El perfil de los candidatos que desafían a los clásicos conglomerados
ALCALDÍA POR CHILLÁN. Manuel Reyes, Patricia Pino y Marcelo Contreras, son quizá los postulantes con menor exposición, a diferencia del ex concejal Benavente y la ex gobernadora Paola Becker.
Cinco son los candidatos a la alcaldía por Chillán y dos de ellos son rostros reconocidos por la ciudadanía producto de sus cargos públicos. Se trata del ex concejal por la comuna, Camilo Benavente (PPD), quien además previamente se desempeñó como director regional del Instituto Nacional de Deportes en Biobío, mientras que Paola Becker, independiente apoyada por Renovación Nacional, es también una figura con dilatada trayectoria en el mundo público, siendo su cargo más reciente el de gobernadora provincial de Diguillín. Sin embargo, existen otros tres candidatos que la ciudadanía comienza a conocer mayormente.
Entre ellos se encuentra el candidato independiente apoyado por el Partido Republicano, Manuel Reyes, quien se desempeñó como Oficial del Ejército durante 33 años y actualmente se ejerce labores como agricultor y empresario. Inició su carrera militar a partir de los 15 años, llegando hasta el grado de coronel; Reyes cursó varios cursos de especialidad secundaria, tales como fuerzas especiales o defensa anti aérea, entre otros. Se graduó como oficial de Estado Mayor, teniendo así acceso a ser oficial profesor de academia.
Manuel Reyes destacó su nivel de independencia en materia política, basándose en la meritocracia para conformar su equipo de trabajo. El candidato participó en la lista de la UDI por un cargo a concejal de Chillán en las elecciones de 2016. Tras obtener el segundo lugar de la lista, Reyes, según dijo, decidió abandonar la política. "Me defraudó mucho", declaró. Eso sí, para esta vez se estimuló de participar a través de un proyecto que tilda de ambicioso en materia de desarrollo comunal.
"El desorden que había en la municipalidad, los desfalcos, la falta de probidad, y toda esa plata que se va por corrupción se puede emplear en beneficio de Chillán. Cuando fui candidato a concejal recorrí toda la ciudad y noté que falta un montón de cosas, hay una desigualdad enorme. La calidad de vida ha bajado enormemente, tanto por educación, salud, conectividad, y creo tener la capacidad para poder aportar en tener un Chillán con mejor calidad de vida que la que tenemos hoy", dijo.
Patricia Pino, candidata por el Partido Humanista y Dignidad Ahora, nacida en El Carmen y radicada hace décadas en Chillán, se inmiscuyó en la política porque sentía necesario involucrarse en los movimientos públicos de la región y el país. "Uno tiene que ser parte de esto", dijo. Hace años no quería involucrarse en política institucional debido a la dualidad hegemónica que advertía entre Chile Vamos y la ex Concertación. "No me gustaron esas reglas", dijo. quien se desempeña como s profesora y educadora diferencial.
Más tarde conoció el Partido Igualdad, donde sí se encontró, como dijo su lugar, yendo a concejal en 2016 por Chillán. Tras ello, siguió en política y se cambió al Partido Humanista. "Me gustan sus ideales, todos podemos aportar, y eso me gusta, que todos seamos parte de un proceso", explicó. En 2019 se le deslizó la opción de conformar un equipo para competir por la alcaldía. Luego, tras anunciar María Elena Hellman su precandidatura independiente, se sumó al apoyo para con ella.
Eso sí, cuando se supo que la dirigente citada no iría por falta de firmas ante notaría, Patricia Pino tomó la decisión de ir como candidata. "Queremos estructurar la vocación pública, no buscamos cuoteo político, eso lo queremos erradicar; además buscamos fiscalización profunda en recursos".
A ellos se suma Marcelo Contreras, técnico en Administración de Empresas de profesión, y dirigente político a nivel nacional del Partido Ecologista Verde. Es diplomado en manejo en Recursos Naturales y Cuencas Hidricas, y actualmente matriculado en la Escuela de Activismo Político, vía on line, en la ciudad de Madrid, España.
"Uno siempre busca el bienestar del ser humano, pero aquí había que darle una impronta, y como bandera política, la ecología política en su esencia merece ser difundida, sociabilizada, y también puesta en la política actual", declaró.