través de los "caminos del aire".
Nuestro país y el sector aeronáutico a nivel mundial destacan la perseverancia del Comodoro Arturo Merino Benítez, como impulsor del desarrollo de la aeronáutica nacional, tanto a nivel militar, civil, comercial y deportiva.
Desde muy temprana edad y tras egresar de la Escuela Militar, vislumbró que las rutas aéreas permitirían el desarrollo de Chile, lo que concretó al unir el territorio nacional, desde Arica a Punta Arenas, logrando vencer de manera abnegada las dificultades geográficas propias de nuestro territorio y que hasta ese momento hacían imposible conectar al país, impulsando así la conectividad y descentralización.
Tras años de trabajo, sus esfuerzos lograron materializarse el 21 de marzo de 1930, cuando el Presidente Carlos Ibáñez del Campo fundó la Fuerza Aérea Nacional (FAN), institución que en 1937 pasó a denominarse Fuerza Aérea de Chile (FACh).
Sin embargo, antes de la creación de esta rama independiente de la Defensa Nacional, el Comodoro Merino fundó la primera aerolínea chilena, la Línea Aeropostal Santiago - Arica, antecesora de la Línea Aérea Nacional, considerada como una de las quince aerolíneas más antiguas de mundo; creó el Club Aéreo de Chile; el Gabinete de Fotogrametría, antecesor del Servicio Aerofotogramétrico; cimentó la formación de la Dirección General de Aeronáutica Civil; y logró unir por el aire todo el sur de Chile, llegando hasta Punta Arenas.
El Comodoro Arturo Merino Benítez, en su incesante búsqueda de potenciar el desarrollo industrial del país, inauguró el 16 de octubre de 1930 la primera fábrica en Chile de aviones Curtiss Wright, para el ensamblaje de aeronaves Curtiss Falcon, asentada en los hangares de la actual Base Aérea Cerrillos.
Los logros alcanzados por este insigne aviador, motivaron al Presidente Ibáñez a nombrarlo ese mismo año como primer Subsecretario de Aviación y posteriormente Comandante en Jefe de la FAN.
El desarrollo experimentado por el país y el creciente avance de la aviación a nivel mundial llevaron al Comodoro Merino Benítez a adquirir material aéreo acorde a las necesidades de la época, además de implementar un programa de perfeccionamiento y mejoramiento de la conectividad de la red de aeródromos y aeropuertos emplazados en Arica, Antofagasta, Copiapó, Ovalle, Santiago, Puerto Montt y Punta Arenas, con el fin de unir el territorio, disminuyendo así los tiempos de viaje de pasajeros y carga.
Precursor de las primeras políticas públicas
Desde un principio el Comodoro Merino Benítez visualizó en el desarrollo del medio aéreo el progreso de Chile y de su gente, llevándolo a promover las bases de las primeras políticas públicas de aeronavegabilidad, que sustentaron años más tarde el sistema aeronáutico nacional.