El drama que se vive en las cocinerías del mercado
Décadas son las que lleva atendiendo la cocinería Mariscal Angelmó en el mercado techado de Chillán, ubicada en el local 48 del tradicional centro de abastecimiento de la comuna, y que, producto de la pandemia tuvo que apagar los fogones para resguardar la salud de quienes lo administran y los fieles clientes.
Así lo detalla Pedro Parra, uno de sus administradores, quien señaló que "el mercado en general cerró la atención de cocinerías, a excepción de uno que realiza ventas con delivery, el 27 de marzo, que fue cuando el Servicio de Salud determinó el cierre".
El locatario dijo que "al estar cerrado, se dio la oportunidad de no pagar arriendo por parte de la municipalidad, los gastos básicos de luz y gas ha estado en cero hasta el momento, y por el lado de nuestros trabajadores, nosotros mantenemos a uno solamente y solo se les está pagando las imposiciones" y agregó que para la mantención del local de alimentos "solo como gastos fijos, para mantener la cocinería, son cerca de 1 millón y medio de pesos, sin contar la mercadería, los sueldos y demás gastos asociados a un negocio como este".
Sobre alguna opción de seguir atendiendo, relató que en algún momento lo analizaron, pero que "si llegábamos a abrir teníamos que hacer mucha inversión al solo hacerlo como delivery, había que considerar los envases en que se entrega la comida y que hoy el precio está por las nubes. Además, en el mercado se ve muy poca gente que anda en busca de alimentos, la gente, sobre todo la del campo que son los principales clientes, además de los turistas que hoy no están, está acostumbrada a consumir sentados y cómodos".
"Este año ya está totalmente perdido. La tradición del mercado es comer sentado y la mayoría de las comidas no son para llevar. Ahora, se está viendo el tema del pago de la patente del segundo semestre, por lo que esperamos poder tener alguna respuesta pronta por parte de la directiva y de la municipalidad en este ámbito", concluyó.
A la espera de reuniones
Olivia Mora, vocera de las cocinerías, señaló que "nosotros desde que salimos del mercado en marzo, no hemos tenido ninguna información directa desde el municipio (…) yo me comuniqué con Karina Maureira, encargada de turismo, en donde nos hizo entrega de un kit de información y además, la idea era poder gestionar alguna reunión con la Seremi de Salud y con la Seremi o Inspección del Trabajo porque tenemos gente que está acogida a la ley del empleo y queremos que nos informen y nos eduquen de nuevo, porque esto será una experiencia totalmente nueva".
Mora, señaló que "probablemente tengamos que invertir y recurrir a algunos gastos extras para volver a atender y abrir nuestros locales, pero tampoco sabemos cuándo. Hemos estado bastante desamparadas por parte de la Municipalidad, a excepción de lo que es el tema del pago de los arriendos en donde se hicieron algunas rebajas a los locatarios, pero no hemos tenido ninguna orientación por parte de nada ni nadie", agregó.
Sobre el pago de las patentes del segundo semestre, Olivia Mora señaló que esperan alguna información por parte de la Municipalidad. "No ha existido ninguna cercanía con nosotros, considero que las cocinerías del mercado son muy importantes para Chillán. Se entiende que hay otras necesidades como las sanitizaciones o ayudas a las personas que están más exigidas con la pandemia, pero por eso estamos buscando la ayuda necesaria que nos oriente a cómo seguir y saber qué hacer".