Sistema de salud opera al límite: 96,4% de camas críticas ocupadas
COVID-19. Solo hay 132 plazas disponibles para enfermos graves, se disparó la positividad y Sochimi advierte colapso.
Mientras el proceso de vacunación avanza y el Congreso debate la posibilidad de postergar las elecciones fijadas para el 10 y 11 de abril, las cifras de contagios por covid-19 empeoran cada día y ya se alcanzaron los 989.492 infectados desde el inicio de la pandemia, con 23.107 fallecidos confirmados y la positividad más alta que se ha registrado desde junio del año pasado.
Si bien ayer la cantidad de casos nuevos bajó respecto de los días anteriores, pues se informó de 5.394 detectados (mucho menos de los más de 7.000 de las cinco jornadas previas), este número tiene que ver con la disminución de los exámenes PCR realizados: 46.387 ayer versus 75.958 del día anterior. Los nuevos casos a nivel nacional aumentaron 11% en siete días y 31% en dos semanas, siendo el índice de incidencia más alto el de la Región de Los Ríos. Los mayores incrementos, en tanto, estuvieron en Magallanes, Metropolitana, Valparaíso y Aysén.
En cifras reales y comparables, la positividad ayer alcanzó el 11,33% en el país y 10% en la Región Metropolitana, la tercera más alta de este mes.
Todo esto se expresa en la gran prueba que vive el sistema de salud chileno a causa de la pandemia de coronavirus: de las 3.647 camas críticas que tiene la red hospitalaria del país, 3.515 están ocupadas, es decir el 96,4%, y solo quedan 132 disponibles (3,6%). De los enfermos graves, 3.312 estaban con apoyo de ventilación mecánica.
Por esto mismo el Gobierno instruyó que la cantidad de camas para enfrentar la contingencia debe ser 30% mayor a las que hubo durante la primera ola de covid-19 en el invierno de 2020.
Sochimi: sobrepasados
Darwin Acuña, presidente de la Sociedad Chilena de Medicina Intensiva (Sochimi), dijo que las cifras de contagios de marzo "sobrepasaron todas las expectativas" y que el sistema sanitario está al borde de un colapso.
En radio Cooperativa, el médico explicó que están "bien preocupados, más que nada por lo que estamos viviendo y por lo que se puede venir. Los números no nos acompañan para nada y, si bien el esfuerzo de seguir atendiendo y abriendo camas lo estamos haciendo, estamos con muchas dudas de lo que se pueda venir en los próximos días".
"A principios de enero se hizo una simulación de necesidad de camas según cantidad de casos diarios y se empezó a trabajar en base a eso. Lamentablemente nuestras UCI siempre están llenas, entonces ya estábamos con una ocupación basal de 80% para 2.200 camas", añadió el especialista.
"Considerando eso tuvimos un aumento para enero y febrero, en que hubo harto trabajo, pero dentro de todo estaba tranquilo, sobre todo en la Región Metropolitana, donde en general los números fueron bastante adecuados. Con la llegada de marzo se pensó que podía haber un aumento, considerando por supuesto el aumento de movilidad, porque la gente volvía de vacaciones, a los trabajos y con los colegios abiertos", sostuvo Acuña.
"Pero los números sobrepasaron todas las expectativas y las predicciones y nos encontramos en esta situación. (...) Creo que lo que ninguno de nosotros pensó era que finalmente la demanda por camas iba a ser tan alta y que nos tiene en estos momentos al borde del colapso".
La paradoja chilena
Ayer el diario estadounidense The New York Times dedicó un largo artículo a la paradójica situación de nuestro país en la lucha contra el covid-19. La publicación destaca que "Chile ha vacunado a sus habitantes más rápido que cualquier otro país en el mundo (6,5 millones de personas hasta ayer), pero los casos de virus volvieron a crecer, porque el gobierno flexibilizó muy prematuramente las restricciones para viajes, negocios y colegios, dicen los expertos".
Citada en la nota, la doctora Francisca Crispi, presidenta del Colegio Médico metropolitano, afirmó que "nadie cuestiona el éxito de la vacunación, pero se produjo una falsa sensación de seguridad y el gobierno se apuró en reabrir negocios y en crear un permiso de vacaciones".
Ejército separó a 14 funcionarios por fiesta
El Ejército separó de sus funciones a 14 militares involucrados en una fiesta clandestina desarrollada en Angol. Según informó el coronel Manuel Provis, comandante del Regimiento Caballería 3 Húsares de esa ciudad, del total de 18 detenidos informados por el evento, 14 pertenecían a la agrupación. Tras una investigación, Provis indicó que "el regimiento, tras recopilar los antecedentes necesarios, estableció que los soldados y el clase transgredieron las disposiciones sanitarias del covid-19, así como también cometieron faltas graves a la disciplina de las Fuerzas Armadas".